Problemas.

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Sonó el celular de Diego, me acosté a su lado, tomó el celular y contestó.

- Hola, si soy yo, Diego, mañana por la tarde me tendrán una respuesta entonces? Muchas gracias, esperaré su llamado. Hablaba muy emocionado.

Yo me ponía algo triste porque el lugar no me gustaba donde iba a trabajar y tenía miedo de que también se pusiera a beber o quizás entrar a las drogas... nuevamente.

-Amor, al parecer hay un 80% de que si me llamen para el trabajo. Me contó muy feliz.

- Que bueno amor, me alegro mucho. Contesté sonriendo pero por dentro me sentía rara.

Diego me abrazo y nos acostamos, la inspiración se fue y nos quedamos dormidos.

*** En el desayuno ***

- Princesa, qué te pasa? Has estado bastante rara, desde ayer. Me preguntó Diego bastante preocupado.

- Ay amor, lo que pasa es que, no sé, no me gustaría que trabajes ahí, pero bueno si debes hacerlo entonces aceptaré pero no me gusta el lugar. Respondí triste.

- Amor pero ya hablamos este tema, por favor, no te pongas así, es una buena oportunidad. Me respondió tomándome la mano.

- Esta bien Diego, sé que necesitas el trabajo y no voy a arruinar eso, espero que de verdad te vaya bien y bueno, aceptarlo.

- Tranquila mi princesa, ya con el tiempo podré buscar algo mejor pero por el momento es una buena opción de trabajo.

- Si amor, está bien. Me levanté de la mesa, me cambié, me despedí de Diego y me fui al instituto.

Diego se preparó y salió a caminar, no tenía qué hacer mientras no tenía trabajo. Llegó a la plaza cerca de mi casa y se encontró con unos amigos.

- Hola Diego, estabas desaparecido tú. Le dijo un amigo, moreno, alto, delgado.

- Hola como estás? Tanto tiempo. Diego lo saludó con la mano.

- Oye Diego, estamos como para ir a fumarnos algo, o no? Le preguntó su amigo.

- Mmm no sé, es que hace rato no fumo y aparte estoy con una chica y quiero cambiar.. me enamoré. Respondió sincero.

- Vamos Diego pero la última, como un reencuentro. Le decía su amigo para convencerlo.

Diego pensaba y no sabía qué hacer, no sabía si ir con su amigo o irse a casa. Comenzó a pensar y le respondió.

- No amigo, tengo que ir a buscar a mi princesa ahora, que bueno haberte visto, ya me voy, nos vemos.

Diego se fue, llego a su casa y buscó algo de dinero. Cuando estaba cambiándose de ropa suena su celular.

- Hola, si soy yo, digame?

- Hola muy buenas tardes, queríamos avisarle que usted cumple con los requisitos para trabajar como barman y está contratado, por favor anote: tiene que presentarse mañana a las 4 P.M. en el bar de "el lolo", esto queda en Santiago Centro. Un gusto caballero y nos vemos mañana.

- Muchas gracias de verdad por la oportunidad, nos vemos mañana.

Diego se puso muy feliz con la noticia, fue a buscar a su novia al instituto y buscando una manera para contarle la noticia que sabía que a ella no iba a agradarle.

Diego llegó al instituto y se encontró con su novia.

- Hola princesa, vamos a comer algo? Le preguntó Diego muy feliz.

- Hola amor, si, me encantaría. Respondió feliz.

Llegaron a un lugar a comer algo, se sentaron y Diego le dio la noticia.

- Amor, sabes que me llamaron del trabajo y me dijeron que me presentara mañana a las 4 PM. Dijo Diego mirándola a los ojos.

- Oh amor... pues está bien.. respondí poco convencida. Confiaré en ti.

- Tranquila amor, confía en mi, no te fallaré.

*** Diego en el trabajo ***
Eran las 4PM y Diego fue a presentarse al trabajo, le pasaron su uniforme y le mostraron el lugar, él tenía que servir tragos y a veces ir a dejarlos a las mesas. Diego se puso su uniforme y comenzó a trabajar.
Estaba todo bien, comenzó a llegar gente y entró un amigo de Diego.

- Diegooo, como estás? Donde nos encontramos jajaja. Dijo su amigo.

- jajaja hola, si, aquí trabajando no más. Que te vas a servir? Preguntó Diego.

- Oye... mira. Su amigo le muestra un cigarrillo de marihuana. Vamos para atrás y nos fumamos este. Tengo para jalar también.

- No amigo, ya no consumo, que te vas a servir? Dijo nuevamente Diego para evitarlo.

- Vamos hombre, si uno no más.. insistió su amigo.

Diego se fue con su amigo, escondidos, prendieron la droga y fumaron. Los ojos de Diego se veían muy rojos, estaban ambos completamente drogados y luego jalaron cocaína.
Diego volvió a hacer los tragos, estaba con la pila al 100 y estuvo super bien trabajando. Ya era la hora de irse y el jefe llamó a Diego.

- Diego, necesito hablar con usted algo delicado. Ahora. Diego estaba en problemas....

Eres mi deseo, mi obsesión. [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora