mystery of love

Parte: O4

Chaeyoung no volvió a hablar con Hoseok luego de aquella noche, su corazón era sensible y dolía. Rechazó todos los intentos del chico en acercarse, no contestaba sus llamadas ni mensajes y le pedía a Lisa almorzar afuera en lugar de esa cafetería. Quizás no era para tanto, pero el pasado de Chaeyoung la volvió a perseguir, haciendo que los malos recuerdos regresaran a ella.

Tampoco volvió a ver a Jennie, era como sí después de llevarla a su casa se esfumara para siempre, ni siquiera asistía a sus clases de matemáticas, no aparecía en ningún lado.

En una noche, se dió cuenta de sus palabras, Jennie se drogaba, era un rumor cierto. Era una adicta y ahora que lo sabía no tenía ni la menor idea de qué hacer. Al final terminó preocupada, porque temía que fuera esa la razón de su ausencia.

"Amor..." escuchó a sus espaldas mientras guardaba sus cosas en su casillero.

"No me hables, Hoseok."

"Ya te pedí perdón, ¿qué más quieres de mí?" sonaba desesperado.

"Dame tiempo, tú sabes lo que la violencia me provoca."

"Lo sé, te recuerda a él, por eso quiero estar bien de nuevo, odio estar lejos de ti."

"Dame tiempo." repitió cerrando el casillero y caminando lejos de él, Hoseok no la siguió esta vez y creyó que era mejor darle su espacio por ahora.

Como por arte de magia, cuando más malhumorada se encontraba, chocó con alguien y casi se cae para atrás.

"Cuidado, Park." dice Jennie, sosteniendo su cuerpo, sonríe ladinamente y dice: "No te caigas por mi culpa."

"Entonces asegúrate de estar ahí para sostenerme." bromea, haciendo que Jennie sonriera más, y la suelta poco a poco. "No creí volver a verte."

"Lo creas o no, yo también estudio aquí."

"Vaya, creí que sólo te gustaba venir a pasar el tiempo."

"Este es el último lugar en el que pasaría mi tiempo. Pero supongo que hay una buena razón para venir."

"¿Cuál?"

"No tengo dónde más ir."

Y aunque su voz haya sonado con un toque de humor, Chaeyoung se dió cuenta de sus ojos tristes, siempre lo estaban, eran vacíos, oscuros y no había rastro alguno de vida en ellos. Como sí Jennie sólo existiera y ya, sin más.

"No quieres ser mi amiga pero me salvas." Chaeyoung le dice. "¿Por qué?"

"No lo sé, supongo que debía devolverte el favor de la otra vez."

"Me salvaste de Hoseok, y ahora de casi besar el piso. Te debo una."

"Pensaré qué hacer con ello."

La campana suena en ese momento, y Chaeyoung se despide de Jennie, le toca literatura, una de sus peores materias, lo bueno es que la compartía con Lisa.

El día se le pasa rápido, y sabe que comenzaron los rumores sobre que ella y Hoseok terminaron, pues eran tan melosos y desde aquella fiesta, donde todos vieron lo que pasó, sabían que las cosas no estaban tan bien.

Chaeyoung odiaba al alcohol, y más aún a la violencia bajo esas sustancias, por lo que le resultaba difícil de perdonar.

"Bueno, ¿harás algo hoy?" la última clase terminó, Lisa encuentra a su amiga en el pasillo y deciden irse juntas, como todos los días últimamente.

"No lo creo, el primer trimestre casi termina y eso significa exámenes."

"Claro, claro, estudiar como la comelibros que eres." se burla.

"No soy una comelibros, sólo soy responsable, no como tú."

"Auch."

Cuando llegaron al auto rojo de la menor, se sorprendieron de ver a un par de personas rodeándolo, riendo y golpeándose en broma. El Audi era bonito y lujoso, por lo que muchas veces habían estudiantes tomándose fotos en el, mas estos no lo parecían.

"Disculpen." dice Lisa luego de aclararse la garganta, todos voltean a ella con una sonrisa arrogante. "Es mi auto."

"¿Y?" responde el que estaba sentado en el capó.

"Y que sí no se van ya, llamaré a la policía."

"Oye, deberías calmarte." vuelve a hablar el chico. "No hacen falta las amenazas."

"Váyanse, vamos." suena una voz femenina, dulce y dura a la vez. Lisa y Chaeyoung ven a Jennie caminar a donde los demás, quienes no dicen una palabra y se van alejando.

"Gracias, Jennie." susurra Chaeyoung.

"Si, gracias." Lisa suena más fuerte.

"No hay de qué." se encoje de hombros y sigue el camino que siguieron los anteriores chicos.

"¡Jennie!" grita Chaeyoung cuando está algo lejos, antes de subirse al auto. La nombrada únicamente la mira con curiosidad. "¡¿Recuerdas dónde es mi casa?!" Jennie ladea la cabeza, pero asiente. "¡Te veo allí mañana por la tarde!"

Y aunque Jennie no entendió absolutamente nada de por qué la invitó, alzó su pulgar y volvió a caminar lejos de ellas.

"¿Estás loca?" le reclama Lisa arrancando el auto.

"Tal vez."