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capítulo 25: crazy

Amber

Tomo la mano de Harry para poder bajar las escaleras de su avión privado. Los anillos que abrazaban sus dedos estaban fríos lo que me hizo apretar un poco su mano. Harry llevaba puesto su abrigo negro, unos pantalones negros y una playera con estampado y una bufanda. 
Nos dirigimos al mercedes negro que nos espera a unos metros y veo cómo están metiendo nuestras pocas maletas que habíamos traído. No sabíamos cuantos días nos íbamos a quedar, supongo que hasta que todo se calmara un poco. Sinceramente, con todo lo sucedido en los últimos días ambos necesitábamos un descanso y poder estar juntos. 

Me encojo al sentir una fría brisa de aire y maldigo por solo traer un suéter puesto sabiendo el clima de Noviembre. Harry se voltea a verme y mis ojos ven los suyos color esmeralda. Me sonríe y yo hago lo mismo. 

- Me encanta cuando tu nariz se pone toda roja del frío. - Habla dulcemente y toca mi nariz con su dedo índice. Mis mejillas se tornan rojas y es tonto que comentarios así hagan que me sonroje, pero lo amo tanto.

Nos metemos al auto en la parte trasera y es bastante cálido a compareciendo de afuera. El auto comienza a avanzar y me acuesto en las piernas de Harry. Lo veo y admiro cada detalle de el. Su mano se posa en mi cabello y comienza a acariciarlo. Su vista está viendo el camino pero sus dedos bailan en mi cabello, como sabe que me encanta. El sabe todo sobre mi, lo que me gusta y lo que no, tal como yo lo sé de él. Sé que habla dormido y que siempre que quiere relajarse ve películas de comedia-románticas. Sé que el único helado que no le gusta es el de chocomenta y qué siempre escribe canciones en la madrugada. Son las pequeñas cosas como esas que más amo de él, es tan único que creo que jamás conoceré a alguien como él. Harry baja su vista y me ve observándolo, sonríe. 

(...)

 Llegamos al hotel 5 estrellas Hôtel Particulier Villeroy, Harry antes de llegar me contó que él siempre que venía a París se hospedaba aquí ya que son muy profesionales y discretos. 

Nos bajamos del auto y el aire de Noviembre es completamente helado. Trato de cerrar un poco más mi abrigo para evitar que el aire pegue en mi pecho. Harry extiende su mano esperando que entrelace la mía con la suya, lo cual hago apenas puedo. Entramos rápidamente al hotel tratando de que las personas que estaban cerca no reconocieran a Harry. 

Apenas entramos mis manos dejan de congelarse. Veo a mi alrededor y este hotel es hermoso. A donde sea que vea es elegante y lujoso. Harry camina hasta la recepción donde se encuentra un chico y una chica con su traje de trabajo. Llegamos al mostrador, ambos nos sonríen y al mismo tiempo dicen con su acento francés: " Bienvenidos al Hôtel Particulier Villeroy"

-Gracias, tengo una reservación a nombre de Harry Stevens.

Mi ceño se frunce y me volteo a ver a Harry el cual me mira con una media sonrisa. 

-Es por seguridad. Nunca hago mi reservación con mi nombre, siempre cambio el apellido. -Me guiña un ojo y se voltea cuando el amable chico le habla. 

-Claro señor. Aquí esta su llave. 

Le entrega a Harry la llave y luego de que agradeciéramos, nos vamos camino a nuestra habitación.

-Es una buena idea eso de cambiarte el apellido, aunque los que trabajan ahí saben que eres Harry Styles. -Hablo mientras caminábamos tomados de la mano por el pasillo del último piso.