Cumpleaños #1

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Los días pasaron y me negoció fue en ascenso, fue lo mejor.
Sin darme cuenta, ya había pasado un mes.
Me levanté como siempre, me aliste y me dirigí a la habitación de Diego, para cambiar a Lu.
Toque la puerta y escuche "pase".
—hola, buenos días—dije yo sonriente.
—buenos días, oye Jorge, hoy no hace falta que cuides a Lu—
—¿por?—
—ya conseguí una canguro—
—¿una canguro?—dije sorprendido.
—si, estos días te notó mas ocupado en el trabajo, y no quería dejarte con la carga de mi hija—
—no wey, enserio estoy bien—dije y levántate a Lu.
Ella sonrió y se estiro.
La cargué y me senté en la cama.
—claro que no, estas muy ocupado en el restaurante—
—son solo sándwiches Diego, ademas yo no trabajo, tengo empleados—
—si, pero tu administras el lugar—
—si, pero...—dije y me quede en blanco.
—¿pero?—
—ay, no se, se me olvido—dije riendo.
—tarado—dijo el riendo también.
—ya enserio, me gusta cuidar a Lu, es divertido, ella me entiende—dije serio.
—claro los dos tienen mente de chupa dedos—dijo riendo.
—oye, ya esta bien grandota, ¿no?—dije ignorando su comentario.
—si, lo esta, de hecho ya le falta poco para el año—
—¿cuando es?—
—12 de febrero—
—esta super cerca su cumpleaños—
—si, ya lo se, crecen muy rápido—
—ni te imagines, ya en un parpadeó va a estar saliendo de antros—dije riendo.
—no se que haré así—
—¿como así?—dije confundido.
—así solo, pronto será adolescente y será bien dramática la chamaca—
—no lo se, pero lo que si va a estar es guapísima—dije riendo.
—no te acerques a mi hija—dijo riendo y dándome un codazo.
—no estas solo—dije yo de repente.
—¿que?—dijo el sonriente.
—que no estas solo Diego—mire a Lu quien sonreía—me tienes a mi—volteé a mirarlo, esta sonrojado—también a Cory y a los chicos—dije yo algo nervioso.
Vi como Diego se río.
—¿de que te ríes?, estoy hablando enserio, Diego—
—solo, hace unos años no te imaginaba cargando un bebé y ahora cargas a mi hija, es muy....no lo se—dijo llevándose las manos a la cara.
Paso sus manos llevando hacia atrás su pelo.
Hace unos año.....cuando Diego me pidió tener hijos....Dios que incomodo....mucho mas si te quedas callado, habla ya.
Diego me estaba mirando.
—bueno, tan poco soy tan inútil—dije riendo nervioso.
—no, no lo eres—dijo sonriente.
—bueno, oye ya se te hizo tarde, córrele mijo—dije y me levanté.
—cierto—
Corrió y se metió al baño.
—bueno chamaca, ¿como amaneciste?—dije yo mirándola.
Ella sonrió y me agarro de los chinos.
—¡ayyyyy!,¡ya te dije que mi cabello no chamaca!—dije yo muy adolorido.
Ella solo río y me soltó.
La puse sobre la cuna y me dirigí al armario a sacarle ropa.
—bien, ¿que dices de unos bonitos unicornios?—dije mostrándole el outfit que le había armado.
Ella solo se chupo el dedo.
—si, a mi tampoco me gusto, pero bueno, tenemos este otro de osito—dije mostrándole.
Se quedo callada y sin hacer nada.
—vaya, que exigente que eres, bueno, el ultimo y en lo personal mi favorito, el de color verde—dije yo mostrándole el atuendo—bien, en este conjunto tenemos un body deportivo blanco, junto una falda de mezclilla para el calor de esta estación, junto a una camiseta verde con el perrito con la pelota—ella empezó a agitar sus brazos.
—lo se, es perfecto, muy bien, a cambiarse niña—
La cambie y la puse en su transportador.
La llevé a la sala.
—hola Coqui—
—hola Cory, buenos días—
—buenos días—
—toma, ya la preparé—
—gracias—
Me dio la mamila.
Le eche un poquito a mi mano para ver la temperatura, estaba bien.
—bien, chamaca a comer—dije y le pase el biberón.
Ella sonriente lo tomó.
Diego salió corriendo de adentro con un traje y un maletín.
—¿otra vez verde?—dijo Diego riendo.
—¿que te digo?, es su favorito—dije yo igualmente.
—bueno amor nos vemos luego—
—bien corazoncito, cuídateme—dije burlándome.
—tu no tarado—dijo riendo y le dio un beso a Lu.
