SAUDADE- DOMKAT (COMPLETA)

38. ANUNCIO DE REGRESO.

DOMINIQUE
-Vamos, vamos. Estamos de vuelta- Melanie llegó a la reunión del elenco para ver el primer capítulo de la serie.

-¡Ey sis!- me levanté para abrazarla y recibirla. El tiempo para el estreno se había pasado volando. Sobretodo porque yo lo pasé con Kat. Hoy se estrenaba la temporada 3 y ninguno de nosotros se había imaginado la dimensión que tendría este maravilloso proyecto.

-Hola Dommi- Mel dejó un beso ne mi cabeza y se fue a saludar a los demás. Revisé mi celular buscando un mensaje de Kat que no había llegado. Me avisó que iría a ver a su madre antes, pero no me ha dicho nada más.

Las cosas entre Kat y yo estaban demasiado bien. Aunque ella de vez en cuando tenía recaídas por me hecho de la forma de pensar de su madre, era normal. De alguna forma ella se sentía entre la espada y la pared. Pero no quería presionarla. Si lo nuestro se sabía dentro de años, yo la apoyaría. Lo entendía perfectamente.
Yo tampoco me sentía lista para decir las cosas. Aunque si quería. No sabía cómo reaccionarian mis padres, los suyos y las personas que nos seguían. Debido a que Kat era casada, podría interpretarse de mala manera. Y eso también me asustaba.

Aunque ambas decidimos esperar que esté divorciada completamente. Eso, nos daría tiempo además de que su madre se mejore para contarle.

Solo pensarlo me asustaba. Tenía que confesarlo. Me sustaba el hecho de cómo reaccionaria las personas cercanas y que nos seguían. Aunque Kat se encargaba de arrebatarme ese miedo. Así como todos los demás.

Dejé el celular a un lado y caminé hasta la cocina buscando un vaso de agua. Estábamos en casa de Emily. Pero tenía ya tanta confianza con mi directora que sentía su casa propia. De eso se había encargado ella. Lo cual agradecía.

Llené el vaso con el líquido transparente y luego lo tomé. Lavé el vaso y por pooc lo dejó caer cuando sentí unos brazos en mi cintura y un beso en el cuello.
Cuando pude aspirar su delicioso, y particular, aroma. Solté un suspiro y un bufido.

-Algún día vas a matarme, Barrell- me reí y recosté mi cabeza en su pecho en la posición que teníamos

-Yo te mato a besos- tomo mi rostro y beso mis labios de esa manera que solo sabía ella. Tan apasionada pero tan tierna. Al cortar el beso, ambas sonreímos- Hola, mi amor.

-Hola, hermosa- me levanté y dejé un pico en sus labios. Kat rió llenadome de vida y felicidad-- ¿como te fue con tu mamá?- arregle un mechón de cabello que se había escapado de su coleta.

-Bien, Amor. El médico dice que mejora cada día más. Aunque debe procurar no tener emociones muy fuertes. Y bueno, lo que ya sabíamos- suspiró y me miró.

-No te me pongas así. Todo mejorará. Te lo prometo- apreté su mano y Kat soltó una sonrisa.

-No puedo decirle que no a esa sonrisa- habló dándose por vencida y me abrazó de manera cariñosa.

-¡Epa, tortolitas!- Dimos un salto separandonos y Melanie rió burlona ante nuestra reacción.

-Si no te mato yo, nos mata ella- Kat se tomó el pecho y asentí.

-Concuerdo- me reí y Mel giró los ojos.

-Tienen dos opciones. Decirle a todo el equipo que están juntas o que algún día en vez de mi las encuentre alguien más- se encogió de hombros para luego tomar un refresco del refrigerador.

Kat y yo nos miramos debatiendo las opciones pero no dijimos nada. No era realmente necesario.

-Lo pensaremos- hice una mueca y el se encogió de hombros.