Capitulo 2

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Que bien me acuerdo de esa conversacion, me pedias que te enviara audios tocando el piano, y yo componía canciones para ti y te las enseñaba. Pero no decía a quien estaban dedicadas. Hubo algunas veces que hasta te decía que eran de Bethoveen o de Mozart y tu te lo creías.

Me encanto cuando me hablaste por whatsapp justo cuando estábamos al lado, viendo una peli en el cine. En ese instante me mosquee mogollón y empeze a pensar que eras un cobarde y que no tenias huevos de decirme ni “hola" ala cara, siempre y cuando, estuvieran ellos delante. Ellos, tus amigos. Son muy majos pero odio cuando estas con ellos. Porque dejas de ser el chico romántico que me dice frases poéticas por whatsapp a ser el simple chico que se da ostias con sus amigos y se comporta mal, ese “chico malo" que tanto les gustan a mis amigas, por alguna razón yo soy diferente.

Como olvidar ese “feliz año" que me escribiste por was que me puso nerviosa toda la puta noche. Como olvidar ese día en ferias en el que le tiraste un japo al de la atracción por que había dos sitios libres y no me habían dejado montar con tigo, esas caras que me ponias desde lo alto, y yo te sonreía. Ese día fue probablemente uno de los mejores. Ese día en el que baje contigo desde el campo de fútbol, que fuimos hablando y me encanto.

Pero por desgracia no todos los momentos que he pasado contigo han sido asi de... Como explicarlos... PERFECTOS! Por ejemplo ese día en el que nos daban las vacaciones de navidad en el instituto, en el que me dijiste (vía persona cotilla de un lado para otro enviando mensajes, ya que somos tan cobardes como yo hablaba de el antes) que te llevaba todo el día siguiendo. Eso no era verdad. Y me enfade mucho, pero a los días se me pasaron.

10 de EneroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora