Un día antes de la esperada celebración de Halloween, Gon decide ir a dar una pequeña vuelta al bosque como siempre acostumbraba en su día a día. Pero gracias a un pequeño accidente, sin querer termina en las profundidades del bosque donde logra enc...
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Gon estaba empezando a despertar, sus ojos aún pesaban un poco pero no tanto como al principio, sentía calor en su espalda y ya no temblaba de frío como al principio, parecía envuelto en algo cálido y reconfortante. Poco a poco abrió sus ojos perezosamente, lo primero que pudo observar fueron los restos de la fogata, el bosque ahora estaba un poco más claro por lo que dedujo que era por la mañana
Bostezo e intento estirar su cuerpo pero entonces noto un pequeño detalle. Gon se encontraba aprisionado, más específicamente entre el pecho de alguien, aquel calor reconfortante era la piel de su espalda chocando con el cálido abdomen del contrario, piel a piel sin ninguna interrupción, aparte de ello también estaba siendo sostenido por unos brazos rodeándole la cintura y siendo arropado con el mismo manto
El moreno se sonrojo fugazmente e intento levantarse pero aquellos brazos los sostuvieron fuertemente, sin embargo poco a poco el agarre fue haciéndose más suave—Lo siento, te desperté—Una voz grave y serena le susurró en su oído logrando ponerle la piel de gallina, tragó en seco y está vez se alejó lentamente saliendo de los cálidos brazos
Al voltear pudo observar más a detalle al extraño chico. Él también lo observaba sin ninguna expresión, poseía unas frívolos ojos zafiro que lo hechizaron en un segundo, tan azules y misteriosos, resaltaban con su blanca piel y cabello albino. Gon parpadeó varias veces saliendo de su trance, definitivamente nunca había visto a nadie como él, lo cual despertó una increíble curiosidad en el moreno
Se mantuvo de pie observando su figura sentada, atrás de él se encontraba aquel animal durmiendo como si nada estuviera sucediendo. El albino también mantenía la mirada sobre aquel adolescente de orbes ámbar ¿De dónde había salido? ¿Era del pueblo? Y más importantev ¿Por qué el menor podía verlo y tocarlo?
El silencio era absoluto y Gon sabía que no podía seguir soportando la profunda y analizadora mirada de aquel extraño
—¿Cómo te encuentras?—Decidió hablar para romper el silencio. Bajo la mirada a su pecho descubierto, solo para encontrarse con una piel perfecta y ausente de cicatrices. El moreno formó una pequeña "o" con su boca e inmediatamente se cuestionó si todo lo que había sucedido ayer fue un sueño pero ¿Entonces por qué no traía su camisa? Si mal no recordaba la había utilizado para hacerle una venda
—¿C-como?—Señalo el abdomen contrario
—Regeneración—Respondió de manera simple
Gon, muy confundido sentía como si humo estuviera saliendo de su cabeza
—¿Qué eres tú?—Cuestiono—¿Estoy muerto?—El cuerpo del menor empezó a temblar levemente gracias al frío del bosque acompañado con la mañana
El albino lo observó fijamente—No te debo explicaciones, sin embargo gracias por ayudarme a acelerar mi regeneración
—Regeneración...—Dijo el moreno entre sus pensamientos—¡Cuéntame más!—Exclamo de manera imperactiva como si todo el miedo y los nervios que tenía hubiesen sido drenados. Se acercó al peli blanco sentándose en frente de él
