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"Creo que este es el último." Hope coloca otro de los jarrones feos de la Sra. Hayes en una mesa del sótano de Sebastian.

La fiesta empieza en media hora, aunque Hope no espera que nadie aparezca hasta un poco más tarde. Ha estado aquí desde que terminó la escuela. Hasta ahora, Hope ha pasado la mayor parte de su Halloween moviendo objetos caros que la familia de Sebastian no quiere que sean destruidos en el desorden de la próxima fiesta.

Hope está haciendo todo el trabajo físico mientras Sebastian mezcla las bebidas arriba, porque aparentemente ha descubierto una combinación de refrescos que hace que el alcohol sepa realmente bien.

Probablemente sea una excusa para ser perezoso.

No tiene sentido que haya un musculoso jugador de fútbol holgazaneando en la cocina mientras Hope, la pequeña adolescente, mueve todas las cosas pesadas.

Hope decide subir las escaleras para quejarse de eso, pero va más despacio cuando está a la mitad de las escaleras. Siente el peso de su teléfono en el bolsillo y se detiene, preguntándose si no sería demasiado desesperado enviarle un mensaje a Josie dos veces seguidas.

Los días previos a Halloween han sido largos y cansados, llenos de ensayos para las Regionales, agotadoras prácticas matutinas de las animadoras, y el comportamiento extrañamente distante de Josie.

Josie ha estado esquivándola toda la semana - sentada lejos en las reuniones de Glee, no siguiendo a Hope en el baño, y acortando sus frases excesivamente al enviar mensajes de texto. Hope no tiene ni idea de lo que le pasa, pero tiene un repentino aprecio por los chicos que tienen que lidiar con sus novias difíciles.

No es que Josie sea su novia.

¿O tal vez lo sea? Hope no lo sabe por el momento, pero probablemente podría darse cuenta si Josie actuara con normalidad.

"¡Hope!" Sebastian llama. Su acento se ha vuelto más marcado, lo que indica que ya ha bebido un poco. "¡Ven a probar esto!"

Honestamente, Hope no puede creer que algunas personas piensen que se ha enrollado con Sebastian. Se siente como si él fuera su hermano menor, al que constantemente tiene que impedir que aparezca en la escuela con una llamativa capa de vampiro.

La capa está haciendo una aparición ahora. Es el único momento del año en que puede usarla sin que se burlen de él, así que Sebastian está vestido con un traje de vampiro completo. Lleva un elegante chaleco rojo vino y una gota de sangre falsa bajo sus labios para que coincida. Su capa es negra y fluye por su espalda, lo suficientemente grande como para que la mitad de ella descanse en el mostrador cerca de sus colmillos de plástico.

El disfraz es bastante ordinario. Si ella pudiera opinar, le habría puesto un traje de gladiador para que pudiera estar sin camisa. Siempre es bueno hacer alarde de los abdominales, especialmente cuando tratan de parecer una pareja poderosa y sexy.

"¿Qué pasa, Drácula?" Hope pregunta mientras se une a él.

Sebastian está agitando un tazón de ponche con una cuchara gigante. El líquido es un púrpura-azul antinatural y huele a mil tipos diferentes de alcohol mezclados. Hay finas rodajas de naranjas y limones flotando en la parte superior, pero están empapadas y teñidas por el ponche.

Parece peligroso ingerirlo.

Sebastian baja una copa sin dudarlo y procede a servirle una. Hope frunce el ceño ante la bebida, pero prueba un sorbo de todas formas.

"Sabe a ácido de batería". Hope tose y se cubre la boca, haciendo muecas. Se necesita una cantidad insana de esfuerzo para tragar. "Oh Dios. Creo que ya estoy borracha".

Nos Tomamos El Tren De Medianoche (a cualquier parte) -Hosie-Where stories live. Discover now