C A P I T U L O 3 0

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Salgo del despacho con dirección al estacionamiento, he quedado con Jess para almorzar juntos, es una bella ciudad y me da pena que ella no pueda conocerla bien.

Busco mi teléfono para avisarle que voy en camino, al palmeo sobre los bolsillos de los vaqueros que tengo puesto, pero no siento el teléfono. Busco en la guantera del coche, tampoco.

Creo que lo he dejado sobre el escritorio.

Bajo del auto para ir nuevamente al despacho, cuando me he acercado lo suficientemente me percato que la puerta está abierta y unas voces se logran escuchar.

Puede que sea Mackenzie arreglando la sesión fotográfica.

—¿Estás seguro de lo que has visto?

—Si, completamente segura.

¿Qué Mackenzie no debería estar con Jess? Le di la orden en que no la dejara sola.

Me detengo detrás de la puerta para seguir escuchando la conversación.

—Ha dicho sobre una relación algo tormentosa — reconozco la voz y es de Mackenzie. —Y si tomamos el hecho de los rumores de un embarazo, ¡Todo coincide!

—¿Estás loca? — ¿Qué carajos hace Lucas aquí? —Si él te llega a escuchar las estupideces que estás diciendo, tengo por seguro que estarás en serios problemas.

—¡No estoy exagerando Lucas!

—Baja la voz, que te pueden oír y solo lograrás hacer más grande el problema.

¿De que embarazo hablan?

Solo piensa un segundo, ve los reportajes de Jessica cuando salía con Erick, si logras ver con cuidado sus hombros podrás notar los golpes —formo un puño con mis manos para controlar mi enojo aunque ella se esforzaba por tapar los golpes, hay ocasiones en que no puedes ocultar eso.

—Estás llevando esto muy lejos —siguen sin poder creerlo Lucas. —Dejame que investigue por mi cuenta, no tienes que decirle nada a John...

No sé qué hacer. No, se lo que tengo que hacer, debo ir por el pedazo de hombre y hacerlo pagar por todo el daño que le ocasionó a mi Jess, ¿Cómo es posible que la haya golpeado? ¿A caso no tiene una madre o hermana?

Comprendo a Jess en que no me lo haya dicho, es cosa del pasado, pero ella sabe que haré cualquier cosa por ella, que no dejaré que nadie le hiciera daño, parece que he fallado.

Pero ese maldito patán me va escuchar, va a pagar por lo que le ha hecho a Jess. Se va arrepentir de haberla hecho sufrir.

Me tomo un par de minutos para calmarme y no gritarles a los entrometidos de mis amigos.

—¿Qué haces aquí? —pregunto de mala gana al entrar al despacho.

—¡John! —chilla Mackenzie. —¿Qué haces aquí? Crei que estarías almorzando con Jess.

—¿Cuando has llegado? — le pregunto a Lucas.

—¿Esa es la manera de recibir a tu amigo? —se acerca para abrazarme.— terminé mis pendientes antes de lo debido y no dude en tomar un avión hacia Italia.

—Me es gusto —mascullo.

—Recuerda la sesión fotográfica con los demás pilotos de carreras — habla Mackenzie antes de irse.

—Yo debo ir a investigar —anuncia Lucas— investigar sobre los mejores antros de por aquí—compone su error.

Tomo mi teléfono del escritorio, no dudó en sentarme sobre la silla para buscar a Erick Vander.

Estúpido John® |COMPLETA| en edición.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora