Maldita Tentación (Min YoonGi)-(BTS)

일

<< La Casa del frente de los Min, ha estado abandonada por más de cinco años, el pequeño Yoon Gi de nueve años, recordaba a los niños que vivían anteriormente allí, después de todo Sia y Jung Hie eran sus amigos, compartieron momentos muy buenos en esa casa, cuando jugaban a las guerras en el patio trasero, a los caza tiburones en la piscina y a los exploradores en toda la calle, ellos se divertían mucho pero hasta que sus amiguitos tuvieron que mudarse a la ciudad.

Era muy triste para Yoon Gi, estar solo, tenía a su hermano menor Hoseok pero este no salía a jugar como le gustaba al niño Gi, Pero un día el pequeño Gi vio como un gran camión se estaciono frente a esa casa, y un auto familiar entro a la cochera.

Una familia nueva se mudaría a esa casa, le emociono tanto la idea de que hubiesen nuevos niños que quisieran ser sus amigos, que bajo corriendo por las escaleras de su casa y salió, para posarse en la acera y mirar como la familia se abajaba.

El señor y la linda señora se bajaron primero mirando a su alrededor con una linda sonrisa, Yoon Gi sabía muy bien que deberían ser los padres, las puertas de atrás se abrieron, las dos, eso significaban que habían muchos niños en esa familia, pero se bajaron dos chicos, Gi le calculo unos quince años a cada uno, era muy pequeño para jugar con chicos tan grandes.

Hasta que bajo una niña y cerraron las puertas del auto, no habían más niños, el pequeño se decepciono al saber que no habían niños para que jugaran con él, tendría que resignarse a jugar con su hermanito.

La diferencia entre los hermanos es que, Hoseok amaba estar con su madre, a Gi también le gustaba el piano, la música y el baile, pero más amaba jugar a las batallas, correr y jugar futbol, la niña de piel morena clara, ojos café y cabello riso, llamo la atención del niño.

No había visto una niña así, en los pocos años de su vida, estaba acostumbrado a ver niñas, piel pálida, cabello negro liso, pero no en su tono de piel.

<< ¿Sera de este mundo? >> Se preguntaba el pequeño, quedando en su asombro al verla.

La niña capto su presencia al momento de voltearse a ver las otras casas, los dos pequeños desconocidos cruzaron las primeras miradas, aunque Gi no tenía una mirada muy llamativa y linda, la niña le sonrió y le saludo con la mano, pensativo le respondió de la misma manera pero sin la sonrisa, uno de los grandes chicos que bajaron junto a ella <<Gi sabía que ellos eran sus hermanos, se parecían en el tono de piel, solo que ella tenía el cabello castaño y ellos en tono amarillento>> y la tomaron de la mano para llevarla adentro de la casa.

Ha Yoon Gi, le causo intriga la desconocida nueva vecina, pero le dolía que no hubiesen niños con quien el pudiera jugar.

{*****}

Un día, los hermanos decidieron salir a jugar al frente de su casa ¿El pequeño Hoseok Jugar con Gi?, su madre no se encontraba en casa y los estaba cuidando la niñera de siempre, una anciana que solía dormir todo el tiempo, el mayor era el niñero de su hermano siempre que sus padres salían, jugando futbol el mayor la pateo tan fuerte que cayó en el jardín del frente.

-¡Es tu culpa!- Dice el menor, señalando en dirección a la pelota al otro lado de la calle.- Ve a buscarla.

-Ve tú.- Responde el mayor.

-Tú la pateaste muy fuerte, tú debes buscarla.

-Soy el hermano mayor, debes ir a buscarla.- Replica Gi

-No fue mi culpa.- Se cruzó de brazos y se sentó en el césped.

El pequeño sí que sabía hacer berrinche, el mayor rodo los ojos y no le quedó más remedio de correr hasta el otro lado de la calle, donde Vivian los Wilhert sus nuevos vecinos, las hermosas flores en abundancia no dejaban ver donde estaba la pelota, camino lentamente por el jardín pero no encontraba nada ¿Dónde estaba la pelota?, se preguntaba el mayor, se acercó a un espacio donde no habían flores para ver si estaba allí.

-¿Qué buscas?- El mayor se asustó, al voltearse tenia a la pequeña vecina en frente.- ¿Te asuste?

-No claro que no.- Respondió Gi

-¿Entonces que buscas?- El tono de la niña era tan inocente.

-Nada que te importe.

El mayor era un poco impaciente y de vez en cuando grosero, era una personita encantadora con un mal carácter, pero así lo querían sus padres, a la niña no le gusto para nada la respuesta del niño, y cruzo sus brazos poniendo mala cara.

-Si estás buscando tu pelota déjame decirte que la tiene mi perro.- Los ojos del Mayor se abrieron hasta mas no poder, los Wilhert tenían un enorme cachorrito.- Wilow está jugando con ella atrás, si quieres ve por ella.

El mayor obviamente no quería ir a buscar la pelota, sabía que ese enorme cachorrito se lo tragaría de un solo bocado, pero no podía mostrar algo de miedo delante de la niña.

-Quédate con la pelota, papá puede comprarme otra.- Dijo encogiendose de hombros

-Cobarde.- Dice la niña.

Ha Gi nunca le había gustado que le dijeran esas cosas y mucho menos que lo trataran mal, aunque así tratara a las personas, sus mejillas se pusieron rojas como un tomate de lo molesto que estaba.

-No soy un cobarde.- Dice el niño apretando sus puños.- ¿Quién te crees que eres niña?

-¡La dueña de la casa!- Le grita la niña que también estaba molesta.

Eso no estaba nada bien, los dos niños estaban molestos, Hoseok miraba desde la distancia como los chicos estaban mirándose con rabia, tenían el mismo carácter aunque el mayor mostrara cara de molestia siempre que quisiera, la niña siempre tenía una sonrisa en los labios, Gi soltó un gran suspiro y soltó sus puños, no iba a perder el tiempo con una niña.

-Mejor me voy.- Dijo dándose la vuelta y comenzó a caminar.

-Estas muy blanco... ¿Acaso estas muerto?- Pregunta la niña.

Se detuvo y se volteo a verla ahora si estaba molesto, ¿Cómo podía preguntarle eso la niña?, camino rápidamente hasta ella, quería gritarle, pero no pudo, porque Wilow ya estaba encima de, el primero, la niña comenzó a reírse tanto por como su perro hizo caer al niño enojón y estaba encima de él.

En cambio Yoon Gi estaba asustado de tener tan grande bestía sobre su cuerpo, sus patas estaban en su pecho sosteniéndolo para que no se moviera y no dejaba de olfatearlo, el pobre niño podía hacerse en los pantalones, pero la niña quito de encima al perro dejándolo libre.

-Wilow tonto.- Regaña al perro y este se sienta.- Siempre quiere jugar.

-Gracias.- Dijo levantándose y saciándose la camisa.- No, no estoy muerto.... ¿Y tú? Te dejaron quemar en el horno.

La niña se puso seria, nunca le había gustado que le dijeran así, solo era morena y nada más, pero esta se puso roja completamente roja, y grito.

-¡No me digas así!- Respiraba agitadamente.

-Soy Yoon Gi.- Dice el mayor para calmar ese ambiente tenso, o al menos eso quería que creyera la niña, el solo excusándose para no ser golpeado por ella.

-Eloise.- Ella pone sus manos detrás de su espalda.

El niño ladeo su cabeza al no entender ese nombre, todo de ella le parecía extraño, su tono de piel sus ojos claros, su cabello rizo, pero extraña y todo le parecía muy linda. >>

Desde ese momento los dos pequeños comenzaron a ser muy buenos amigos, nadie absolutamente nadie, sabían cómo ese par de niños podían llevarse tan bien, ni si quiera sus padres, tenían unas personalidades tan diferentes, ella tan alegre y sonriente, el serio y siempre molesto.

Pero así son las cosas de la vida, dos pequeños sin nada en común, se volvieron grandes amigos, él jugaba a las batallas y ella era la enfermera que le curaba de las heridas, a ella también le gustaba el piano y el baile, le gustaba la lectura, todas las noches la niña le pedía a sus padres que le leyera un cuento, le gustaba imaginarse que era una de esas princesas y que su príncipe azul vendría por ella al rescate, lo más sorprendente de todo, era que el mayor le regalaba esos cuentos de princesas solo para ella.