—oye, ¿no crees que ya esta grandecita para tomar la mamila?—
—si, ya lo se, debo ir a ver a su pediatra, pero nunca tengo tiempo—
—¿donde es?—
—no lo se, generalmente era Eva la que la llevaba—dijo serio.
—bueno, tengo a una amiga que conocí que es pediatra—
—¿me pasas su numero?—
—claro—
—gracias—
Escuche como Lu estornudo.
—salud, ¿vaya se estará resfriando?—
—¿porque lo dices?—
—últimamente tose y estornuda con mucha frecuencia—dije yo algo preocupado.
—tal vez son alergias—
—¿alergias?—
—si, al cambios de clima—
—si, puede ser—
—bueno, ya me voy, los recojo a las 4—
—claro—
Diego salió corriendo.
Fui a la cocina a buscar una fruta para comer, me encontré con una banana que estaba sola en la cocina.
Pelee el plátano.
—bien, a comer—dije mirando a Lu.
Ella soltó el biberón.
—¿no quieres?, no tomaste ni la mitad, toma—le acerqué y ella lo lanzó.
Miro mi banana y yo se la acerqué un poco.
—¿quieres un poco?—dije yo mientras se la acerqué—bien—le partí un poquito y se lo di en su boca.
—¿rico?—vi como sonrió, terminamos comiendo la banana entre los dos.
Después de comer nos fuimos al restaurante donde trabajamos entreteniendo a la gente.
Yo me sentaba en una silla con ella en el mostrador y la gente se acercaba a verla.
A las 2 de la tarde Lu durmió una siesta, estaba muy cansada.
Trate de que no durmiera mucho o sino mantendría a Diego despierto toda la noche.
Yo hice mis cosas y luego llegó diego en el auto.
Le preste mi camioneta mientras el iba a trabajar.
Ya que el ya no tiene auto.
La tos de Lu, era muy fuerte, sonaba mal, muy mal.
—creo que esta resfriada—
La tos de Lu no paso esa semana o la siguiente o la subsiguiente, sino que creo que iba empeorando, decidí decirle a Diego que enserio me preocupaba.
El me dijo que la llevaría con la pediatra lo más rápido que tenga tiempo.
Me ofrecí a llevarla, pero me dijo que no.
A Lu le crecieron sus primeros dientes, era hermosa.
Finalmente llego el 12 de febrero, le planeamos una reunión con la familia, los padres de Diego vendrían a la cuidad.
Un día antes estábamos preparando toda la decoración, decidimos hacer en el restaurante por la mañana, ya que eran las horas en las que se encontraba de mejor humor.
Llegamos a casa y entramos.
Diego y yo nos reíamos por un chiste muy malo que me había contado, mientras Lu solo dormía.
—¡Cory!—dijo diego.
—¡en la cocina!—
Colgué mi chaqueta y me llevé a Lu a la cuna, la tape bien.
Ella tosía fuertemente.
Escuche algo romperse afuera, me levanté y salí a la puerta, vi a Gabo caminando con una escoba.
Debe haberse roto un vaso.
Escuche la tos de Lu, me acerqué al escucharla cada vez mas fuerte.
La mire estaba pálida y sus labios se ponían azules.
—¿Lu?—dije yo muy asustado.
Ella no reaccionaba solo tosía.
—¡Lucia!—dije asustado.
La levanté y me eche a correr a la cocina.
—¡Lu no esta respirando!—dije muy asustado y mire a todos.
Vi a Diego a Cory y a.....Eva.
—¿Eva?—
—¿que dijiste sobre Lu?—dijo Diego levantándose.
—¡no respira!—
—hay que llevarla al medico—
—ve por la maleta—dijo diego y se fue corriendo.
—así que te volviste por el—Alcance a escuchar mientras corría adentro por la maleta de Lu.
Corrí y me subí al auto.
—¿que hace el aquí?—dijo Eva con disgusto.
—el viene—
—no, el no—
—¡el viene Eva!—dijo Diego molesto y arranco.
Por suerte no había demasiado tránsito, llegamos al hospital mas cercano, dónde metieron de urgencias a Lu, yo me quede fuera a esperar.
—Registra a Lu por favor, los documentos están ahí—Eso me dijo Diego antes de desaparecer por la puerta.
Me acerqué al mostrador y le hable a la chica de ahí.
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Llegué y me fui a la cocina a dejar algunas bolsas del super.
Llegué a la cocina y vi era cabellera tan resaltante.
Era Eva.
—¿E-Eva?—dije y deje caer mis bolsas al piso, algo se rompió.
—hola Diego—dijo ella sonriente.
—¿tu.....?,¿que haces.....?—dije confundido.
—yo vine a disculparme...actúe mal, y yo....—
—¡Lu no está respirando!—escuche la voz de Jorge y volteó a verlo.
Tenía una cara de preocupación y cargaba a Lu en los brazos.
