Primera Vez

514 57 8
                                    


La manera en que se conocieron no había sido extraordinaria, había sido en la escuela gracias al entrenador del equipo de animación. Sin embargo, ambos amantes juran que fue una de las mejores cosas que les pudo pasar.

[...] 

-¡Otra vez! ¡Se ve horrible! ¿¡Son delfines o vaquitas marinas!? 

Todo el equipo estaba jodidamente cansado, llevaban toda la mañana practicando bajo el insistente sol, la rutina aún no estaba lista y tenían que presentarse el viernes para apoyar a su equipo de fútbol. 

-¡Desde el principio! Y bien hecho.

Anthony lamentaba haberse inscrito en el equipo de porristas de su preparatoria, pero es que él amaba bailar y hacer cosas frente a los demás. No por nada era un Stark y es que su padre; Howard Stark, era de los bailarines más reconocidos a nivel mundial, ese hombre le había enseñado todo lo que sabía sobre baile. Quizá por eso, pasaba su vida entrenando hasta sangrar sus pies, perfeccionando cada movimiento.

Su más grande sueño era ser reconocido como el mejor bailarín al igual que su padre, Tony quería presentarse en grandes obras y películas musicales, ganar el primer lugar en concursos. Simplemente quería ser como Howard y era evidente que tenía que entrenar muy duro para serlo. 

Cada que se presentaba una oportunidad de bailar, siempre la tomaba, fuese el estilo que fuese, por eso es que ahora se encontraba con todo el sudor recorriendo su frente y el sol bronceando aún más su piel morena. 

-¡Mierda!… Ya no aguanto Pepps. 

-Vamos o Nick se enojara más.- la omega le dio una palmadita en la espalda para alentarlo a empezar de nuevo. 

Con un quejido de cansancio se colocó en su lugar, estaba harto de hacerlo una y otra y otra vez, sólo porque sus compañeras porristas no se aprendían bien sus posiciones, los pasos a ejecutar o los levantamientos simplemente no se realizaban en sincronización. 

Bajó un poco el short de su uniforme preparándose para comenzar y sonrió con galanura empezando a bailar la rutina, esperando realmente que esta fuese la buena, pero todas sus esperanzas se fueron al carajo cuando en el cambio de lugar, miró con curiosidad a los demás, encontrándolos perdidos en la figura. De sólo verlo, tenía ganas de llorar por tan espantoso acto y eso que él estaba dentro, ya imaginaba que tan horrible lo veían las personas que pasaban por la cancha. 

Por millonésima vez Nick había cortado la música y eso significaba que tenían que volver a comenzar, pero antes de eso, una de las porristas se acercó hasta el entrenador y susurró en su oído, Tony curioso, ni creyó que fuese algo bueno porque el gesto del hombre pasó a uno más molesto. 

-¿¡Saben por qué no estamos en el gimnasio!? Porque no importa donde sea que entrenemos, se sigue viendo igual de espantoso ¡Las cargadas son horribles! 

-Es que… 

-¡Es que nada, Sharon! Dices ser la mejor y te ves como pato en lugar de cisne allá arriba.

¡Tsss!

Tony y Peper se miraron incómodos, Carter era muy buena, tanto que el castaño la veía como una ligera competencia en ganarse los mejores lugares dentro de la rutina. 

-Voy a tener que decirles a los del club de atletismo que nos ayuden. 

La verdad es que ser ayudado por otra persona que no era del equipo de animación era un poquito humillante, porque a los ojos de los demás hacían verse como débiles porristas que no podían ejecutar bien sus levantamientos. 

"Know each other"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora