You're not alone

Capítulo 6

Ha pasado más o menos unas semanas, desde que Rusia y yo somos amigos, de hecho me la he pasado bien, me invita a tomar café, o avecés al cine, es muy agradable y divertido, la relación con mi hermano ecuador, ha mejorado, y también he estado en contacto con ucrania, dentro de poco volveremos, eso me emociona, apenas llegue debo arreglar todo antes de irme, no veo la hora para finalmente, comer hallacas y pasar un buen rato con mis hijos, en este instante estoy, en una reunión de la ONU, la última y después regresaremos, no prestaba atención a lo que decía, lo único que escuche era la noticia de una posible tormenta, pero no era nada grave, espero que no impida volver, cuando acabo, fueron saliendo los demás deseándose feliz navidad, yo por mi parte le desee feliz navidad a los latinos, también a ecuador y a Colombia, aunque este último no respondiera, solo lo ignore y me dirige a la salida, no puedo esperar para finalmente volver a mi tierra, estaba feliz, esta era la única fecha donde podía olvidarme del dolor y la tristeza:

- Venezuela- escuche como gritaron mi nombre

Voltee a ver a la persona, era ucrania, venia corriendo hacia a mí, cuando estuvo frente a mí, mire como tomaba aire, cuando finalmente se calmó, me miro:

- Hola ucrania- lo salude- que pasa

- Nada solo quería desearte una feliz navidad- hablo sonriéndome

- Ah, igualmente - sonreí levemente- espero y la pases bien

- Igual, tengo algo que darte- saco algo de su suéter y me lo extendió- ten es un regalo de navidad adelantado

Lo mire incrédulo, pero el solo sonrió, con algo de nerviosismo tome la caja, lo volví a ver, me dijo que la abriera, empecé a quitar el envoltorio con estampado azul, le quite la tapa, y mire el obsequio, era una bufanda tejida color rojo, la saque y la mire, era muy suave:

- Te gusta- pregunto el ucraniano

- Es muy linda- hable sin verlo

- Me alegra que te guste- sonrió- pase muchas horas tejiéndola

- Enserio- lo mire incrédulo

- Si- hablo avergonzado- quería darte un regalo aparte quería darte las gracias por aquella ocasión en la cual me escuchaste enserio me ayudó mucho, contigo siento que puedo ser yo - tenía un sonrojo muy lindo y sonrió- gracias Venezuela

Lo mire en silencio, también estaba sonrojado, podía jurar que el ucraniano tenía un fondo rosado y brillitos a su alrededor, se veía muy tierno, le sonreí, quien diría que hace un par de semanas solo lo veía desde lejos, y ahora acaba de hacerme un regalo, salí de mi trance cuando escuche mi teléfono sonar, me disculpe y lo saque, mire quien era, al parecer era Zulia, que me enviaba el mensaje, al parecer me preguntaba que si iba en camino, le conteste que salí de la reunión hace rato, que ya me dirigía a casa a buscar mi maleta y a esperar que la ONU, dijera que el avión ya estaba listo, me despedí de ucrania, y seguí mi camino, cuando llegue a la parada, me quede viendo la bufanda, sonreí al imaginar a un ucraniano tejer con paciencia, para dármela, agarre y me la puse, la enrolle, para que cubriera mi boca, era muy calentita y olía a cereza, aspire un poco más el aroma, para después suspirar, me puse a pensar que tal vez, ante de irme debería comprarle algo, debía pensar en que darle, y aparte también y aprovecho de compararle cosas a mis estados, salí de mis pensamiento cuando llego la camioneta, me monte pague y me senté cerca de la ventana, mire el paisaje nevado del lugar, era muy hermoso, me pregunto a quien le toca, cada año celebramos la navidad y el año nuevo en una casa diferente, una navidad en caracas, otra en Anzoátegui, y así sucesivamente, creo que le toca a Carabobo, me baje en una parada, cerca de un centro comercial, camine hasta que entre el sitio, estaba calentito, trate de pensar que regalarle a mis 23 hijos, para caracas una camisa nueva de esas de moda, para Lara una falda de color rosa, un poco más arriba de las rodillas, para que se vea más coqueta, para Miranda unas cuerdas nuevas para su guitarra, y así con cada uno, hasta que solo me faltaba Zulia y Carabobo, al último le compre unos guantes negros sin dedos, pero, cuando trate de pensar que comprarle al zuliano, lo pensé y no encontré nada que darle, aparte aunque me duela admitirlo, él y yo tenemos una relación algo tensa, aunque avecés hablamos, me tiene respeto, no se mucho sobre él, que pésimo padre soy, ya se voy a llamar a caracas tal vez él sepa que le gusta, le marque, repico por un rato, hasta que finalmente agarro: