Al filo de la irrealidad.

Una opción

Todo será narrado en tercera persona
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Llegaron a un hotel el Seattle, donde David pidió una Suite.

- Cuando Aro quiere algo, lo hace con estilo - Abre la puerta de la habitación y hace que Laila entre.

Laila observa todo a su alrededor y la suite era asombrosa.

- Te pediré algo para que comas- Anuncia David, lledo hacia el teléfono.

- No tego hambre-. le comenta Laila.

- No estés a la defensiva conmigo. Sabes muy bien lo que etaa pasando.

- Pero aún no entiendo cómo puedes seguir ayudandolos.

- Tengo mis motivos Laila, así como tuviste los tuyos al aceptar venir con Demitri.

- ¿Qué querías que hiciera? ¿Qué viera un enfrentamiento entre la manada y él.?

- Las órdenes de Demitri eran darte la opción de venir. Si no aceptaba, él se iba a retirar-. Las palabras de David asombraron a Laila.

- Fue tú elección venir.

- Yo no sabía...

- Estas dando por sentando muchas cosas Laila y no son así. Los Volturis son despiadados, si. Pero son muy inteligentes. Saben bien lo que quieren. Y no se toman las cosas a la ligera.

Laila meditaba las palabras de David. Sabía que fue precipitado de su parte, pero tenía miedo de lo que fuera a pasar.

- ¿Qué quiere Aro conmigo?

- Por ahora sólo quiere conocerte y darte varias opciones. Sabe que enfrentarse a una manada de licántropos, le traería problemas y muchas bajas.

Laila se reprendió mentalmente por no confiar en la manada.

- Debiste confiar más en la manada Laila. Ellos, si bien es cierto no podrán con todos los Volturis, pero si podrán defenderte.

- El miedo me segó.

- Lo sé, el miedo hace que cometamos cosas sin pensarlo. Es comprensivo. Pero de ahora en adelante, piensa bien antes de actuar -. Se posiciona frente de ella.

- Laila, sea lo que sea que haces para bloquear tu mente, sigue haciéndolo. Aro quiere saber quién es tu punto débil en la manada. Aro no puede saber de Tyler.

Sus palabras sorprenden a Laila, ella pensó que diría el nombre de Paul.

Pasaron las horas y Laila procesaba sus palabras. David hacia guardia dentro de la habitación y Dimitri estaba en el techo del edificio que daba justo al lado de la habitación de Laila.

- Demitri está en posición- Advirtió David.

- ¿Puede escucharnos?.

- Si hablamos más bajo del tono normal, no.

- Tu podrías escuchar, yo no a ti.

- Es hora que comiences a utilizar tus dones Laila -Sugiere- Concéntrate y podrás escuchar el menor de los ruidos a tu alrededor.

Me concentré e hice lo que me dijo. Luego de mucho esfuerzo lo logre.

Logre escuchar cada diminuto sonido, las personas hablar en las habitaciones conjuntas y otros ruidos en las habitaciones que no debería escuchar, personas caminando por la calle y la música de los autos.

- Lo estas logrando- me dijo David.

- Ahora abre los ojos y sigue concentrada- me sugiere y al darme cuenta, este me hablada sin siquiera abrir mucho los labios.