Amor de ideales (Ash x Hilda) Pokémon Blanco y Negro Reebot.

Capitulo 6

Me dijeron que aquí sería buen sitio para entrenar.. - susurro una castaña ojiazul mientras caminaba entre una gran fábrica.

La muchacha se encontraba ahí, ya que quería probar sus habilidades en combate y como no, ayudar a Emolga para poder controlar el poder que se le había otorgado aquel dragon negro.

Hilda estaba un poco preocupada, de cierto modo se alegraba de que Emolga fuera más fuerte sin embargo este poder era exagerado y podía dañar a quién estuviese cerca.

Alejando esos pensamiento suspiro, su compañera que estaba en el hombro le dio un alegre vocifero de "Emo", mientras que Hilda solo sonrió por su compañía.

Tomando una Pokeball de su bolso, la lanzó a su frente mientras que aquella esfera caí en su frente y una destellante luz salia de la esfera.

Una pequeña criatura de color azul la cual ella denominó como "Riolu", estaba en su frente mirando de forma seria a la entrenadora.

Hola Riolu.. - Hilda le llamó de forma calmada, doblando su rodilla para poder estar a su altura.

Él pequeño Pokémon la miró con curiosidad, solo recordando que aquella entrenadora lo había retado a un combate y había perdido.

Riolu sólo bajó la cabeza decepcionado, el había sido herido en su orgullo como Pokémon siendo derrotado y no sólo eso, si no también capturado.

Hilda vio tristeza en sus ojos, por lo que se acercó a él y lo tomó en sus brazos para poder abrazarle, él sintió cariño de parte de la entrenadora además de una agradable sensación como también una energía de color azul que yacía en ella.

La castaña se separó un momento para poder ver al Pokémon y sonreírle de manera amistosa.

No te sientas triste, está será tu nueva familia en la cual te podrás hacer más fuerte, te prometo que te ayudaré a ser mejor día a día y por ende quiero que tu me ayudes a conseguir mi objetivo.. - Riolu la miro asombrado, pensando un momento en lo que dijo la chica.

Él no tenía otra opción, de todos modos había sido capturado pero el pensando en que podía ser contraproducente, se alegro ya que podría volverse más fuerte y eso era lo que buscaba el.

Por lo que con un pequeño asentimiento, aceptó la propuesta de Hilda a lo cual daría un gran paso a la aventura.

....

Bien Emolga, tienes una gran roca en ese lado.. - señaló Hilda al frente - Usa tu electrobola con el mínimo poder.. - terminó la chica de decir.

Riolu miraba expectante, el sabía que la Pokémon de tipo volador y eléctrico tenía un gran poder, esto debido a que le derrota con una gran facilidad al solo lanzar una electrobola y no sólo poder si no también velocidad.

Por otro lado la castaña quería saber que intensidad podían tener estos ataques, no puede andar mandando a Emolga como si nada y lastima a cualquier Pokémon.

Muy bien Electrobola! - exclamó la castaña en forma de orden.

Emolga dio un pequeño salto hacía atrás, juntando sus manos creando una pequeña esfera de energía en ambas que producía un color azul intenso.

La pokémon lanzó el pequeño ataque a la roca que estaba enfrente de todos, esta comenzó a a acercarse a una velocidad media debido a que no fue con una intensión de producir daño, pero si comprobar.

Una pequeña explosión se pudo escuchar debido al ataque, Hilda noto la intensidad del ataque y vio que la roca que había usado como pruebas estaba completamente destruida.

Un suspiro de la chica fue en su interior, ella sabía que Emolga podía derrotar a cualquiera Pokémon, claro o al menos en su cálculo estaba.

Bueno, lo que supongo es que usar electrobola o atactrueno, más bien ataques eléctricos es muy peligroso, al menos podrás usar ataques aeroes los cuales se mantendrán.. - La muchacha comenzó a analizar la situación.

Ella era todo un prodigio en cuanto al combate se trataba, como no serlo si su madre fue una gran entrenadora y por ende sus dones al combate eran igual de buenos.

Analizar y comprobar estas situaciones era sencillo, lo cual lo hacía con detalle al ver los diferentes escenarios en los que se podía topar.

Emolga estaba sin comprender nada, ella sólo sabía que pasaba algo con sus ataques eléctricos pero sinceramente le daba lo mismo, solo quería pasarla bien con su amiga Hilda.

Riolu se sentía humillado, su compañera Emolga estaba en un nivel completamente diferente a lo que pensaba el, de por si había sido humillado una vez ahora el doble.

Si el pasaba en este momento para demostrar sus habilidades sería peor, solo quedaría como una simple mosca.

Sin más el pequeño Pokémon se adelantó a otra roca a lo lejos, para comenzar con un entrenamiento muy duro y por ende superar todos sus límites.

Hilda sonrió al ver eso, diciéndole a Emolga que practicarán sus ataques aéreos.

Sin embargo al momento de comenzar el entrenamiento, un fue ladrido se pudo escuchar en todo el lugar.

Todos voltearon a ver de donde provenía aquel ladrido, a lo que Hilda voltear y comprobarlo noto que era un pequeño Pokémon de color naranja con manchas de color negro, el cual su Pokedex catálogo como "Growlithe".

Hilda estaba sorprendida, no esperaba encontrar un Pokémon aquí o al menos que fuera salvaje.

Sin embargo el Pokémon cachorro no se veía nada contento, por lo que sin dudarlo el se lanzó al ataque contra nuestra héroe.

Pero antes de poder tan siquiera atacar a Hilda, Riolu de había interpuesto entre ambos y por lo tanto parando en seco al pokemon can.

Ambos se miraron, mientras que Hilda le dio la opción de pelear para que pudieran capturarlo.

Pará Riolu fue duro, ya que él Pokémon can contenía una gran cantidad de movimientos como colmillo fuego y agilidad lo que hacía golpearlo en repetidas veces con sus mandíbulas de fuego.

Sin embargo, cada vez que se acercaba Riolu este le proporcionaba una fuerte palmada con sus puntos vitales.

A lo que ambos en un momento se miraron cansados, pero a la vez se notaba una gran ira en sus ojos ya que no se podían permitir perder contra el otro.