¿Seremos padres?

439 41 10
                                    


~Acepto Adrien, te amo-dijo terminando de cerrar el espacio entre los dos- siempre te he amado

+Prometo que te haré inmensamente feliz, eres lo más importante que hay en mi vida, siempre estaré contigo, te amo, de verdad te amo y viviré para hacerte feliz-dije besando su mano

~Me haces feliz con tan solo estar cerca, te adoro gatito-dijo emocionada

+Yo más mi princesa hermosa -dije mientras la besaba dulcemente

Nos besamos durante unos minutos, sus labios son suaves y tenían un exquisito sabor, aunque ya los había besado antes, aunque en esta ocasión recordé que era la misma sensación que la vez que aquella doncella me besó en la fiesta de disfraces

~¿Pasa algo?-dijo preocupada

+Tu beso...se siente como en la fiesta en la que me besó una chica misteriosa-confesé

~Es porque yo te besé-confesó sonrojada- tenía ganas de besarte y no sabía cómo lograrlo, entonces Alya me propuso esa idea y...

+Tranquila-dije poniendo mi dedo en sus dulces labios- lo entiendo, confieso que yo también quería besarte en ese entonces, pero eran muchas las cosas que me detenían, fui un cobarde que no quiso arriesgarse, hasta que por fin tomé valor y decidí decirte lo que siento, ¿sabes?, no esperaba una respuesta afirmativa, me conformaba que supieras la verdad, pero ahora que sé que sientes lo mismo, no puedo ser más feliz

~Ni yo, en serio esto parece un sueño, no puedo creer que sea de verdad, que esto suceda

+Es la realidad, gracias por aceptarme mi bella musa, juro que te haré feliz mientras yo viva 

Seguimos jugando bolos y al llegar a casa jugamos videojuegos, cuando nos cansamos, fuimos a dormir, ella se recostó conmigo en mi cama, no tuvimos relaciones, porque eso no es todo en una relación, me bastaba con tenerla cerca, sentirla, abrazarla y tocar su carita toda la noche.

Despertamos felices y fuimos a desayunar, tenía que ir al hospital y ella a la universidad, le faltaba un año para terminar su carrera y graduarse como diseñadora de modas, amaba a esta chica.

Pasaron los días, meses, entre citas, paseos, cenas lujosas o simples maratones de películas y series en casa mientras comíamos palomitas y le hacía cosquillas, luego ella solía vengarse y me daba almohadazos, o simplemente se quedaba dormida mientras se acurrucaba en mi pecho. 

Adoraba ver su expresión de felicidad y risa cuando estaba con ella y me dolía cuando se entristecía al saber que tenía turno y no podía verla después de 24 a 26 horas, aunque entendía que era mi carrera y era necesario, incluso siempre dijo cuanto admiraba que yo me dedique a ayudar a los demás y me preocupe por salvar y cambiar sus vidas. 

Ella solía esperarme con el desayuno listo, conversábamos, reíamos, le contaba lo pesado que pudo haber sido el día y lo estresante que resulta ser, ella me daba un masaje para que me relajara, iba a bañarme y  luego a dormir y cuando despertaba, hacíamos algo juntos,ya sea cocinar en ciertas ocasiones o simples caminatas por el parque. Realmente amaba el tiempo con ella, nunca me cansaba de estar a su lado.

Obviamente habían días en los que salíamos con nuestros amigos por separado, era una relación normal supongo, nos reíamos contando lo que pasaba en esas salidas y los desastres que a veces pasaban.

Cuando terminó la carrera, estaba listo para dar el siguiente paso y decidí pedirle matrimonio, estaba demasiado nervioso, no había sentido eso nunca, recuerdo que le pedí subirnos en un globo aerostático y ella accedió.

Veíamos el atardecer en la ciudad y en el final del camino vio un mensaje con mi tan ansiada petición, para pedirle formalmente que nos casemos, volteó a verme y yo estaba arrodillado mientras extendía la cajita con el anillo de compromiso

+Princesa, hemos estado juntos toda tunvida, conozco todos tus gustos, lo que te enoja, te he visto en todas tus facetas, sé lo que sientes cuando miras algo, amo como brillan tus ojos cuando haces lo que apasionas, adoro cada segundo contigo, es por eso-dije mientras respiraba hondo para tomar valor- que quiero pasar el resto de mi vida contigo, ¿quieres casarte conmigo?

~Acepto-dijo con lágrimas en los ojos- por supuesto que acepto amor mío, te amo tanto-sentenció mientras le colocaba el anillo

+Gracias por permitirme estar contigo, siempre cuenta conmigo y como dicen los votos, hasta que la muerte nos separe, aunque sé que si hay otra vida, espero volver a encontrarte y seguir amándote como hasta ahora

~Yo te amaré aún en otra vida y espero encontrarte a tiempo

Nos besamos en tan bello paisaje, sellando por completo nuestro pacto, pasamos realizando los detalles de la boda, lista de invitados y todo lo necesario para que sea perfecto.

El día de la boda, ella fue a casa de Alya para que la ayude a alistarse, no quería arruinar la superstición de que si la veía usando el vestido de boda, antes del matrimonio traería mala suerte.

Estuve ansioso esperando en el altar, llegó y estaba muy hermosa, realmente radiante, no podía creer que tan hermosa mujer iba a ser mi esposa, no sabía que hice para merecer tal bendición, Dios había sido tan bueno conmigo al darme tan bello premio, siempre estaría agradecido con él por darme tan bello ángel. 

Nos casamos y regresamos a casa para empacar todo para la luna de miel, estaba emocionada de ver la sorpresa que tenía preparada. Luego de un vuelo de 10 horas, llegamos a un crucero de lujo y desempacamos las maletas, dormimos un poco y luego a comer.

Amaba ver su expresión de alegría al ver cada cosa que había en ese lugar, nos divertimos todo el día y en la noche, por primera vez, unimos nuestros cuerpos en uno solo.

Sentir su piel con la mía, era algo mágico, es verdad que yo ya no era virgen, pero con ella sentí como si lo hubiese sido. Escuchar sus dulces gemidos, gestos de sensualidad y pasión eran simplemente perfectos, valió cada segundo la espera de disfrutar aquel momento.

Despertamos abrazados y felices, fueron las mejores vacaciones de mi vida, cuando terminó el crucero regresamos a casa, a ponernos al día con el trabajo, nos cuidamos los primeros años, no queríamos tener hijos tan rápido.

Luego de tres años de matrimonio, decidimos que ya era el momento perfecto para tener vástagos, así que dejamos de cuidarnos, habían pasado seis meses sin éxito y ella estaba preocupada, temía no ser fértil.

Un día llegando a casa, subí a nuestra habitación y no la encontré, luego de buscarla por toda la casa, volví a subir y la escuché en el baño vomitando.

+¿Estás bien amor? - dije preocupado

~Si, es solo que llevo vomitando toda esta semana, tengo cansancio y náuseas

+Espera...¿Quieres decir?...

~No estoy segura amor, pero tengo síntomas

+Vamos al hospital de inmediato-dije emocionado

Fuimos al hospital y quise agendar cita con el ginecólogo, pero tenía todo el día ocupado, así que pedí pruebas de sangre para embarazo, era otra forma de confirmar nuestra paternidad.

Esperamos pacientemente los resultados, en lo que sale el ginecólogo con el sobre en la mano, me sorprendió, pero deduje que solo quería felicitarnos, pues se hizo un muy buen amigo

~Entonces doctor, ¿estoy embarazada?-preguntó ansiosa

-Pues... 

Cuidaré de tiWhere stories live. Discover now