54.- Olivia queda, Olivia no queda

534 93 53
                                    

Creía que lo vería todo, desde a Kahei durmiendo abrazada a Yeojin después de caer dormida en pleno trabajo, a Jinsoul en la bodega con todas las niñas abrazada a ellas

Creía que ese día tendría algo diferente, todo había sido algo movido los últimos días, no por el conejo que ahora cuidaban o por el gato de Yerim que a veces se colaba en la casa, sino porque seguía teniendo esa preocupación por Hyunjin y Heejin. Desde tiempo que llevaba pensando en qué podía ayudar, en el hospital era imposible encontrar el trabajo, no sabía si Kahei podía conseguir uno tampoco, tuvo una idea y falló, ahora no sabía qué hacer

No sabía que era lo que la atraía a ayudarlas, tal vez la necesidad de que Hyejoo no sufra a su corta edad, o simplemente seguir siendo la buena persona que siempre fue, pero ahí estaba pensando sin parar en cómo ayudar a la vecina que estuvo molestando desde el primer día

En ese momento la llave de la casa de Hyunjin estaba en sus manos, tampoco entendía por qué se la dio, en el sentido que la casa sería desocupada, tampoco le servía de mucho. Sea cuales sean las intenciones de Hyunjin, ahí estaba apresiando la llave como si almacenara esperanzas para todas

Cuando escuchó la voz de Hyunjin de quién estaba pensando, con anterioridad había escuchado a Heejin un poco menos claro, no sabía si ir a ver o no, no le gustaba parecer una persona muy chismosa, como tampoco le gustaba quedarse con dudas respecto a algo. Después de todo estaba sola, y además el grito que reconoció de Hyejoo la dejó pensando, no le quedaba otra de ir a ver, la curiosidad mató al gato. El grito de Hyejoo llegó incluso a ser de dolor a sus oídos y ella le gustaba ayudar, aunque era de esa pelinegra pequeña de quien hablaba

Con dudas inundando su cabeza, tomó entre su mano el pómulo de la puerta y lo abrió despacio, ya ahí pudo escuchar el llanto más claro de la niña, también lo que decían

—No, no, no— Volvió a repetir Hyejoo, Haseul se encontró de frente con Heejin con lágrimas en sus ojos y esta hizo como que no miró

—Hyejoo... Juro que no vamos a ningún lado muy lejos— Dijo Hyunjin, mirando hacia abajo, estaba agachada frente a la niña y parada a un lado, en su propia puerta, estaba Sooyoung mirando con una mirada triste

—¿Me puedes decir qué pasa?— Haseul llamó a Heejin que seguía haciendo como que nadie existía

—... Pasa...— Intentó buscar la forma de explicar, no le dirigió la mirada a Haseul y sus ojos se fueron hacia Hyunjin con Hyejoo por allá —Nos acaban de adelantar la fecha de nuestro desalojo— Limpió una lágrima con un pañuelo que llevaba, Haseul nunca esperó ver a una de ellas llorar y no sabía cómo le estaba afectando muy en el fondo, hasta le dio ganas de llorar con ella

—¿Qué?— Exclamó algo fuerte y recibió un asentimiento de parte de Heejin

—Por mientras estaremos en el auto y dejaremos a Hyejoo dormir con Chaewon, no podemos dejar que ella duerma incómoda en un espacio así, de hecho ni espacio queda ahí, nosotras dos ya lo llenamos— Volvió a explicar y dejó el pañuelo a un lado

No le quedó otra que solo mirar con pena, su vista se dirigió a Hyejoo que seguía insistiendo en no soltarse de Hyunjin

—Ay, Hyejoo, que te digo que vamos a estar aquí todo el tiempo... Ya deja de llenarme de mocos— Hyunjin no podía perder su sentido del humor y se limpió parte del hombro —Así cómo te dejo en un casa ajena— Limpió la cara de niña con el pañuelo por milésima vez

—Como si Hyejoo no haya hecho el desastre colonial aquí adentro antes. Todavía no encuentro el jarrón roto de hace un año— Sooyoung tampoco perdía sus ganas de molestar

—¡No quiero estar con ella!— Hyejoo volvió a lloriquear, se abrazó de nuevo a Hyunjin que la recibió en sus brazos

—No creo que te den un servicio en la casa de Jinsoul, así que...— Dio una mirada de evadir, definitivamente no era una buena idea, tampoco Haseul era una buena opción, la pequeña Yeojin todavía no entendía la situación y seguro hacía una guerra mundial al segundo

A Hyejoo solo le dio por seguir lloriqueando en su hombro, no podía reclamar nada, tampoco se sentía en el derecho. Después de un largo rato del abrazo, Hyunjin se separó y la miró de frente

—Estaremos afuera, ¿Si?— Le dijo con dulzura, evadiendo la palabra y mirando directo a sus ojos

—No— Llegó a parecer gracioso la forma en que le negó

—Te vas a comportar y no vas a golpear a Sooyoung cada diez segundos, ¿Promesa?—

—Oye—

—No— Repitió Hyejoo, de verdad que no lo iba a prometer

—Doble oye—

—No olvides que te queremos— En eso, llega Heejin también uniéndose al abrazo que se dieron

—No lo hagan en mis ojos, por favor— Suplicó Sooyoung, dándose la vuelta, incluso Haseul que miraba desde su puerta con ganas de llorar, también se dio la vuelta

—Vendremos a verte en la noche después de preparar todo— Dijo Heejin cuando dio un beso en la frente de Hyejoo que dio un hipido

—Nos vemos— Dijo Hyunjin también dándole un beso en su frente, después uno en su mejilla y por último tomó su mano para dirigirla hacia la mano de Sooyoung

Después de la despedida, tanto Hyunjin como Heejin, salieron por un lado de Haseul sin darle una mirada, de todas formas Haseul notó como la menor llevaba una mochila que antes no había notado

Sooyoung por su parte también ignoró la mirada de Haseul, solo con la mano dirigió a Hyejoo dentro de su casa y cerró la puerta cuando estaban las dos dentro

—Oye...— Sooyoung la llamó, la pequeña limpió de nuevo su rostro de las lágrimas con la manga y movió la mochila a su espalda —No se fueron lejos, nunca lo harán, de verdad yo no te haré nada malo— Se agachó en frente de ella a su altura

Hyejoo solo se limitó a asentir con su cabeza, su orgullo no le permitía ir más allá de eso, solo sacó otro hipido más calmado

—Mañana estaremos todas juntas jugando, lo prometo— Sooyoung ya no sabía las cosas que estaba prometiendo, solo fue a abrazar a la pequeña y esta la abrazó de vuelta con cariño, por primera vez en su vida sorpresivamente —No se van a dejar caer, tenlo por seguro— De alguna forma, también comenzó a soltar lágrimas y comenzaron a llorar las dos juntas

—Mañana estaremos todas juntas jugando, lo prometo— Sooyoung ya no sabía las cosas que estaba prometiendo, solo fue a abrazar a la pequeña y esta la abrazó de vuelta con cariño, por primera vez en su vida sorpresivamente —No se van a dejar caer, t...

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
¡Vecina, Su Hija! /LOONA/Where stories live. Discover now