Evitar El Dolor.

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Taehyung caminaba por Gangnam junto a Baekhyun, habían dejando a Jungkook en su agencia unos minutos antes, aquel trío se había vuelto inseparable en los escasos cuatro días que llevaban conociéndose.

Era viernes y aunque su primer plan fue asistir al sótano, Taehyung convenció a Baek de mejor ir a otro lugar bajo la excusa de que la pelea estelar nisiquiera era ese día.

Por qué si, a pesar de todo Taehyung lo sabía bien, había recibido una invitación a aquel "magno evento", seguramente gracias a Jimin, el rubio había intentado comunicarse con él todos esos días sin recibir respuesta, al igual que el castaño.

La pelea se llevaría a acabo el día sábado en Icaros, bajo las reglas de ese, tenía un pase VIP, por lo cuál sólo tendría que llegar al lugar, luego sería escoltado a un palco, la ubicación exacta sería soltada media hora antes del evento, el cuál podría empezar de diez pm a doce am, el único requisito que se le solicito fue que estuviera cerca de la ciudad de Busan, o dentro de ella, eso si que le sorprendió.

Se dio cuenta de que tan burlesco podía ser el sótano con el gobierno, pues sus principales sedes se encontraban en ciudades grandes, el búnker en Gwanju, Icaros en Busán y el edén en Daegu, ese último, lo sabía gracias a que Hoseok se lo había comentado en una platica casual, sin embargo nunca lo había visto.

También, gracias a su nueva amistad con Baekhyun había conocido algunos datos más del sótano, como su base creada en la mismísima religión católica, tenían un rey, que asemejaba a Dios, el cuál era la bestia más fuerte y el rejente de las peleas en Icaros, a su vez, tenían un cielo y un infierno, el Edén, donde sólo algunos podían pelear, aquellos elegidos por el mismo rey, luego estaba Icaros, el infierno, donde aquellos que comenten algún pecado se enfrentan a sus culpas y por último, el búnker, él lugar que asemejaba la tierra, el lugar en el que todos podían aspirar a ir al cielo o al infierno.

Existía algo llamado los doce discípulos, esa era información que Taehyung nunca había escuchado, Baekhyun le explico que aquello era la "divinidad del sótano", eran doce bestias elegidas por el rey, los parámetros para ser elegidos eran simples, llamar la atención del rey, sin importar patrocinadores o fama, el rejente tenía que ser imparcial ante todo, por lo cuál, tenía prohibido hablar con patrocinadores que no fueran el suyo, bestias que no fueran sus discípulos o el personal de las peleas.

Los doce discípulos existían únicamente para un objetivo, al contrario de la religión católica, donde los discípulos existían para servir a Dios, en el sótano existían con el único objetivo de derrocar al rey.

—¿Tae?, ¡Taehyung!. —Él peli plateado fue sacado de sus pensamientos por la melódica voz de su amigo pelirosado. — tú teléfono no para de sonar.

—ah si. — respondió sacando el aparato de su bolsillo.

Jung Hoseok(No contestar)
[4:50 pm]
Fuiste un gran sueño, pero es hora de despertar.

Hoseok se quedó mirando unos segundos aquel mensaje, era el último que le mandaría, los últimos días había intentado contactar a Taehyung de muchas maneras, incluso, pensó en ir a su escuela (idea que fue descarta por Jimin), todo había sido un mal entendido, si, el había estado con el rubio, pero todo era meramente amistad, deseaba poderlo aclarar, sin embargo él menor no le daba oportunidad de hacerlo.

Hoseok no rogaría más.

No porque no quisiera a Taehyung, no porque no creyera que valía la pena, porque para Hoseok, Taehyung era la representación misma de la perfección, su fino cuerpo, su cara bien parecida, su ronca voz, todo en él le gustaba, por eso mismo si tenía que alejarse en ese momento lo haría.

Elegant Underground /HopeVWhere stories live. Discover now