3.¿¡Reencarne como la melliza de Harry Potter?!

CAPITILO 8:La Nottita *inserte sonidos de tambor*

NARRA(Harley)

Mi busqueda de la diadema de Ravenclaw fue un completo fiasco...
La habitación estaba muy llena de cosas y es enorme! Es como buscar una aguja en un pajar... e encontrado cosas algo intersantes como libros raros, una muñeca escalofriante, ropas, telas y mas basura.
Pero nada de la condenada Diadema...
Lo que me capto la atención fuerón unos libros de magia sin varita y un libro de magia avansada los cuales me lleve para leer y practicar.
Nadie se dio cuenta de mi salida haci que me volvi a hechar como si nunca me hubiese marchado...
Los dias siguientes se volvierón algo repetitivos debido que casi toda las noches me dirigia a la sala de los menesteres a buscar la diadema, a practicar la magia sin varita o a crear una caja sorpresa que e estado creando para tal vez venderselo a los gemelos y lo vendan en su tienda de bromas, esta caja va a ser una caja completamente sorpresa que al verla parece ser una cajita pequeña completamente normal, hasta que la habres y tira al que haya abrido la caja lo que sea que tu hayas elegido para que lo sorprenda y un obsequio que igualmente tu hayas elegido, en mi opinión el confeti y purpurina de colores es perfecta para que te arroje a la cara ademas de que es gracioso,
La magia con varita se me a complicado mucho debido a mi brazo que esta mal, pero creo que ya estoy a punto de saber como es la cosa, comenze practicando el hechizo "acció" ya que seria muy util si es que me llegaran a quitar la varita, hasta ahora e conseguido que e mueva un poquito, no mucho pero algo es algo supongo, despues de todo no por nada solo pocos magos saben hacer hechizos sin varita, tambien practique un poco el patronus pero me sigue saliendo un gas plateado...

En fin... En muy poco tiempo, la clase de Defensa Contra las Artes Oscuras se convirtió en la favorita de la mayoría. Sólo Draco Malfoy y su banda de Slytherin criticaban al profesor Lupin:

(Draco):Mira cómo lleva la túnica

solía decir Malfoy murmurando alto cuando pasaba el profesor.

(Draco):Viste como nuestro antiguo elfo doméstico.

Pero a nadie más le interesaba que la túnica del profesor Lupin estuviera
remendada y raída (aunque planeo regalarle una nueva tunica para navidad). Sus siguientes clases fueron tan interesantes como la
primera. Después de los boggarts estudiamos a los gorros rojos, unas criaturas pequeñas y desagradables, parecidas a los duendes, que se escondían en cualquier sitio en el que hubiera habido derramamiento de sangre, en las mazmorras de los castillos, en los agujeros de las bombas de los campos de
batalla, para dar una paliza a los que se extraviaban. De los gorros rojos pasamos a los kappas, unos repugnantes moradores del agua que parecían monos con escamas y con dedos palmeados, y que disfrutaban estrangulando a los que ignorantes que cruzaban sus estanques, nada que ver con los kappas kawais de los mangas de mi vida pasada cinseramente.
Habría querido que mis otras clases fueran igual de entretenidas. La
peor de todas era Pociones ultimamente. Snape estaba aquellos días especialmente propenso a la revancha y todos sabían por qué. La historia del boggart que había adoptado la forma de Snape y el modo en que lo había dejado Neville,
con el atuendo de su abuela, se había extendido por todo el colegio. Snape no lo encontraba divertido. A la primera mención del profesor Lupin, aparecía en sus ojos una expresión amenazadora. A Neville lo acosaba más que nunca.

Y Harry aborrecía las horas que pasabamos en la agobiante sala de la
torre norte de la profesora Trelawney, descifrando símbolos y formas confusas, procurando olvidar que los ojos de la profesora Trelawney se llenaban de lágrimas cada vez que lo miraba. No le podía gustar la profesora Trelawney, por
más que unos cuantos de la clase la trataran con un respeto que rayaba en la reverencia. Parvati Patil y Lavender Brown habían adoptado la costumbre de rondar la sala de la torre de la profesora Trelawney a la hora de la comida, y siempre regresaban con un aire de superioridad que resultaba enojoso, como si supieran cosas que los demás ignoraban, yo me queria reir en sus caras a pulmón abierto, por que si alguien sabe que sucedera en el futuro esa soy yo, aun asi me aguantaba o reia con la excusa de que me acorde de un chiste.