Nuestro Secreto.

023

Me levanté con un dolor horrible en la cabeza, había bebido la noche anterior con Hugo y Rouse en su nuevo departamento. No era que me agradará mucho la compañía de mi hermano mayor, pero era la única alternativa que tenía para que mi madre no me atacará con preguntas al llegar a casa.
No recordaba si quiera como habíamos llegado a casa después de la tremenda borrachera que nos pusimos, y era una fortuna que aún recordaramos nuestros nombres después de haber bebido tanto.

Ya habían pasado algunas semanas desde que Rouse se había marchado y he de decir que estaba siendo un poco difícil para mí. Sobre todo porque en cada conversación que había en mi casa yo intentaba sacar el tema de Rouse pero mi madre solo cambiaba el tema convirtiendo la charla en algo demasiado incómodo.
Mi padre y Hugo me animaban diciendo que tuviera paciencia y que no presionará a mi madre pero no podía soportarlo, a pesar de ver a Rouse en la universidad y algunos fines de semana la seguía echando de menos.

Restregue mis ojos con ambas manos y me quite las sábanas para dirigirme al baño y poder tomar una ducha antes de ir a la escuela.

Tome un analgésico para la resaca y me senté para desayunar.
Mi móvil vibró y mire la pantalla para encontrarme con un mensaje de mi amada Rouse.
Lo desbloqueé y mire con atención lo que decía:

"Preciosa no quiero preocuparte pero necesito verte antes de que lleguemos a la universidad".

Fruncí el seño un poco confundida, tenía en mente enviar un mensaje para ella no obstante preferí llamarla a lo que ella me respondió de inmediato.

-¿Que es lo que pasa Rouse?.

-Daniela....

-¿Que hay con ella?.

-Pues aún no lo sé, ví una nota en el periódico que decía que ya habían dado con el punto donde ella se esconde y no sé si ella esté al tanto de ésto. Está en problemas Vane....

Me quedé un poco pensativa pues para que Rouse detestara a Daniela sonaba un poco preocupada por la situación.

-Llamala y cuéntale lo que te he dicho, necesitamos mantenerla al tanto de lo que está pasando o de lo contrario le esperarán demasiados años de cárcel.

[....]

Citamos a Daniela en un lugar fuera de la ciudad y le pedimos que mantuviera un perfíl bajo, es decir que esta vez viniera sin tanta seguridad y aunque sabíamos que sería algo peligroso para ella, aceptó y llegó sola a aquél lugar.
Sonrió en cuánto me miró y se acercó a dónde nos encontrábamos.

-Ni lo intentes Fuentes.... -dijo Rouse en cuánto noto que Daniela iba a abrazarme y besar mi mejilla a lo que ambas reímos.

-Lo lamentó celosita....

-Aagghhh eres tan detestable.

-Como sea.... ¿Que sucede? Porque querían verme con tanta urgencia.

Rouse no dijo nada, sin embargo caminó hacía el auto que le había prestado Daniela y de el sacó un periódico para dárselo.
Ella lo miro un tanto confundida pero su rostro cambió a uno de seriedad en cuánto leyó aquella nota de la cuál me había comentado Rouse.

-Esto no puede ser... Llevó años escondiendome lo suficientemente bien y comprando a demasiada gente para que no digan lo que saben de mí....

Me incliné un poco para mirar la nota y en ella estaba la foto de una casa enorme que me imagino sería la casa donde ella se resguardaba.

-Lee la nota completa....-le dijo Rouse.

Ella abrió el periódico y busco la página donde estaba la noticia completa y la escuchamos susurrar un "mierda" seguido de un suspiró.