—¿que dijiste sobre Lu?—dije yo y me levanté.
—¡no respira!—
—hay que llevarla al medico—dijo Cory.
—ve por la maleta—dije y salí corriendo con ella en brazos.
—así que te volviste por el—dijo Eva molesta.
—yo no volví por el, yo volví por mi hija, para que no este sola en este periodo en el que su madre la abandono—
—¡no lo hice!—
—te fuiste, no escribiste, ¡si!,¡creo que si lo hiciste!—dije molesto.
Abrí la puerta y ella entro, le di a Lu,
—es diferente, ¿que hacia Jorge con Lucía?—dijo ella molesta.
—me ayuda con ella—
—¡¿así que dejas que ese tipo toque a MI hija?!—
—¿a que te refieres con "ese tipo"?—dije subiéndome al auto.
Jorge se subió.
—¿que hace el aquí?—dijo Eva disgustada.
—el viene—dije serio.
—no, el no—la interrumpí.
—¡el viene Eva!—dije y arranque.
Corrimos al hospital y le pedí que la registrara.
Llegamos adentro donde empezaron a ayudarla, nos sacaron de la sala y nos dijeron que esperáramos.
Luego de un rato se nos acerco una doctora.
—¿Lucía Cardenas?—
Asentí y la seguí, vi a mi pequeña conectada a un montón de tubos y cables.
—¿que es todo esto?—
—señor, su hija, dejo de respirar, sus pulmones no lograban adquirir oxigeno, la vía que llevaba oxigeno se tapo...—
—eso ya lo se, yo quiero saber la razón—
—tengo algunas sospechas pero primero quiero hacer unos estudios—
—¿estudios?—dije yo.
—¿cuales son sus "sospechas", doctora?, díganos por favor—
—por la forma en la que esta, creo que es asma—
—¿asma?—
—pero ella va a estar bien, ¿cierto?—dije yo.
—si, lo estará, por suerte la trajeron a tiempo—
—¿a tiempo?—dije sorprendido.
—¿ella......?—dijo Eva.
—si, ella hubiera muerto—dijo un enfermero.
—oh, dios—dije y me llevé las manos a la cabeza, por mi irresponsabilidad mi hija pudo haber muerto.
Vi como Eva se llevo las manos a la boca y unas lagrimas empezaron a caer por sus mejillas.
—Eva...—dije e intenté abrazarla.
Ella me rechazo.
—¡Mi hija!,¡mi hija casi muere!, por ti....no puedo creerlo—dijo ella muy molesta.
—Eva, tranquilízate—
—¡no!—dijo ella gritando.
—por favor les voy a pedir que esperen afuera, por favor—
—esta bien—
Le tome la mano a Eva y la jale afuera.
—vamos Eva—
—no, no quiero irme—
—tenemos que ir—
—si, quiere puede venir con nosotros—
—¿enserio?, gracias—dijo ella, vi como en la camilla se llevaron a Lu y Eva se fue con ella.
Salí corriendo y fui a ver como iba Jorge.
—¿como esta?—dijo Jorge poniendo su mano en mi hombro.
—estará bien—dije yo y me senté.
Estaba temblando.
Sentía una gran opresión en mi pecho.
—¿como que estará?,¿que paso?—
—ella dejo de respirar—
—¿sabes que tiene?—
—la doctora cree que es asma—
—¿asma?,¿y esta bien?—
—si, ella lo esta—dije mirando al piso.
No podía unas lagrimas empezaron a bajar por mis mejillas.
—Diego—sentí su mano en mi mentón, el movió mi cabeza y me hizo mirarlo.
—ella...ella casi muere—
—oh dios—dijo sorprendido.
Me abrazo y yo correspondí.
—tranquilo—
Me solté, las lágrimas empezaron a salir sin control.
—todo es mi culpa, si te hubiera hecho caso y la habría llevado al pediatra, esto no hubiera pasado—dije yo con mi voz temblorosa.
—no, no, claro que no, no es tu culpa, yo podría haberte dicho que la llevaba, pero no lo hice, es mi culpa—
—claro que no—
—no, si lo es—
—no Jorge, nada de esto es tu culpa—
—¡si lo es!—me separé de el y vi sus mejillas llenas de lágrimas.
—Jorge, ¿que pasa?, sabes que esto no es tu culpa—
—si lo es, si yo no hubiera perdido la memoria nada de esto hubiera pasado—dijo el mirando al piso.
—Jorge.....no, no—dije negando con la cabeza.
—si....—
—eso no fue tu culpa, tu no fuiste y te quitaste la memoria—
—si, lo hice—
—¿enserio te la quitaste?—dije confundido.
—Si no hubiera perdido el tiempo con ese estupido plan—
—no Jorge, eso fue culpa mía...si yo te hubiera tomado enserio nada de esto hubiera pasado—
—no lo fue...—dijo Jorge negando.
—¡claro que si!—dije levantándome.
—si...tu me hubieras tomado enserio si yo te hubiese contado...—
—¿contarme que?—dije confundido.
—Diego...Pablo amenazó con matarte—
Sentí mi sangré helarse y mis pelos se pusieron de punta.
—¿q-que?—dije apenas saliendo del shock.
—si, el día que fuimos a cenar, Pablo me llamo y estaba afuera, tu fuiste al baño, el te señalo y te disparo con una pistola de mano—
—¿como así?—
—me dijo que te mataría....lo haría—dijo el abrazando sus piernas.
—Jorge, no, mírame—
—no...—
—Jorge.....mírame—
Lo tome de las mejillas y lo obligue a mirarme.
—¿puedes mirarme?—dije yo despacio.
—no—
El cerro fuerte los ojos.
—por favor...—
El abrió los ojos.
—¿porque nunca me lo contaste?—
—no quería hacerlo—
—¿porque no lo hiciste?—dije molesto.
—no quería perderte.....—
—por eso eran tus pesadillas....—dije y me senté a su lado.
—lamentó mucho no haberte contado, de haberte contado no estaríamos aquí, no te abría perdido—
—yo....—
—¡tu!—dijo Eva.
—¿como esta?—dijo Jorge.
—¡cállate!—dijo Eva y le pego un manotaso.
—¿que te sucede?—dije molesto y me levanté.
—¿que, que me sucede?—dijo ella empezando a llorar—te amo—dijo ella y me empezó a besar, ella me abrazo.
Yo le correspondí.
La extrañe.
—nunca debí haberme ido—dijo Eva.
—yo ya me voy—escuche que dijo Jorge.
—espera—
—no Diego, debes quedarte aquí—
Eva me abrazó mas fuerte y Jorge simplemente se fue.
—¡familiares de Lucía Cardenas!—escuche.
Eva me tomo de la mano y me llevo con ella.
—la doctora los esta esperando—dijo la enfermera.
Nos llevo a una sala y nos sentamos en unas sillas.
—bien, gracias por venir—
—a usted doctora—le agradecí.
—bueno, por fin tenemos el diagnóstico de la niña, tras varios estudios logramos concluir que Lucía, sufre de EPOC—
—¿EPOC?—dijo Eva.
—EPOC, enfermedad pulmonar obstructiva crónica—
—¿que significa?—
—empezó con una leve Bronquitis, hasta volverse crónica, esta secreto mucosa que tapo por completo sus vías respiratorias, esta enfermedad es muy común, no hay de que preocuparse, si bien no hay cura, hay tratamiento—
—¿cuanto tiempo estará con esto?—dijo Eva preocupada.
—no lo sabemos, eso dependerá de cuán rápido asimila el medicamento que le daremos—
—¿aproximadamente?—
—podrían ser años—
—¿años?—
—la enfermedad es más común entre adultos fumadores, pero no llegara a ser mortal si se trata cuidadosamente—
—¿como se contagió?—
—pudo haber empezado con un leve resfriado, ¿la escucho toser?—
—si, casi seguido—
—¿hace cuanto empezó?—
—semanas—
—¿la llevaron al pediatra?—
—no, no pude—
—vaya, no importa generalmente los bebés deben empezar a ingerir alimentos mas nutritivos que la leche—
—si, empecé a darle fruta—
—muy bien, eso sería todo—
—me siento culpable—le dije a Eva una vez salimos.
—¿no la llevaste?—
—no...—
—señor Cardenas—me di la vuelta.
—¿si?—
Había un enfermero.
—no se sienta culpable, no fue culpa suya, los resfriados aveces se toman muy a la ligera—
—gracias—dije embozando una leve sonrisa.
—bien, tome—
—¿que es?—
—una lista de medicamentos y tratamientos—
—gracias—
—estará un día más para supervisarla y luego podrán llevársela—
—gracias—
~~~
Holis, ya se que me perdí, pero que te digo, tengo hueva....😂
No mentira, la cosa es que estoy medio mal, no se que tengo, me pongo super mal, fiebre, dolor de cabeza y no se, ya casi no tengo ganas de hacer nada trataré de actualizar un capituló en Suposiciones, juro que ayer casi publico esto pero me quede dormida.
Le hago de esperanzita ahora en cuarentena 😂.
Bueno bueno.......
Iba a dar un anuncio, pero no me acuerdo.....
Tengo mala memoria, bueno supongo lo pondré después.
Sin mas que decir me despido, voten, comenten y compartan la historia me ayudarían un buen, gracias.

Vivir sin tiWhere stories live. Discover now