The Lake | Michaeng

15 | Want

Sentía sus músculos ser magullados sin piedad, los golpes no dejaba de caer como una lluvia furiosa sobre su cuerpo. Puños, patadas y rodillazos sin piedad le impactaban uno tras otro.

No valía la pena... Lo odiaba... Quería llorar pero no le daría gusto... Lo mataría, aunque sabía no tenía el valor.

Se removió intentado olvidar. Olvidar los gritos, los insultos, los maltratos, tratando de olvidar el dolor, el odio, el miedo y la impotencia.

Abrió los ojos. Sudaba y respiraba pesado pero su vista se clavó en el techo sin hacer nada, sin asustarse, sin inmutarse. Solo se perdió en la nada.

Esa noche esperó otra pesadilla, pero ¿Qué obtuvo a cambio?

Recuerdos.

Horribles, tormentosos y odiados recuerdos que desde que se había mudado intento reprimir.

¿Por qué ahora? ¿Por qué no olvidaba? ¿Por qué Chaeyoung le hacia recordar eso?

Suspiró frustrada. Claro, porque Chaeyoung le obligó a recordarlo se dijo sarcástica por culpar a la pobre chica de sus propios problemas. Miró su reloj y vio que marcaban las 3:00 am.

Frunció el ceño por un momento sopesando una idea en su cabeza.
¿Serviría de algo? Se preguntó mientras salía de la comodidad de sus cobijas para sentarse en la orilla de la cama.

Mordió su labio ansiosa, quizá se estaba volviendo loca. Se levantó y caminó hasta la ventana que daba directo al lago, justo como la primera vez que vio a Chaeyoung pero...

Obviamente la chica muerta no se encontraba ahí. Aún así estaba inquieta y admitía que a la vez se sintió decepcionada de no verla.
¿Funcionaría?

De nuevo se preocupó por su salud mental mientras abría la ventana para dejar entrar el frío de la noche que impactó contra su tibia piel causándole un escalofrío.

— Chaeyoung — susurró a la nada asomando un poco su cabeza por la ventana.

Silencio.

Suspiró derrotada bajando su mirada, ni siquiera sabía que esperaba ganar con aquello. Dispuesta a volver a dormir levantó la vista para cerrar el cristal, entonces le vio.

A lo lejos, quizá 100 metros; alguien estaba parado a la orilla del lago.

Su corazón pálpito tan fuerte que sintió perder el aire y como si todo girara a su alrededor. Sus manos temblaron y una emoción desconocida para ella le invadió el pecho mientras veía aquella figura que sabía, le miraba fijamente. Apenas y podía pensar pues el ruido de sus latidos le ensordecía y un agobiante calor en su rostro le hacía sentir nerviosa.

Intentó calmarse y estuvo a punto de cerrar los ojos para hacerlo pero no podía (o quizá no quería) despegar su mirada de Chaeyoung. Una vez tranquila saludó con la mano a la chica.

Vio que esta tembló un poco sus hombros y tuvo la impresión de que esta se había reído por lo que frunció el ceño irritada. La molestia le duró nada cuando Chaeyoung levantó su mano y le saludó, después de eso le hizo una señal como diciendo que volteara hacia atrás y por instinto lo hizo sin entender lo que la otra le quería decir.

Cuando le miró de nuevo la fantasma movió su mano en forma de despedida y desapareció. Mina miró unos segundos el lugar donde antes había estado Chaeyoung sabiendo que no volvería.

Cerró la ventana y se giró para ir a su cama entonces entendió el mensaje de Chaeyoung.

"Vete a dormir" no supo porque pero una pequeña sonrisa salió de sus labios.