🌼omegaverse
🌼AU escolar
🌼 1000-2000 palabras
🌼 Lectura ligera, capitulos y párrafos cortos
🌼 tanjiro 15, omega
🌼 giyuu 21, alfa
🌼 historia tranquila, con un poco de drama al principio
🌼parejas extra:
🥀nezuko x kanao
🥀uzui x zenitsu
🥀 inos...
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
— ¿tienes hambre?— pregunto el azabache
— un poco
— está bien, ¿quieres que te cociné algo o vamos a comer a alguna parte?
— no, no se preocupe, yo comeré cuando llegue a casa
— no, está bien no te preocupes, si tienes hambre no me molestaría para nada hacerte o comprarte algo para que comas
— bueno..., Me gustaría probar la comida que usted hace...
— está bien — le respondió el azabache con una sonrisa,se levantó de la sala y saco unas cosas del refrigerador mientras tanjiro estaba algo incómodo en el sillón sin hacer nada. Saco su teléfono y empezó a fingir que estaba viendo o chateando con alguien. Moviendo sus dedos por la pantalla para que se viera más creible.
Aunque solo estaba observando el menú de su teléfono.
El pelinegro se dió cuenta de la incomodidad del chico gracias al olor que desprendía, así que prendió la televisión y le dió el control al de hebras rojizas
— pon lo que quieras— le dijo con una voz tranquila y amable.
El pelirrojo se sonrojo levemente por el tono de voz del alfa, y torpemente asintió con la cabeza mientras tomaba el control
— no estés nervioso, siéntete como en tu casa
— está bien, gracias giyuu-san
— no tienes por qué agradecer
El de ojos carmesi comenzó a buscar algo para ver mientras que el mayor cocinaba.
Paso casi una hora cuando el alfa sirvió la comida que el había preparado.
Eran unos onigiri, puso la bandeja de estos mismos en media de la mesa y ambos se sentaron para comenzar a comer en silencio.
— giyuu San! Esto está demasiado rico!!— dijo el pelirrojo feliz y emocionado
— me alegra que te guste— le respondió el alfa con una sonrisa
— no, en serio! Esto es delicioso
— significa mucho viniendo de ti
—¿ por qué?
—¿ y como supiste que querías estudiar gastronomía?— pregunto el mayor
— pues, me gusta mucho cocinar, se me hace muy divertido, tantos platillos, me emociona aprender tanta variedad y que la gente le guste lo que hago
— vas por buen camino
— encerio?
— si, a mí no me gusta lo que haces — el de mechones rojizos hizo una expresión de desilusión— me encanta
