"La verdad"

Único 2

Ya pasaban días desde la situación entre Feng Xing y Mu Qing, los demás dioses no estaban al tanto de la situación entre ellos, por lo mismo se les hacía raro que cada día que pasara el General Nang Yang estuviera en el palacio del contrario. La confusión siguió hasta que el grandisimo General Pei llegó para iluminarlos y dejar con más de un desmayo a los demás dioses marciales.

-Realmente le gusta armar alboroto ¿no?- dijo alzando la voz un muy enojado Mu Qing -General Pei, pensaba que con tantos problemas en el amor que tenía no se entrometeria-

-Vamos, vamos, si hacen una linda pareja y era imposible que pudieran esconderse por mucho tiempo, la tensión que se tenían la conocíamos todos-

-¡Eso es mentira!-

-Si tú lo dices... - dijo riendo y volteandose para irse.

Feng Xin que acababa de llegar al palacio del albino, se sorprendió de verlo de tan mal humor. Supuso que el culpable Pei Ming que le dijo algo que por obvias razones le molesto ya que él mismo se lo encontró en el camino. Se fue acercando hasta abrazarle por detrás y susurro esperando una reacción del contario -bebé, ya pasó tiempo desde la última vez-

-No me molestes, no estoy de humor para tus tonterías. Además, solo han pasado unos días así que te aguantas-

-¿Vas a estar así? Sabes que no me gusta- ya estaba sintiéndose triste, no podrían pasar mucho tiempo juntos por los deberes y en cada pequeño momento que se veían el contrario estaba de mal humor -supongo que debería irme para no molestarte... nos vemos Mu Qing-

-Espera...- no podía aguantar esa cara por parte del otro, casi parecía un cachorrito y no podía negarse a nada si hacía eso -La verdad es que vino Pei Ming y me dijo que todos sabían lo nuestro. Se que no te molesta, pero no quiero que nos miren mal-

"Así que eso era" pensó el castaño, "se hace tanto problema cuando se trata de algo que me involucra, es tan lindo".

-Ven aquí será mejor, ya es tarde...Y espero no te moleste que durmamos juntos-

-Solo dormir ¿entendiste?-

-Sí, sí- dijo entre risas coquetas.

A la mañana siguiente el primero en despertar fue Mu Qing y como no tenía ninguna intención de levantarse prefirió mirar a la persona a su lado.

Todavía no lo creía posible, era realmente raro que ellos estuvieran en una relación, pero de alguna u otra manera terminó pasando. Pensó en los tiempos en que sólo era sirviente y se escondía detrás de las paredes para espiar a Feng Xin, él realmente no había visto nunca a nadie tan con ojos tan hermosos. Al principio si tenía un poco de odio hacia el contrario pero todo cambió cuando lo ayudó a solucionar su "problema" aunque claro eso no fue lo único que hizo que se enamorara, también estaba el esfuerzo y la perseverancia que tenía. Se sonrojo de tan solo pensar en la palabra "problema", en ese momento recién inicia con su cultivo y era bastante hormonal a decir verdad.

Flashback

Eran las 5 am y el albino ya se encontraba despierto lavando la ropa de su alteza, realmente no le hacía mucha gracia tener que lavar pero ya estaba acostumbrado. Y como no podía seguir durmiendo luego de su pequeño problema mañanero no encontró mejor manera de olvidarlo que haciendo las labores.

Sin notar que alguien se le acercaba, susurro el nombre de la persona que se adueñaba de sus sueños todas las noches. Y sin evitarlo suspiro recordando lo mal que se llevaban.

-¿Qué haces susurrando mi nombre?- murmuró muy cerca de su oído Feng Xin

Le habían encargado ayudar a Mu Qing en todo lo que necesitará ya que no habían muchas cosas que hacer por hoy. Al principio claramente se quería negar, pero algo lo llevaba molestando desde hace tiempo.

-Estaba pensando lo molesto que eres- dijo girando la cabeza para que el contrario no vea su sonrojo. -¿No deberías estar haciendo otra cosa más importante que molestarme?-

-No, hoy es mi día libre así que pensé en estar contigo para ayudarte- dijo mintiendo.

-¿Desde cuando tan amable? No necesito tu ayuda en nada, puedo hacer las cosas solo-

-¿Estas seguro? -Dijo mirando hacia la parte baja de Mu Qing, cosa que no pasó desapercibida por él.

Feng Xin a pesar de vivir mejorando sus habilidades, sabía lo que le sucedía al contrario, él había pasado por lo mismo varias veces así que no se le hacía extraño, lo que se le hacía raro era querer ayudarlo con "eso".

Al darse cuenta a lo que se refería el castaño, se sonrojo hasta más no poder ¿enserio tenía un problema ahí abajo? Maldito sueño y maldito Feng Xin.

-¿Acaso....no puedo tener una erección? Eres tan infantil- dijo, parándose para poder arreglar su problema en el baño.

-Si quieres te ayudo....-susurro apenas audible y sin creer que lo había dicho en voz alta -después de todo te mentí, su alteza me dijo que tenía que ayudarte en TODO- dijo enfatizando la última palabra.

Acercándose poco a poco Feng Xin terminó por acorralar al contrario en una pared, se justificaba pensando en que eran órdenes de su alteza pero el sentimiento extraño persistía en su interior y le hizo decidirse por tocar la hombría de Mu Qing.

El movimiento lento por parte del castaño lo estaba matando, sabía que no era correcto para su recién iniciado método de cultivo pero su mente ya se estaba nublando viendo como el contrario tenía una expresión que nunca había sido capaz de ver.

El tan solo pensar en la situación en la que se encontraban, se sonrojaba a más no poder pero no podía evitar querer que lo tocará más y más hasta quedar impregnado de su olor.

-Feng Xin... Más rápido-

-Mmm-

A petición del albino el ritmo cambió, sentía que ya no podía más. La situación se asemejaba a su sueño y por eso se sentía más sensible y exitado de lo normal. No tenía la cara para hacerle saber al otro que lo que estaba pasando le gustaba.

-Me...ven..- sin alcanzar a terminar la oración se corrió en la mano de Feng Xin. Y sintió como no dejaba de observarlo el castaño, como si tuviera ganas de más.

-Realmente tenía ganas ¿no? -

-Cállate- arreglo su ropa y termino por irse casi corriendo, dejando al contrario solo con sus pensamientos y ese sentimiento extraño que empezaba a formarse de a poco.

Fin flashback

Luego de estar un buen rato estar acariciando inconscientemente los cabellos de Feng Xin mientras pensaba éste despertó con una sonrisa que removió el corazón de Mu Qing, a pesar de que lo encontraba muy vergonzoso nunca olvidaría esa oportunidad que tuvo con el castaño.

-Sigamos durmiendo, no hay mucho que hacer hoy-

-Eres un flojo-

-Solo contigo soy así-

-Lo sé- y termino por acomodarse en el pecho de Feng Xin para seguir durmiendo aunque sean unos minutos más.

Y sin emitir ninguna palabra más, los dos cerraron los ojos y volvieron al mundo de los sueños. Sin saber que iban a soñar con los pocos momentos que vivieron juntos, con la esperanza de poder crear muchos más en un futuro.

FIN

Si llegaron hasta aquí, muchas muchas gracias. Es mi primera vez escribiendo, estoy abierta a sus opiniones si sienten que algo falto o no concuerda.
Espero les haya gustado esta mini historia que se me ocurrió con mi shipp fav, besooos <3