:𝒞𝒶𝓅í𝓉𝓊𝓁𝑜 𝟣𝟤:

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Miró de un lado a otro más tranquilo, su respiración era normal, había tenido visitas de algunas enfermeras, parte de la observación que le había comentado el doctor.

Su madre se encontraba recostada de una manera incómoda en uno de los sillones. Dormitaba intentando estar al pendiente de su pequeño, aún no entendía lo que había ocurrido, por la noche dejó solos a Niall y a Louis, les tenía entera confianza.

Louis suspiró, estaba desesperado de estar atado a esa cama. Entre sueños escuchó a Zayn llegar por la noche junto con alguien, pero no estaba muy seguro de quién se trataba. Tampoco había tenido oportunidad de verlo ni a Niall.

Niall, se preocupó tanto por él que logró que lo atendieran con rapidez. No sabía cómo lo miraría a los ojos de ahora en adelante, casi le había dicho la verdad sobre Harry de no ser por su maldito ataque de asma. Quería arrancarse el cabello, no quería dañar al rubio con sus acciones pero no se sentía preparado para dejarlo en libertad.

Egoísta.

Vio la puerta entre abrirse, seguramente se trataba de alguna enfermera que volvía a visitarlo. Sin embargo una cabellera rubia apareció y tras ella una melena negra.

Sonrió, eran dos de sus personas favoritas en el mundo. Su sonrisa se hizo más amplia cuando vio un trozo de pastel en una charola que seguramente metieron de contrabando.

— ¿Cómo te sientes? — preguntó Zayn  —. Casi matas a este idiota de un susto. La próxima compartirán inhalador.

Pasó un brazo por los hombros de Niall, este no dijo nada solo se quedó en completo silencio, como una tumba.

— Ni — dijo el menor con la voz apagada.

— No es buen momento Louis — negó con la cabeza, no quería discutir con el menor en ese momento, el ambiente era demasiado tenso —. Ya te dieron de alta.

Zayn se quedó mudo cuando vio las miradas de sus mejores amigos mezclarse. Incómodo se fue a donde se encontraba Jay para despertarla. La mujer abrió los ojos y en cuanto vio a su bebé despierto salió corriendo hasta a él.

— No vuelvas a asustarme así, será necesario comprar más inhaladores para evitar todo esto.

Louis bajó la cabeza avergonzado, le había hecho pasar una mala noche a todos, con excepción del idiota de Harry.

Cuando llegaron al departamento Jay entró con rapidez a la ducha dejando  nuevamente a Niall y Louis solos con sus debidas precauciones. Zayn se había dirigido a algún otro lugar en el transcurso del camino.

— Niall — su voz salió nerviosa, como si con eso eliminara todo el daño hecho.

— No, Louis — no quería escucharlo, si respondía algo más, discutirían.

— Me vas a tener que escuchar — su tono era serio. Louis nunca ocupaba ese tono —. No te voy a decir que fue tu culpa porque claramente no es así.
Voy a terminar de decirte lo que no fui capaz de decirte por la noche. Te quiero Niall pero las cosas se enfriaron desde hace tiempo, siempre tenías algo mejor que hacer, siempre buscando pretextos con los que evitarme.

— Sabes que eso que tú llamas pretextos son cosas importantes de la universidad, tú mejor que nadie debe entender eso Louis — gruñó molesto, eso era lo que buscaba evitar.

— ¡Nunca tienes un segundo para mi Niall, si quiero salir contigo tengo que agendar una maldita cita! — escupió.

—¡¿Eso no significa qué me tenías que pintar los cuernos con tu jodido profesor que ahora que lo recuerdo, también es tu vecino?! — lo empujó con su dedo de forma amenazadora.

— Yo no quería Niall pero él me besó un par de veces y ayer... — tapó su boca, idiota, idiota lo había dejado tomar su cuerpo y sus sentimientos sin algún impedimento.

