Adore You | Kendall Jenner Y Tú (SEGUNDA PARTE)

03

______ Braun.

Ya había dejado a Nate en su casa, y me dirigía a la mía junto a Logan. Quien se encontraba dormido en la parte trasera del auto.

Llegue a la casa, donde estaba el auto de Kendall, estacione la camioneta, y baje a Logan con cuidado. Abrí la puerta de la casa y entré.

No había nadie en la sala, pero podía escuchar ciertas voces en la cocina.

Subí a dejar a Logan en su habitación, y luego baje a la cocina, donde se encontraba Kendall, Khloe y Kylie.

-Llegaste preciosa y hermosa cuñada, hecha por los mismos Dioses y cagada por Jesucristo. -Dijo Kylie repartiendo miles de besos por mis mejillas.

-Bien ya Kylie. -Dijo Kendall apartando a la menor.

-Hola amor. -Bese la frente de Kendall y saludé a Khloe -. ¿Que están haciendo?

-Ah pues nada, estamos en la orilla de la playa tomando sol. -Respondió Khloe con cierta burla.

-Que graciosa. -Dije sacándole el dedo del medio.

-Vinimos solo para avisar que mañana tendremos una cena en la casa de Kim. -Dijo Kylie -. Y esperamos que estén ahí.

-Ahí estaremos. -Dije y Kendall asintió.

Las hermanas se despidieron de nosotras, y salieron de nuestra casa.

Mientras me servía jugo de naranja, Kendall se encontraba sentada detrás de mí con su mirada fija en mí.

-¿Por qué me miras así Jenner? -Pregunte y ella sonrió tiernamente.

-Porque estoy muy segura de que estoy viendo a la octava maravilla justo ahora.

Le sonreí y ella me devolvió la sonrisa.

-Ven aquí.

Kendall se levantó, se acercó a mi y la envolví en mis brazos.

-Tú para mí siempre serás la única maravilla en este mundo Jenner.

Dejé un beso en sus labios y ella volvió a sonreír.

-Pero debo preguntar... ¿A qué se debe tanta cursilería? No digo que no me guste, me encanta. Pero mi Kendall Jenner, muy pocas veces es así. -Dije y ella rió.

-¿Te refieres a la Kendall Jenner que te llevo a Las Vegas y se casó contigo? -Pregunto riendo -. Jamás me arrepentiré de eso.

-Yo tampoco, definitivamente la mejor aventura.

-Mi mejor aventura eres tú. -Respondió Kendall -. Podemos faltar mañana a la cena de Kim, y dejar a Logan con Regina.

-¿Para que? -Pregunte con cierta burla y ella mordió sus labios.

-Descúbrelo tú Braun. -Respondió Kendall, dejando varios besos húmedos en mi cuello -. Descúbrelo.

Me guiño y se separó de mi para dirigirse fuera de la cocina.

No pude evitarlo y le di una nalgada haciéndola reír. Me dió una última mirada y salió de la cocina.

-¡DESCUBRELO BRAUN! -Grito mientras subía las escaleras y reí.

Kendall seguía siendo la misma mujer que me volvía loca desde que la conocí.

Nunca dejaré de amar a esta mujer.

Me serví una copa de vino y salí al patio. Me senté en la orilla de la piscina y meti solo mis pies en el agua.

Necesitaba relajarme un rato.

Pero sentía la mirada de mi esposa quemar mi espalda, sabía que me veía desde el balcón de nuestra habitación.

-¿Te gusta la vista Jenner? -Pregunte lo suficientemente alto para que escuchará y ella rió.

-Siempre me ha gustado Braun. -Respondió de la misma manera.

-Deja de mirarme, no voy a desaparecer.

-Es obvio que no lo harás, dejarme sería lo más estúpido que harías en tu vida. -Dijo con cierto tono burlón.

Tome un poco de vino y me gire un poco para mirarla.

-¿Por qué estás tan segura de eso? -Pregunte.

Kendall seguía sonriendo, aún segura de sus palabras.

-Porque cada vez que me miras, puedo ver que soy el amor de tu vida. Me miras como si miraras a lo más hermoso del mundo.

-Eres lo más hermoso de este mundo.

Kendall bajo la mirada sonriendo, y siempre que hace eso es porque está sonrojada.

-Y ahora Kendall Jenner está sonrojada, histórico. -Dije y ella rió.

-Cállate. -Dijo recostada del balcón.

-¡Callame Jenner! -Ella soltó una carcajada.

-¿Que haces ahí en la piscina? ¿Estás pensando en Madison?

Ya sabía yo que tanta cursilería venía por algo.

-¿Por eso eres cursi? -Pregunte y ella negó.

-No, solo quiero asegurarme de que no cambiarás a la octava maravilla del mundo por algo que no llega ni a lo mejor del mundo.

No pude evitar reír, aunque eso fue cruel de su parte.

-Kendall, Madison es una gran artista, y seguramente una gran mujer.

-Que sea una gran artista y una gran mujer lejos de mi esposa.

Al decir eso entro a la habitación. Saque mis pies de la piscina y entre de nuevo a la casa.

Subí las escaleras, y cuando me asome a la habitación de Logan, Kendall se encontraba con él entre sus brazos.

-¿Estás molesta Jenner? -Pregunte y ella rió sarcásticamente.

-¿Recuerdas que dije que trabajarias con Madison sobre mi cadáver, no? -Pregunto Kendall y asentí -. Sigo manteniendo eso.

-¿Que harás? -Pregunte y ella me miró por unos segundos.

-Descúbrelo Braun.

-¿Eres una caja de sorpresa, cierto? -Dije tomando un sorbo de vino bajo la mirada intensa de mi esposa y los ojos inocentes y enormes de nuestro hijo.

-Mami ¿eres una caja de sorpresas? -Pregunto Logan con cierta ilusión y una sonrisa.

Kendall rió tiernamente y respondió:

-Por supuesto que sí cariño.

-Todo un tesoro Jenner. -Dije y ella volvió a mirarme.

-¿Como el de los piratas? -Pregunto nuevamente Logan.

-Cariño. -Dije dejando la copa en una mesita y acercándome a ellos -. Es mucho mejor que un tesoro de piratas. -Dije cargando a Logan -. Ve a jugar con tus juguetes.

Bese su mejilla y lo deje en el suelo.

-Y tú me debes una explicación. -Dije mirando a Kendall quien rió.

-Yo no te debo nada. Puedes pensar lo que quieras Braun, digo ¿Tanto miedo me tienes?

-Le temo a la Kendall celosa. Aunque debo admitir que me gusta. -Dije mirandola lentamente de arriba hacia abajo.

-No hagas esto aquí, Logan está cerca.

-No es que te tenga miedo Jenner, se de lo que eres capaz, ese es el problema.

-Aprende a lidiar con eso.

Se acercó más a mi, mordió mi labio inferior con fuerza y con una sonrisa burlona salió de la habitación de nuestro hijo.

-Iugh, besos. -Dijo Logan con cara de asco y reí.

-Espero no verte nunca besando a alguien niño. -Dije y el rió.