Mi novio es un fantasma

14. ¿Cuánto tiempo he de esperar?

Más de un año, más de un estúpido año fue el que me pase tratando de que Midorima volviese a perder la consciencia como paso con los chocolates: intente que volviese a comer dulces con licor, comida con licor, frutas con licor, hasta su bebida con licor, pero, vaya que su estúpida suerte estaba como siempre de su lado y no de la mía.

Después intente otros métodos, como la hipnosis, pero al único que afecto fue a otro de mis sempai quien comenzó a cacarear como gallina, algo muy gracioso pero que al final termine regañado; también con brujería o con un tutorial para llamar al ser amado, pero lo único en que me sirvieron fue para que más almas perdidas supieran sobre mí y tuviese que ayudarlas, así que tuve más trabajo del necesario a aparte del entrenamiento, de ayudar a nuestros nuevos integrantes y claro, ayudar a Midorima con sus continuas búsquedas de Luky ítems.

Fue un año bastante cansado para mí, así que decidí tomarme un momento de descanso y solo conformarme, de nueva cuenta, con solo estar a su lado, después de todo o era eso o lo terminaría golpeando con un bat en mi afán de hacer que me recordase.

Sin embargo, no dejaba de pensar y cuestionarme del por qué me encontraba tan férreamente enamorado de él, supuse que era por mi completa inexperiencia, así que trate de buscar otras experiencias con otros chicos pero, al intentarlo, cuando algún otro trataba de tocarme o de acercárseme de cierta manera especial, mi cuerpo de inmediato los rechazaba, simplemente para mi ninguno era él.

Estaba completamente perdido y el miedo se apodero de mí, ya que si solo era él el elegido, qué me pasaría si nunca regresará su memoria, qué pasaría si el elegía a otra persona en lugar de a mi... ¿Por cuánto tiempo más duraría esta situación? ¿Cuánto tiempo me haría esperar? No, más bien, ¿Cuánto tiempo podre con esta situación?

Me dije mientras en uno de los entrenamientos veía como uno de nuestros nuevos integrantes se acercaba y le son reía sin problema a Midorima, así que por propio impulso, sin meditarlo lance una de las pelotas contra el nuevo, haciendo que cayera al piso...

¿Alguna vez al tenido la sensación que todos son felices menos ustedes? Bueno, después de la regañiza y larga charla del entrenador, de cómo alguien de tercero debería de comportarse y ser un ejemplo para sus kohai, y que me pidiese que me retirara a descansar, llegando a casa solo me dedique a checar la computadora y pues ahí estaban todos sonriendo: que si Kise y sus nuevos proyectos y fotos con su novia, Aomine con los casa talentos de tras de él, Murasakibara y sus continuos nuevos duces... Aunque, la noticia más impactante para mí era el hijo de Kagami y Kuroko, Hikaru. Así es, aunque no lo crean, estos dos tuvieron la fortuna de que un niño llegara a sus vidas.

Envidiaba a esos dos, ser una pareja amorosa y más a parte ahora un hijo se unía a ellos, qué más podrían pedir, en verdad tenían tanta suerte, o bueno para quienes lo vemos por fuera siempre vemos todo lleno de flores, los que saben sobre su historia me entenderán.

¡Ah! Me estaba volviendo patético, así que, después de limpiar mí cuarto, poner en orden mis cosas, mis materias y de decidirme por fin por la carrera que quería estudiar, decidí que, de igual forma, era tiempo de afrontar a Midorima de frente, así que, armándome de valor, decidí declararme y que pasara lo que tuviese que pasar...

A la mañana siguiente, entonces, fui más temprano de lo normal a la casa de Midorima. Me sentía más que nervioso mientras iba repasando el cómo y en qué momento iba a hablarle sobre mis sentimientos y, en caso de recibir una negativa, no tendría problema, después de todo, solo faltaban algunos meses para el termino de nuestro tercer año y fuera una u otra cosa, bien o mal, podría concentrarme para el examen a la universidad, después de todo decidí que no tendría arrepentimientos después de eso.