響 Clases Virtuales ꜜ ᪥ ᴷᵒᵒᵏᵀᵃᵉ [Editando...]

Nueve.

¡Dios! Su bebé estaba con tono nuevo de cabello, es decir, se lo había teñido de un color castaño, hermoso definitivamente. Sí necesitba a un doctor o mejor un cardiólogo para que checara si su corazón estaban bien, porque sentía que le iba dar un ataque cardíaco.

—¿Cómo se atreve a decirle lindo? ¿Quién es ese estupido? —refunfuño, porque sí, ver aquella foto con aquel rostro angelical hizo que su corazón diera un salto de alegría pero todo se fue a la mier... es decir al carajo cuando ese tal Park Bogum le dijo lindo a su bebé. ¡Suyo de él! —. No lo puedo culpar, él es realmente hermoso, todo mundo quisiera estar con él —sintió su pecho doler cuando pensó en aquello sin embargo sacudió su cabeza y la sujetó fuertemente con sus manos— Esto no va a pasar, no. Un nuevo Jungkook nació —con demasiados ánimos se levantó de su cama y fue a tomar un baño, el cual no dudó en llevar su teléfono, porque sí le gustaba cantar en la ducha.

Cuando su baño terminó y se dirigió a su habitación para poder vestirse, se maldijo mentalmente puesto que no estuvo presente en su clase, al igual que Yugyeom... después de comprar las flores y andar deambulando se les fue la mañana y ya fue demasiado tarde para la clase, había sacrificado ver el rostro de su bebé, una pena, además de que el día anterior renunció como repartidor tenía muchos ahorros además de tener tres meses pagados de renta, la universidad iba bastante bien y ni hablar de lo que su padre le enviaba mensualmente, sin embargo quería hacer algo distinto quería acercarse más a Kim Taehyung, dejar el miedo y la timidez atrás y por fin ganar y conquistar el corazón de su profesor.

Pero sin duda lo que le tomó por sorpresa fue la repentina llamada de su amigo y compañero JiMin, quien no dudó en responder solo que...

—¡Mugroso! ¡AH!

Sus tímpanos eran los que sufrían por los gritos de su amigo y su voz tan aguda.

—¡Hyung! —se quejó.

—Te tengo una buena, una mucho mejor, y una no tan linda que digamos.

—Dime y no estés con rodeos.

—Primero promete regalarme una cena a mí y a mi bomboncito que tengo por novio.

—¿YoonGi hyung un bombón? —rió fuertemente.