Severus es un joven abusado que no encuentra salvación hasta que una mala broma de los merodeadores le sale por la culata y un héroe inesperado ayudara a este joven a obtener la justicia que merece. En el trascurso se descubrirá que Severus es un hi...
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"Sufrir sin quejarse es la única lección que debemos aprender en esta vida."
Vincent Van Gogh
San Mungo
Ala pediátrica
Severus estaba despertando de su noqueo mágico, se encontraba entre la bruma de estar despierto y dormido, hasta que de pronto reacciono, recordó todo. Su descompensación mágica se debió a que cuando estaba hablando con la Medimaga de repente recordó que su madre no había ido no por estar pendiente al imbécil de Tobías sino porque estaba muerta.
Todo volvió a el de golpe, al parecer estar tanto tiempo sedado le había hecho olvidar varias cosas, entre ellas la carta que le envió el miserable de Tobías diciéndole que Aileen estaba muerta, que si le decía a alguien jamás volvería a ver su cuerpo y no podría hacer las cosas demoniacas que hacía con sus rarezas, para Severus era un dolor eterno en su alma porque mientras más tiempo pasaba sin hacer los rituales de pasaje más probabilidades habían de que el alma de su madre no alcanzara el descanso eterno.
La condición para que el donante de esperma le devolviera el cuerpo de su madre era que este borrara todo rastro del asesinato con su magia, lo que este no sabía que Severus planeaba hacerlo, pero cuando lo matara a él, los días de Tobías estaban contados porque desde que el pudiera levantarse del hospital saldría a cazar a ese bestia.
Pero ahora solo había un inconveniente los aurores estaban en medio, su venganza ya no sería posible, si atrapan a Tobías, este saldría derecho a la cárcel muggle, seria juzgado por magos, pero la justicia se impartiría en el mundo mundano, los muggles no pueden pisar azkaban o estarían muertos en menos de lo que canta un gallo por los dementores, estar encerrado con los muggles no iba ser castigo suficiente para ese infeliz, conociéndolo era un experto mentiroso y manipulador, tenía amigos en la fuerza de sus tiempos en el ejército, por eso nunca lo habían encarcelado, las veces que los vecinos denunciaban las golpizas a que se veían sometidos los casos no procedían en parte porque Aileen no declaraba y en otra porque los amigotes del bastardo no terminaban el procedimiento por encubrirlo.
Además de que consideran a Severus todo un marica al que debían ponerle mano dura antes de que terminara poniendo en vergüenza el nombre de Tobias, cuanto odiaba Sev a esos imbéciles, que por cierto de paso debería de darles su merecido.
Antes tenía la limitante de que si hacia algo, lo más mínimo con su magia para detener a Tobías, la cabra de Dumbledore lo usaría como cebo para crucificar a la casa de las serpientes acusándolos a todos de mortios, cosa que no estaba dentro de sus planes ni ser usado por la cabra para destruir a sus amigos y menos ser sirviente de un megalómano.
Pero ahora que sabía que era una especie de tesoro nacional usaría todo lo que estuviera a su alcance para destruir a todos los que le hicieron daño, esta vez no tendría piedad ni misericordia, total nadie la tuvo con él y lo mejor de todo saldría impune con la frente en alto, disfrutando de la desgracia ajena, porque bien dice el dicho el que ríe al último ríe mejor.
