— Ya puedes bajarme Yuki. — La pelirosa tocó el hombro del ojinegro mientras desviaba la mirada un poco avergonzada.
— Hmp. — Se agachó levemente para que pudiera ponerse de pie — ¿Te puedes mantener sola? —
— Eso creo. — Intento hacerlo pero se tambaleó un poco haciendo que el Takayama la rodee con su brazo.
— ¿Qué debemos hacer ahora Malé? — Preguntó.
— Mira allí. — Señaló la pelirosa — Es una clase de código. —
— Si usted no posee el cielo, consigue los conocimientos que los representa.
Si usted no posee la tierra, correrá tan lejos en búsqueda de fuerza.
Si usted tiene los pergaminos del cielo y la tierra, los senderos de la voluntad peligrosa se pone segura. — Leyó el peliplata — ¿Alguna idea, Sakura? —— ¡¿Porque a mí no me toman en cuenta Malé?! —
— Porque eres demasiado idiota para saber lo que significa ¿o me equivoco? — El pelirrojo se limito a fruncir sus labios mientas cruzaba los brazos a la altura de su pecho.
— Creo que debemos abrir los pergaminos. — Dedujo la pelirosa luego de un rato — Y al mismo tiempo. —
Jiro y Sakura, con ayuda de Yuki, se acercaron a la mesa que se encontraba dentro y abrieron los pergaminos al unísono dónde comenzó a salir bolas de humo.
— Es un jutsu de invocación ¡alejense! — Exclamó él de cabello plateado.
De pronto apareció Bae con su típica cara de fastidio.
— Felicidades, completaron la segunda fase con éxito y bla bla bla. —Suspiró harto.
— ¡Yo siempre confíe en nosotros Malé! — Corrió hacía su compañero de equipo y comenzó a abrazarlo fuertemente — ¡Lo hicimos Yuki-Kun! ¡Lo hicimos Malé! —
— Suéltame imbécil. — Comenzó a forcejear.
— Guarda tus energías Jiro, participarán en las preliminares. —
— ¿Preliminares? — La ojijade alzó una ceja — ¿A qué se refiere? —
— Más de los planeados han pasado a la siguiente fase, por lo cual, deben enfrentarse ente si pa-. — Se detuvo y rodó sus ojos — Se los explicarán allí, yo no tengo ganas. —Volvió a desaparecer.
— Esa es la actitud Bae-Sensei. — Murmuró sarcástica — Vamos chicos. —
Los tres se adentraron a dónde los enfrentamientos de llevarían a cabo y encontraron a todos los equipos de Genins formados en una hilera.
..
..Luego de la pesada explicación del hokage subieron a las gradas y la pelirosa y el ojivioleta se desplomaron en el suelo por el cansancio.
— ¿Porque tan agotados? Si no hicieron nada. — El shinobi de la lluvia sonrió de lado engreídamente.
— Ya era extraño tu buena actitud" - La pelirosa frunció el ceño — igualmente una parte de mi extrañaba al Yuki de siempre. — Se encogió de hombros.
— Primer enfrentamiento, Sasuke Uchiha vs Yoroi Akadō. —
— ¿Ese no es el compañero de Hebī-Chan? — Cuestionó el de iris morada.
— Creo... —
Un escalofrío recorrió la espalda de ambos al ver las marcas negras que anteriormente habían estado en el cuerpo de su compañero y luego, presenciar como el azabache casi mata a su oponente.
— Segundo encuentro, Zaku Abumi contra Shino Aburame. —
..
..— Octavo combate, Jiro Matsuyama... —
— ¡Ay eso no Malé! — Sollozó — ¡Sigo yo Saku-Chan! ¡Sigo yo! ¡¿Entiendes eso?! — Comenzó a moverla hacia delante y hacia trás.
— ¡Ya cállate! — Le dió una bofetada — No seas miedoso carajo. —
— H-Hai. — Asintió sobando la zona del ataque.
— Contra Hebī Dōyō. —
— Tengo miedo. — Lloriqueo — Ayúdame Saku-Chan. —
— Como quieras. — Ambos se pusieron de pie y se acercaron a la baranda — Cumple tu promesa y pateale el trasero. — Le dió un empujón lanzandolo hacía la arena.
— ¡No me refería a ese tipo de ayuda Malé! —
— Comiencen. — Ordenó Hayate.
— Interesante. — Mencionó un hombre tras ella haciendo que de un pequeño salto.
— Bae-Sensei. — Suspiró con pesadez — Casi me mata de un susto. —
— ¿Cree que Jiro ganará?, Bae-Sensei. — Cuestionó Yuki.
— Yo apuesto por él. — Se encogió de hombros — Su oponente no es muy fuerte, eso le da una ventaja, si no comete una estupidez. —
✓ 🅲🅰🅿🅸🆃🆄🅻🅾 🅴🅳🅸🆃🅰🅳🅾
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нιנα ∂є ℓα ℓℓυνια
FanfictionSakura, Takayama Yuki, Jiro Matsuyama y Bae Satō eran el equipo siete de Amegakure, una aldea liderada por el padre de la primera, Yahiko. Si algo que no definía a su equipo era la normalidad. ¿Porque? Eso lo vamos a descubrir en un tiempo, junto...