𝗨𝗡 𝗘𝗦𝗣𝗢𝗦𝗢 𝗗𝗘 𝗠𝗘𝗡𝗧𝗜𝗥𝗔 | 𝗞𝗜𝗟𝗟𝗨𝗚𝗢𝗡

⌗ O6 ₊˚

La familia Zoldyck se encontraba en el aeropuerto, a su alrededor se encontraban sus maletas y mucha gente apuradapara poder abordar su avión. El sonido de el megáfono llamando a los pasajeros a sus correspondientes vuelos resonaba en el lugar, haciendo que el albino se irritara más por la situación.

── Es increíble que un niño de seis años me chantajee. ── Comenzo la conversación un Killua bastante enojado, quien se encontraba sentado al lado de el padre de los niños. Ambos hombres se encontraban moviendo con el pie con irritación y ansiedad. Ambos estaban molestos por las circunstancias.

El niño acusado, se encontraba sentado en medio de su padre y su hermana, ni siquiera se inmutó por la acusación del mayor. ── Solo vi la oportunidad y la use. ── Expreso con tranquilidad el pequeño mientras jugaba con sus pies, su expresión era indiferente a pesar de lo eufórico que se sentía por viajar.

El padre del menor lo defendió. ── Enojate contigo, tu fuiste el que creaste toda esta situacion. ── Le recordó con molestia mientras cerraba su poleron con mucha molestia.

── Ah, si, yo lo hice. ── Le respondio con ironia el albino, aunque el mismo sabía que si, todo era por culpa de él.

── Killu, escucha, mi tolerancia a estos continuos teatritos esta aquí, ── Le dio a saber al ojiazul mientras ponia su mano al frente de su cuello, demostrando lo estresado que estaba. ── y si sube hasta acá...── Le explico mientras cambiaba de posicion su mano y la colocaba arriba de su cabeza. ── Tomare a mis hijos, te voy a delatar y me iré a casa. ── Amenazo a Killua, el cual iba a responder con la misma molestia, pero antes de poder siquiera intentar hacerlo, una voz femenina interrumpió la "pequeña" discusión.

── Estoy super emocionada por esto Killu. ── Les hablo con mucha emoción la chica mientras se acercaba a donde estaba la familia con una revista de adolecentes en su mano.

El animo de el Zoldyck cambio en un instante, su rostro pasó de estar con una molestia notable a una sonrisa casi idiota. ── ¿No es cierto? Iremos a Hawái. ── Le dijo feliz a su pareja, a lo que Gon rodó los ojos con incomodidad. ── Nadaremos con delfines, será muy divertido. ── Continua mientras se paraba del asiento a darle un beso a la rubia. Cuando estaba a centímetros de juntar sus labios con los de su pareja, un molesto ruido loss interrumpió, causando aún más estrés en el joven Zoldyck.

── ¡ALTO! ¡ALTO! ¡KILLU ESPEGA! ── Grito un desconocido pelirrojo con un acento francés mientras iba corriendo hacia donde estaban ellos con su maleta en mano. Apenas llego a su destino la rara familia pudo reconocerlo, aunque con dificultad. Era Hisoka, el cual llevaba un extraño traje de arlequín, su cabello estaba hacia arriba y en una de sus mejillas tenía una estrella mientras que en la otra tenía una lágrima.

El recién llegado posó su mano desocupada en el cuello de Gon y le planto un beso apasionado mientras que el azabache lo veia sorprendido. Gon tardó apenas unos segundos en reaccionar, lo alejo mientras lo tomaba del cuello con bastante fuerza. ── Mi fgutita maduga, no gesistigía jamás que te fuegas tu solo. ── Canturreó el más alto con tranquilidad, como si no lo estuvieran tomando del cuello. ── Oh, oh, ¿Es el? Este es el don genegoso el que tengo frente a mi. ── Habló Hisoka mientras miraba a Killua sin una sonrisa socarrona, sabiendo lo molestos que estaban Killua y Gon.