OT 2017 -BUAH,QUE HORROR

32-DESENMASCARADO

{Narra Amaia}

Ya era de día. Por fin ideábamos el plan para poder descubrir su identidad.
Y no voy a mentir, estaba MUY nerviosa porque la que tenía que hablar con él en todo momento era yo.

-Bien, ¿qué va a decir Amaia exactamente? -preguntó Juan Antonio siendo el último en sentarse en el sofá.

-A ver, la idea es que Amaia le dé información falsa. Si no recuerdo mal ayer dijimos que esta información sería que íbamos a salir por la puerta del camerino. Ella puede decirle eso con la condición de que revele su identidad-dijo Nerea.

-¿Y después? Cuando vea que es mentira ¿que va a pasar, nos va a matar?-dijo Raoul.

-La cosa es que si no morimos por eso, moriremos igualmente por falta de comida y agua, así que lo mejor es intentarlo-dijo Alfred.

-Bien, haremos eso-dije-dejadme unos minutos para pensar lo que voy a decir y después cruzaré la puerta del baño.

-Por cierto, ¿no hay alguna forma de escapar por las puertas secretas?-preguntó Nerea.

-Normalmente él siempre está detras de una de ellas. Además hay cámaras en todas esas salas a las que da la puerta. Sería imposible salir sin que nos viera-le expliqué.

-A no ser...

-¿En qué estás pensando Roi?-preguntó Aitana.

-A no ser que Amaia lo lleve dentro y nosotros podamos escapar mientras él esta aquí en la academia.

-Ya pero yo estaré con él no con vosotros. Me quedaría aquí entonces.

-Pues enciérrale en algun sitio como por ejemplo en la habitación y rápidamente te reúnes con nosotros.

-Es muy arriesgado, hay mucha probabilidad de que esa idea salga mal-dijo Alfred.

-Además no me voy a ir sin saber quien es ese cabrón-añadió Ana.

Estuvimos unos minutos concentrados, yo desde luego la que más. Cogiendo un par de sugerencias y mi propio instinto, tuve claro lo que decir y me dirigí hacia el baño.

Toqué 3 veces el azulejo que daba a esa puerta, tal y como acordé con él cuando era topo y tenía información que darle. Unos segundos después la puerta se abrió.

Estaba muy nerviosa, incluso temblando y con la garganta seca. Me preocupaba que lo notara y me pillara.

-Tengo información bastante importante...

-¿Cuál?-me dijo con el dichoso modulador de voz.

Yo me quedé callada, mirándo su máscara. Aquí es donde entraba mi actuación.

-Esto no es fácil ¿sabes?-dije mientras comenzaba a llorar. Actuar en momentos oportunos se me daba bien.

-Amaia no soy tu psicólogo. Te he dicho que me digas qué información tienes.

-¡Escúchame!-grité- llevo mucho tiempo engañándoles, estoy harta. Esto de darte información no me sirve de nada, porque yo no recibo nada a cambio de complicarnos más las cosas.

-La vida de Alfred es lo que recibes a cambio.

-Eso es mentira. Sé que a Alfred no le vas a matar, eres un psicópata pero no serías capaz.

-Si no sabes quien soy ¿por qué crees que no sería capaz?

-A eso quería llegar-dije esquivando su pregunta-quiero saber quien eres. Quiero que te quites la máscara o sino olvídate de que te dé información. Y te recuerdo que la de ahora era muy importante.