20.- Noche

143 21 0
                                    

SeungHyun llegó hasta la casa de su dulce GD

Ops! Esta imagem não segue nossas diretrizes de conteúdo. Para continuar a publicação, tente removê-la ou carregar outra.

SeungHyun llegó hasta la casa de su dulce GD. sin embargo se sorprendió al no encontrarlo. Ahora que ya había sido invitado pudo entrar sin mayor impedimento para poder esperarlo.

Pasaron algunos minutos antes de que escuchara cómo se acercaba, reconoció su voz maldiciendo por lo bajo, instantes después le llegó aquel aroma dulce que tanto adoraba. GD entró al almacén, vestía con ligereza y parecía apurado.

SeungHyun permitió que sus ojos brillaran violetas en la oscuridad antes de que el humano lograra encender la luz, con cierta satisfacción notó como lo asustaba, aunque de inmediato el enojo tomó lugar del miedo.

—¿Qué diablos haces aquí? —inquirió prendiendo las luces, para entonces los ojos de SeungHyun volvían a estar ocultos por el café.

—Te esperaba, ¿dónde estabas? —preguntó, pues podía percibir el olor de alguien más sobre él.

—Salí con un amigo, sólo fuimos a tomar un café al centro... —se detuvo, ¡No le debía explicaciones! Él era quien había entrado a su casa sin aviso—. ¿Cómo entraste? Creí que necesitabas que te invitara.

—Sólo necesitas invitarme una vez.

Se acercó para besar a su GD, su instinto le pedía usurpar con su propio olor el de aquel desconocido amigo, sin embargo en cuanto estuvo a pocos centímetros de su rostro se detuvo. Allí estaba de nuevo aquella pequeña y molesta marca.

GD comprendió lo que ocurría y se alejó, con la sonrisa de regreso en su rostro, le sacó la lengua un momento antes de correr hasta el baño. SeungHyun también sonrió, más bien divertido por la actitud infantil de su GD.

—¿Cuánto tiempo tenemos? —escuchó que preguntaba desde el baño.

—Debemos estar allá en una hora.

—Perfecto, dame sólo media para arreglarme. —dijo, seguido por el sonido del agua corriendo.

SeungHyun cerró los ojos, imaginando la escena que se desarrollaba dentro. En efecto veinticinco minutos después GD salió con el cabello bien peinado y el maquillaje retocado sin la odiosa cruz en su ojo. Sólo que no llevaba nada de ropa, salió únicamente con una toalla blanca enrollada en su cintura.

SeungHyun perdió el control entonces, de nuevo con un movimiento demasiado rápido para la vista se pegó a GD, aspirando con ansia el dulce aroma de su cuello, disfrutando de la sensación de su piel desnuda.

—Basta, Top, si sigues así no vamos a llegar nunca, —se quejó GD, aunque sonaba divertido.

SeungHyun dejó que sus labios jugaran sobre su deliciosa piel por un par de segundos más.

—Te tengo un regalo —dijo al fin, separándose un poco para señalar hacia la cama.

Gd respiró profundo, intentando controlarse antes de dirigirse al lugar señalado, se sorprendió al encontrar un elegante traje de pantalón y camisa negros, pero lo más llamativo era el saco con metálicos de oro viejo en todos lados menos en las solapas y el borde del bolsillo. SeungHyun lo abrazó por la cintura para observar el traje sobre su hombro.

—No me malentiendas, hoy te veías muy bien cuando llegaste... a excepción de la dichosa cruz esa; pero cuando vi este conjunto supuse que se te vería muy bien, además el lugar al que vamos es elegante y quería que te sintieras cómodo —explicó con lentitud.

JiYong accedió sin decir mucho más que un "gracias". No quería aceptarlo pero el traje le había encantado, además si iban a ir a un lugar elegante y más con él mismo manejando un Cadillac negro como el de Top, debía verse a la altura.

Salió vestido con aquel lujoso atuendo que, en realidad, era bastante cómodo, se fijó entonces en lo que Top llevaba: obviamente también iba de traje, este era todo negro desde el saco hasta los zapatos, pero llevaba una corbata y un pañuelo con el mismo color dorado que el traje de GD.

—Estoy listo, vámonos ya, —dijo estirando una mano con la palma hacia arriba, exigiendo las llaves.

—Sospechare que disfrutas más del auto que de mí, —divertido SeungHyun le entregó el objeto deseado.

—¡Claro que sí! Ese bebé ronronea hermoso, alcanza velocidades fabulosos y, lo más importante, no intenta desangrarme cada vez que me subo en él.

Se había dado la vuelta para dirigirse a la salida pero SeungHyun lo atrapó entre sus brazos, hablando directamente sobre su oído.

—Quizá, pero él no te hace estremecer de placer con una mordida, —sintió con satisfacción el estremecimiento que causaba en el cálido cuerpo contrario

GD tardó algunos segundos en restablecerse antes de soltarse de aquel peligroso abrazo y salir de su hogar, seguido de cerca por SeungHyun no tardó en localizar el flamante automóvil y casi corrió a montarlo.

Una vez dentro SeungHyun le dio la dirección para que la pusiera en la aplicación de su celular, pues JiYong ni siquiera conocía bien aquella parte de la ciudad.

Durante el corto trayecto él no se preocupó por eso, simplemente se dedicó a disfrutar de su conducción, siguiendo el mapa y las indicaciones vehiculares.

No fue hasta que llegaron y GD entregó las llaves al valet parking que realmente se preguntó en qué se había metido ahora, el restaurante era elegante y ostentoso. Secretamente se alegró de ir bien vestido, aunque no le daría esa satisfacción a SeungHyun.

Adicción feérica (Gtop)Onde histórias criam vida. Descubra agora