Love, Jennie. [JENLISA] [G!P] (Adaptación)

CAPÍTULO 8

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5 AÑOS DESPUÉS

-- ¡Ella! -- Caminé furiosa a su habitación.
-- ¡Mamá ¿por qué no tocas!? -- exclamó. Estaba sentada sobre unas almohadas con su amigo al lado. Estaban escuchando una canción electrónica y estaba tan fuerte que perforaba mis oídos.
-- La música está muy fuerte -- le dije.
-- ¡No te escucho! ¡La música está muy fuerte! -- me respondió. Me acerqué hasta el parlante y le bajé -- No le bajes
-- Si, la música hay que sentirla -- la apoyó él. Los miré fijamente a ambos pero algo llamó mi atención.
-- ¿Te pusiste labial? -- le pregunté a mi hija.
-- Privacidad, Mamá ¡Por favor! ¡Sal! -- me lanzó una almohada. Furiosa cerré la puerta de su habitación.

¿Por qué tuvo que crecer y convertirse en adolescente?

Mi pequeña y dulce Ella ya no era tan pequeña y tampoco tan dulce.

Por lo menos la música ahora estaba baja.

Mis padres se iban de viaje al Mediterráneo y yo estaba demasiado nerviosa.

-- ¿Llevan la ropa interior térmica que les regalé? -- le pregunté mientras los seguía hasta la camioneta -- ¿Llevan efectivo? Tengo un poco si necesitan. Teléfono, cargador, la cartera ¿papá?
-- Jennie, estamos bien hija. Puedes dejar de preocuparte como mamá ganzo -- dejó el bolso en el portaequipajes y me dio un fuerte abrazo -- Te quiero.
Madre abrazó a Ella, luego a mí y rápidamente subió a la camioneta diciéndonos que nos amaba.
-- ¡Adiós! ¡Buen viaje! -- les gritó mi hija.

Mis padres vendieron su casa y se fueron a viajar mientras yo me quedo en casa atormentando a una niña de 12 años por un labial.

¿Existe mayor evidencia de lo jodida que está mi vida?

Y por supuesto, nada mejoró cuando estaba en mi trabajo lustrando el suelo de la recepción y Sana Minatozaki apareció de la nada, deteniéndose al verme.

-- ¡Sana! -- mierda. Me puse de pie rápidamente.
-- Jennie Kim. ¿Trabajas aquí ahora? Preguntó anonadada.
-- A-acaban de promoverme a recepcionista -- me acerqué al mesón donde estaba Jisoo.
-- Wow felicidades.
-- Pero tú, tu éxito es asombroso.
-- Acabo de llegar de Marruecos, mañana vuelo de nuevo a Nueva York, Boston y Chicago. Una pesadilla -- Dice un tanto presumida.
-- Mi corazón se desangra -- dice Jisoo irónica.
-- Si.
-- ¿Boston? ¿Por qué no buscas a Lisa? -- Jisoo me da una furiosa mirada. Ni siquiera sé porqué dije eso.
-- Lalisa Manoban -- dice con interés -- ¿Ustedes siguen en contacto?
-- Por supuesto. Le agradará ver una cara conocida.

-- Perfecto, más tarde me das sus datos -- Me responde mientras Jisoo le da de mala forma la tarjeta de su habitación -- Gracias. ¡Oh! Pueden enviar "Evian'' es lo único que bebo. Tres botellas y limpieza dos veces al día -- agrega para luego irse.
-- Así de jodida está tu vida -- me dice mi amiga.

****

Estaba sirviéndome un café cuando comenzó a sonar el teléfono de mi casa.

-- ¡Mamá! -- digo al contestar -- ¿Qué tal Niza? ¿Encontraron buenos restaurantes?

Antes de beber un sorbo la escucho sollozar.
-- ¿Mamá qué pasa? -- dejó la taza encima de la mesa.
-- Y-yo...Jen...-- vuelve llorar.
-- ¿M-mamá qué sucede? -- mis ojos se llenan de lágrimas al escucharla llorar. Casi ni puede hablar -- Mamá, no te entiendo.
-- Tu papá -- rompe en llanto otra vez y las lágrimas acumuladas en mis ojos caen a la vez.