— Basta Louis — lo calló mientras sobaba sus sienes —. Nos estamos haciendo daño. No es justo para ninguno de los dos. Tú te mereces a un hombre que te ame sin horarios y siempre esté para apoyarte y yo a alguien que me apoye en lo que yo amo. Aquí ninguno de los dos está dispuesto a eso.

Ambos quedaron en silencio, mirándose a los ojos. Perdidos en un mar de sentimientos que ninguno era capaz de entender. Con lágrimas reprimidas en espera de que alguno se rompiera para salir.

— Te amo — se acercó el rubio al rostro de Louis y acarició sus mejillas —. Pero no quiero que lo nuestro termine mal. Merecemos recordar esto como una bonita relación.

Las lágrimas de Louis comenzaron a caer una tras otra, todo se estaba terminando ahí, entre las dulces palabras del chico por el que una vez sintió un amor intenso. Quería luchar por él y rogarle que se quedara, que lo intentaran una vez más. Sin embargo se abrazó a Niall y siguió llorando, sabía que el rubio estaba en lo correcto, ambos merecían ser felices.

— Siento que todo esto termine por mi culpa — bajó la cabeza intentando ocultar como se estaba rompiendo por dentro. El mayor lo tomó por el mentón, adoraba al castaño pero en sus planes no estaba hacerlo sufrir. Se acercó a sus labios y le plantó un último beso, uno dulce, tranquilo con sabor a sentimientos encontrados y a despedida. Se separó.

— Sabes que soy tu amigo aún después de esto y siempre que me necesites puedes buscarme — besó su cabeza y se quedó ahí, abrazado del castaño sin pensar en el tiempo que estaba corriendo, sin pensar en lo mucho que le hacía feliz que Louis respirara tranquilo abrazado a su cuerpo.

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Caminó pensativo en dirección a la cafetería de la facultad, se sentía mejor aunque aún tenía la mirada perdida. No había vuelto a hablar con Niall durante todo ese tiempo, sentía como la soledad le pisaba los tobillos. Zayn se desaparecía en las tardes después de clases sin ninguna buena excusa. Y Harry, él había intentado acercarse a Louis desde que se enteró del ataque de Asma de una semana anterior pero simplemente lo había ignorado.

Se sentó en una de las mesas, era temprano la cafetería aún se encontraba solitaria, todavía no salían los demás alumnos de sus clases. Soltó un grito desesperado y se cubrió el rostro irritado. No sabía cuánto más podría aguantar la situación. Seguramente las meseras debían estar mirándolo como un bicho extraño.Tomó sus cosas y caminó hasta el estacionamiento de la universidad, se iría al restaurante a tomar su turno.

La calle estaba casi vacía, a su lado pasó una mujer seguramente de paseo con su cachorrito. Fijó su mirada en frente y siguió.

Escuchó el pitido de un auto y se giró, ahí estaba el rizado, observándolo con impaciencia.

— Sube Louis — detuvo el auto —. Tenemos que hablar.

— No tengo nada que hablar contigo — contestó sin mirarlo —. Pensé que lo habías entendido después de nuestro último encuentro.

— Louis — Harry bajó del auto, no iba a dejar que el castaño se escapara una vez más.

— No Harry — intentó caminar pero el rizado le impidió el paso, explotó —. ¡No soy el maldito juguete de nadie! ¡Ya terminé con Niall por tu culpa!

— No me vengas a decir que eso es mi culpa Louis, porque tú y yo sabemos que no — respondió molesto.

— Tienes razón, todo es mi culpa por abrirle mi corazón a un hombre que no me quiere y solo piensa en su bienestar y en lo que dirá la gente — contestó y comenzó a caminar esquivando a Harry.

El rizado lo alcanzó y lo tomó por el brazo llevándolo consigo a la fuerza, habían muchas cosas que aclarar y no pensaba hacerlo en la calle, suficiente show ya habían tenido los peatones.

𐇵	𝓯𝓮𝓪𝓻𝓵𝓮𝓼𝓼 𐇵 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora