Inevitable (Oscar Enestad)

Capitulo 25

Vale, estoy caminando por la calle, congelándome porque una brisa helada me esta dejando la cara roja y los ojos vidriosos. Puto frío y puta Suécia. Escondo mi nariz en mi bufanda y acomodo mis orejeras. Hoy es el día del festival. Antes de ayer estuve practicando con Oscar en casa y nos salio muy bien, al despedirse y salir por la puerta me gritó que Britt y él ya no estaban juntos, no pude evitar sonrojarme y cerrar la puerta rápidamente por los nervios. Ahora tampoco puedo evitar que mis mejillas esten así, claro que con este frío... Ayer acabamos de decorar la clase y los ensayos quedaron genial. Se decidió que para el turno del mediodía, Jules me sustituyera con Gabe. Así podré ir a ver lo que hacen las otras clases, me muero de ganas.

Entro corriendo al colegio y por suerte dentro se está calentito, ¿por que no he venido con Ogge? Muy fácil, el cabrón tiene su turno de trabajo más tarde y llegará sobre las 9:30h.

Saludo a los compañeros que me cruzo al entrar en clase y dejo mi abrigo, orejeras, bufanda y guantes en una zona preparada para ser nuestro armario sin que los clientes de la cafetería lo puedan ver. Me dirijo a Ainoa que ella ahora le toca hacer de cliente infiltrado, cabrona, podrá comer sin pagar.

- Buenos días Alex, ¿preparada para hacer de psicópata?.- me pregunta con demasiado buen humor, comparado con estos días, que ha estado muy rara.

- ¿Cómo puedes estar así con este frío? ¡Joder!- le digo señálando la ventana.

- Aquí ya estamos acostumbrados.- dice una voz masculina demasiado conocida para mi, que aparece detrás mío.- siempre que tengas frío me avisas y así te doy calor.- me dice coqueto, coloca sus manos en mi cadera y me acerca a él, abrazándome por la espalda.

- Así no vas a conseguir que no te dé con la jarra, si acaso que te de más fuerte.- le amenazo y él me hace un puchero colocando su mano en el corazón, yo niego con la cabeza y me guiña el ojo mientras se muerde la lengua. Por dios, que pare, este chico me quiere matar.

- Oscar, lárgate.- le digo empujándole suavemente y se va, riendo y quejándose a la vez.

- ¿Qué pasa entre vosotros dos?- me pregunta Ainoa con una mirada confusa.

- Na-nada.- le digo sin estar muy segura, cosa que maldigo.

- Espero que sea verdad, porque tiene novia.- me dice y eso me molesta bastante, ella no tiene ni idea de nada, claro que no tiene la culpa.

- Han cortado, para que lo sepas.- le digo algo borde, sabiendo que ella no tenía por que saberlo.

- ¿En serio?.- me pregunta desconcertada y yo asiento.- pues entonces genial, haya lo que haya...

. No hay nada, en serio.- le contesto sin estar muy segura si estoy siendo sincera o no.

Llevamos ya unas tres "funciones" con sus respectivos jarrones rotos y la gente no puede estar más eufórica con nuestra clase. Todos dicen que es algo nuevo y me siento orgullosa de formar parte de ello. Nos estamos preparando para la siguiente función, esperando que la cafetería se vuelva a llenar, Oscar está cogiendo su bandeja, y Ainoa me guiña el ojo a forma de saludo, yo sonrio.

- No te lo tengas tan creido.- me susurra Jules al pasar por mi lado, frunzo el ceño y la ignoro.

- Empieza el espectáculo.- nos susurra Ty, cojo mi bandeja con un batido y se la llevo a la mesa de Theo, mientras Oscar le lleva una muffin a Ainoa, que está justo al lado, nos chocamos suavemente.

- ¡Au!- me quejo exageradamente.- ¡ No me vuelvas a tocar en tu puta vida acosador!

- Yo-yo, lo siento.- se diculpa mirando al suelo.- pero yo no te acoso.