Capítulo 2

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Fared

Camino recto por el desierto, veo como el dragón verde planea en el cielo justo en lo alto de mi trayectoria, me tiene en su punto de mira.

Me odia lo suficiente, aunque no más que yo a todo lo que me rodea.

Sé porque me está observando, pero no me atreveré a mirar hacia atrás. Esa niña escandalosa puede quedarse a miles de millones de kilómetros lejos de mí. No voy a detenerme a esperarla.

Suspiro.

¿Por qué hago esto?

Ah sí, no soporto estar mucho tiempo con las personas, no puedo ser líder de toda esa gente a la que salvé. Mejor que Jacky se encargue, me dio alivio que lo hiciera.

No soy una buena persona para encargarme de otras, ni soy alguien que puede quedarse en un sitio un montón de tiempo, menos continuar con la misma gente durante días.

Debo reencontrar el culto de las diosas y así averiguar más sobre la maldición, luego de eso debo descubrir otros objetivos en la vida, porque creo que ya me los acabé todos.

Siempre sobreviviendo.

Siempre luchando.

Siempre cambiando de vida.

Toco la máscara cortada que cubre la mitad de mi rostro, solo un lado de este, ya que me lo destroce salvando a Irina. Y algunos dirán: eres un metamórfico, puedes arreglar tu cara, tú cambias de forma. No es tan sencillo, primero porque soy un híbrido, mi carne no se mueve tan fácil como la de uno completo y yo también sufrí modificaciones genéticas, así que no es como si tuviera todo el control.

Ahora sí soy un monstruo, tanto por dentro como por fuera.

Irónico, me llegó el karma, aunque siempre he vivido en desgracia, así que no entiendo cuándo la vida me pueda sonreír, maldito destino.

—¡Te alcancé! —grita la castaña, me da un toque al hombro, entonces la miro de mala manera, así que deja de sonreír y hace puchero—. Gruñón —se queja

No le respondo, en cambio la observo de forma de tenida. Cuando era pequeña era una niña rubia y siempre andaba vestida en kimono, parece que cuando el Reino del Cielo la compró, todas sus costumbres cambiaron. Aunque no entiendo cómo ese cabello marrón puede cambiar a rubio cuando utiliza su poder, el hechizo de Esmetriah no debe ser tan potente. 

¿Hechizo? No creo que esa mujer use magia, mejor dicho debe ser alguna poción, debe ser ciencia.

Pensar que pudo haber estado experimentando en ella me enerva.

Puedo notar mis sentimientos fluir ¿Cómo puedo matar estas malditas emociones? Han pasado años y siguen intactas.

Soy un monstruo, ella un ángel, tengo que protegerla, alejarla de mí ¿Por qué el destino se empeña en reencontrarnos? Me irrita tanto.

Belleza del Cielo #3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora