UNA LOSER MÁS - [ it y it 2 ]

Capitulo 10

—¿Chi...?—Voy a decir, pero cuando voy a encaminarme con ellos, parece que hay un cristal que no me deja avanzar. Poso mis manos sobre el cristal, no podía pasar. Intento ir hacia atrás pero también hay otro cristal. Estaba atrapada.—¿Bill?—Entonces el se da la vuelta y también se da cuenta de que no puede pasar.

—Judith—Dice posando su mano en el cristal. Entonces el pequeño cuadradito se empieza a llenar de un liquido rojo.

—Bill... ¿qué es esto? ¿es sangre?—Digo mirándolo con asco. La sangre ya iba por mi cadera—Bill, ayúdame.

Parpadeo rápidamente intentando olvidarme de ese momento. Pero presenciaba algo parecido.

—¡Chaval!—Seguía gritando Bill. Siguió tocando los cristales hasta intentar llegar al niño. Tocaba todo por donde iba. Fui andando con cuidado de no perderme pero de mirar bien.

Entonces vi al chico andando por los espejos.

—¡Aquí Bill!—Le digo.

Corro tras el niño y Bill va unos pasos atrás mía.

—¿Chaval?—Iba diciendo el.—¡Eh!

Me di la vuelta y vi que los espejos en la zona de Bill estaban más pegados y le estaba costando seguir adelante pero yo seguí tras el niño con mi bate en mano.

Cuando me di la vuelta de nuevo Bill corría tras de mi y de pronto se comió un cristal. El estaba en dirección contraria.

—¡Por aquí Bill!—Le dije.

Corri hacia el niño. Y entonces llegué a el.

—Chico, hay que salir de aquí. Venga vamos—Le digo. Bill viene hacia aquí corriendo y entonces cuando Bill viene hacia nosotros y yo iba a retroceder mis pasos ambos chocamos con un espejo.—¡Joder!

—¡Me cago en la... Ah!—Escuchaba quejándose a Bill.

—¿Pero qué?—Dice el niño confuso.

—Mierda—Dice Bill.—¡Hola!

—¿Qué estáis haciendo vosotros aquí?—Pregunta el niño. Bill se ríe.

—Hola. He venido a a-a-a-ayudarte—Le dice Bill.

—Deja de seguirme—Le dice el niño.

—Voy a s-s-sacarte de aquí—Dice Bill.

—Esto está cerrado Bill.—Digo tocando los espejos. No había ninguna salida... Solo este pequeño... Cuadradito. Mierda.—¡Bill! Sacanos de aquí. ¿Recuerdas hace 27 años? Cuando me paso algo así en la casa Neibolt.

—Judith... Detrás tuya—Dice Bill asustado. Miro detrás de mi y Pennywise esta chupando todo el cristal de delante de mi.

—Me cago en la...—Digo mirando asustada al payaso.

—¡No!—Dice Bill.—Por favor. Esta vez estoy aquí, cógeme a mi.

—¡Cógeme a mi capullo! ¡Estoy aquí imbécil!—Le grito al payaso que ya ha terminado de chupar todo el cristal. Entonces sonríe hacia nosotros.

El payaso empieza a darse golpes contra el cristal.

—¿Eres estúpido? ¡Partete la cabeza!—Le grito.

Luego se ríe y se da más fuerte.

—¡No! ¡Hijo de puta!—Le grita Bill enfadado dándole golpes al cristal.

El niño está asustado a mi lado. Me pongo delante de él.

—¡Hijo de puta!—Le grita Bill al ver como cada vez se da más fuerte contra el cristal.

—¡No!—Dice asustado el niño tras de mi.

—¡Vamos capullo! Cógeme a mi. Me tienes más ganas—Le digo al payaso.

Bill le da puñetazos al cristal y el niño grita asustado.

—¡Socorro! ¡Ayuda!—Grita asustado.

—¡Bill! El bate de béisbol.—Le digo. Se me había caído antes de llegar al niño y lo tenía Bill a sus pies.

Bill lo coge y empieza a darle al cristal con cuidado de que no le rebote en la cara.

Bill ya incluso le pega patadas al cristal pero no puede. El niño asustado se aferra a mis brazos deseando que esto termine.

—¡Deja al niño y llévate a una perdedora!—Le grito al payaso.

El payaso cada vez se da más rápido y más fuerte. El cristal estaba casi roto ya.

—¡No!—Grita el niño asustado.

—¡Capullo!—Le grito. Aunque claramente estaba asustada. Entonces se escucha como el cristal ya esta en su último toque.

El niño detrás mía mira asustado a Bill y Bill intenta romper con todas sus fuerzas el cristal. Pero Pennywise ya estaba aquí.

—¡Llévame a mi! ¡Soy una puta cobarde que no es capaz de decirle al chico que le gusta sus sentimientos y que no para de decepcionar a los demás! ¡Llévame a mí! Pero no le cargues otra muerte—Le digo. Pero estaba claro que al payaso le daba igual lo que le dijera.

Entonces Pennywise sonríe diabólicamente y el payaso rompe el cristal. Con un rapidísimo movimiento, su mano me aparta contra el cristal de la derecha y con el otro agarra al niño comiendoselo al instante.

La sangre salta en todo mi cuerpo en un momento y me quedo paralizada.

—Se lo ha comido... Delante de mi—Digo mirando la sangre en el suelo y por todos los cristales.

Miro hacia el lado, que está Bill con cara asustada.

—Sácame de aquí Bill—Le digo.

—No puedo—Me dice.

—Prueba fuertemente con el bate—Le digo.

Bill lo intenta pero no hay resultados. Tampoco le había dado muy fuerte y era normal ahora mismo estaba asustado.

—Venga Bill. Saca tus fuerzas, se que es duro. Pero tienes que hacerlo, tienes que sacarme de aquí. Imagínate que el cristal es Pennywise y que yo soy Beverly. ¡Vamos! Rompelo.

Bill grita de la fuerza y en un momento el cristal está roto. Cubro mi cara para que los cristales no salten en mi cara.

—¿Ves? ¡Puedes! Puedes con todo Bill.

—No he podido pararlo—Me dice llorando tirado en el suelo. Me tiro a su lado y lo abrazo.

—No es tu culpa Bill. Toda la culpa es de Pennywise. Ese niño no tenía nada que ver contigo y aún así has intentado salvarlo—Le digo abrazandolo por los hombros.

—Dios...—Dice apoyado en mi hombro.

—Ya está—Le digo intentando consolarlo.