Sólo tú [ɴᴏᴍɪɴ]

1: Sólo Tú

Jeno despertó con una gran resaca y se dió un baño. Se dio cuenta que el coche de Jaemin no estaba, seguro habría ido a dejar a los niños a la escuela así que se cambio y salió a su trabajo.

Sin duda hoy sería otro día peor como los otros.

Al llegar a su trabajo se dirigió a su oficina que compartía con su mejor amigo Mark. Estos se conocían desde la secundaria y nunca se separaron.

-¿Cómo te fue ayer?

-No me lo recuerdes, tengo una resaca para morirte y cada vez que me acuerdo me dan ganas de vomitar - Mark rió.

-Ay amigo, quién como tú, pero te entiendo, también estaría igual si ese fuera el caso.

Las siguientes horas se basaron en pláticas, trabajo y mucho papeleo.

Esta vez Jeno llegaría temprano después de mucho pues el siguiente día no trabajaba y podría cenar con su esposo e hijos.

Su sorpresa fue que no había nadie en su casa, le pareció normal pues creyó que estaba con su suegra así que solo le envió un mensaje a Jaemin diciéndole que lo esperaba a cenar y que le había comprado regalos a sus hijos.

Subió a darse un baño y cuando abrió el closet para tomar su ropa se dio cuenta que la ropa de Jaemin no estaba.

Corrió al cuarto de sus hijos y sus camas estaban desatendidas y tampoco estaba la mayoría de su ropa.

Se cambió como pudo y marco varias veces a el teléfono de Jaemin pero este nunca respondió.

Reviso el armario de abajo y no estaban dos maletas. Tomo las llaves de su auto y lo primero que hizo fue ir a casa de Jaemin.

Toco desesperadamente y Seohyun abrió, este se metió a la casa encontrándose a sus hijos jugando en la sala.

– Jeno...

– ¡Papiii! – Los dos niños corrieron a abrazarlo – por fin llegas, papi nana nos dijo que tú ayer no quisiste venir.

– ¿Qué?...

– Llegué mam... ¿Qué haces aquí? – preguntó furioso Jaemin mientras veía a su madre.

–Jaemin pero qué...

– Véte, Ahora.

– ¿Papi?

-Mis amores sus papis tienen algo que resolver, vengan vamos al parque, Seongmin dijiste que querías un helado ¿cierto?

– Siii

– Entonces andando.

Seohyun y sus nietos salieron dejando a la pareja en el comedor.

– ¿Qué te pasa Jaemin? Por qué viniste  a casa de tu madre con toda la ropa y no me avisaste.

– Vaya, creí que ni siquiera te darías cuenta, así como ya no me pones atención. Sabes que, vete Jeno no te quiero ver.

– Pero Jaemin...

–¡Vete ya!

– ¡No, no me iré hasta que me expliques qué carajo pasa contigo!

– ¿Conmigo? ¡Ja! ¿Soy yo él que llega siempre noche? ¿Acaso yo me emborracho y luego y me importa una mierda si mis hijos están bien? Jeno deja de fingir que todo está bien. Hace meses que que me ignoras, hasta tus hijos me preguntan si ya no los quieres. ¿Estas con alguien no es así? – Jaemin estaba al borde de las lágrimas mezcladas de tristeza y enojo.

– No, no, no, déjame explicarte, por favor. Esto es todo un mal entendido.

– ¡Por dios Jeno, Ayer llegaste con un chupeton y olor a mujer! - Jeno se quedó callado y Jaemin solo rió.