COMPLICADO | Crepúsculo | Jacob Black

Neuf

—Bueno, tarde o temprano iban a venir, ¿no? — dijo Aurora, con voz tensa, mirando a los presentes con una expresión determinada —. Todos sabíamos que en el momento que decidí quedarme que los Vulturi no tardarían en venir.

40 minutos atrás.

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—[...] Fui... Jacob, fui un monstruo — reveló Aurora, con amargura, mirando los ojos de Jacob, esperando alguna reacción de repudio por su parte por lo que le confesó hace unos minutos —. Perdí la cuenta de cuantas habían sido mis víctimas. Cuantos perdieron la vida por saciar mi sed. Vi como perdían la vida frente a mi... Y lo peor, es que no sentí nada. Ni pena, ni remordimiento. Y sigo sin sentirlo, ¿qué clase de persona no se arrepiente de algo así? Solo un monstruo.

—Eso no es cierto — negó el peli negro,  frunciendo el entrecejo y moviendo la cabeza de forma negativa —. Solo seguiste tu naturaleza; y aquellos a lo que... — vaciló en su elección de palabras.

—A los que maté — escuchando sus pensamientos.

—A los que salvaste — remarcó — por deshacerte de esas personas, ¡piensa en eso! Ve el lado bueno; no todo es malo siempre. Ellos eran personas despreciables, le hiciste un favor a muchos, te lo aseguro.

Aurora se mantuvo en silencio por unos segundos, escuchando inconscientemente los pensamientos de Jacob, creyendo firmemente en sus palabras.

—¿Cómo puedes seguir viéndome así? — cuestionó en voz baja, confundida.

—¿Cómo te veo? — inclino ligeramente cabeza hacia un lado, sin despegar su mirada chocolate de la ámbar de Aurora.

—Me sigues viendo con cariño, con dulzura, con anhelo... Igual que antes de conocerme bien — negó suavemente con la cabeza —. ¿Cómo puedes hacerlo?

—Porqué para mí no eres un monstruo. Deja de llamarte así... No me importa lo que hayas hecho en el pasado. Y no me interesa lo que seas. Vampiro, lobo, híbrido o unicornio, yo te amo.

Aurora cerró un momento los ojos, disfrutando del calor que brindaba aquella suave caricia llena de cariño.

—¿Sabes que veo cuando te miro? — continuó Jake. Aurora abrió los ojos y lo miró expectante —. Veo a una guerrera, una chica que ha superado grandes obstáculos a lo largo de sus años, los cuales con muchos años — bromeó, Aurora sonrió de lado sin mostrar sus dientes —. Conozco poco de ti, lo sé, pero no necesito conocer todo de ti para darme cuenta de la gran mujer que eres. Te alejaste de tu familia para protegerlos, y aún cuando volviste estas dispuesta a pelear por ellos con garras y colmillos... Ahora entiendo eso. Y créeme que te apoyaré en todo lo que decidas, estaré contigo, porqué para mi jamás has sido ni serás un monstruo.