Capítulo 42. Amigas geniales & no se cual hace de mi novia.

7.4K 380 84
                                    

-Maia es simpática - me dijo una vez se sentó en la silla. Yo me límite a asentir.

Segundos después, Maia entró en la sala con una silla en la mano. La colocó cerca de Laura y se sentó.

Se creó un silencio incómodo mientras Maia nos observaba.

Laura estaba algo nerviosa, podía verlo en la forma en la que jugaba con sus dedos sobre la mesa.

-Y bueno... ¿desde cuando hacéis esto? Me refiero a lo del engaño a la familia- dijo Maia sonriente.

-Un mes más o menos- le contestó Laura subiendo la cabeza para mirarla.

-¿Cómo pudiste aceptar eso?- le preguntó Maia- Es decir, yo hubiera dejado que aprendiera la lección- dijo riendo. Laura la secundo y yo me hice el ofendido.

-Bueno, tiene dinero, así que podrá comprarme unas joyas como recompensa- bromeó.

-¡Vaya, qué amigas tan geniales que tengo que no me harían un favor tan insignificante! - dije sarcástico.

-Bueno, no creo que a Maia le cueste mucho- dijo Laura sonando obvia.

-Yo creo que si me costaría, no soy buena actriz...- Maia inmediatamente reparó en su error- ¡Claro! Si yo no fuera realmente su pareja, sí- dijo nerviosa. Yo me tensé un poco.

-Está bien- dijo Laura algo dudosa.

-Realmente tienes un gusto genial. Me encanta tu conjunto, enserio- le dijo Maia sonriente mientras a miraba el vestuario de Laura. No puedo decir que no me había fijado yo también.

Sus piernas lucían perfectas bajo esa falda azul que adornaba su cintura. Era corta, unos cuantos centímetros sobre su rodilla. Llevaba una linda blusa blanca que marcaba su pecho y su vientre plano. Los colores de su conjunto, y el dibujo de su blusa, le daban un toque inocente que solo la hacía más irresistible. Sin duda con ese vestuario me daban ganas de terminar lo que había comenzado en el ascensor.

-Gracias, quizá podemos ir un día de compras- le contestó.

-Claro, Ross nos puede llevar- dijo ella riendo.

-Voy para cantante, no para taxista- dije riendo. Los tres comenzamos a reír de mi chiste malo.

-¿Y tienes novio?- le preguntó Maia. Yo ya estaba esperando un "Sí", seguido de un "se llana Cody".

-No, sólo tengo de "novio" al mismo que al tuyo- dijo riendo. Maia también río.

-¿Y Cody? Pensé que tú y él...- no me dejó acabar.

-No realmente, y te va a sorprender lo que me dijo en la cita...- se escuchó el timbre que avisaba de un nuevo cliente en la tienda. Maia hizo un ademán para que la disculparamos y salió.

Laura y yo nos miramos cuando escuchamos gritos de alegría y varias voces.

Cuando escuchamos que Maia nos llamaba, decidimos salir.

Vimos a mi madre y a Ellen hablando animadamente con Maia.

- ¿Qué hacéis aquí? - les pregunté nervioso.

Con ellas aquí, esto iba a ser un desastre. Tenía que aparentar ser novio de Laura, porque es lo que ellas piensan, pero a la vez, tengo que parecer cariñoso con Maia porque Lau piensa que ella y yo estamos en una relación... ¡Ya no se cual hace de mi novia!

¿Lo más gracioso? Que ninguna de las dos lo es.

-Hemos venido a comprar unas flores para decorar la mesa esta noche - dijo Ellen.

Amor por contrato. |RAURA|Where stories live. Discover now