Novio de Alquiler - Minchan

039

El silencio entre ambos era totalmente incómodo, sin embargo, ninguno se atrevía a dar la primera palabra. Estaban sentados en una plaza pequeña, bajo un árbol, mirando a los niños jugar mientras trataban de no mirarse.

Christopher mordió su labio inferior, jugando con sus manos.

—Lo siento —dijo de pronto, llamando la atención de Minho. El rubio lo miró, sin embargo, Christopher siguió mirando al frente, incapaz de sostenerle la mirada—. Por todo... Yo realmente lo siento, Minho.

Minho suspiró, negando con la cabeza, pasando una mano por sus cabellos.

—Está bien...

—No lo está —Christopher por fin se giró para observarlo, sonriendo tristemente—. Fui un chico egoísta con todo. La pérdida de Young Mi me golpeó demasiado duro y quería odiar al mundo, quería odiar a alguien. Tú eras la persona más cercana, así que no dudé en desquitarme contigo cuando no lo merecías.

Minho levantó una mano, acariciándole la mejilla lentamente. Sintió la suave piel de Christopher bajo su tacto, conteniendo las ganas de darle un beso y hacerlo sentir amado, querido.

—También lamento lo que dije —se disculpó Minho.

Christopher hizo una mueca.

—No dijiste nada que no fuera cierto.

—No, pero... —Minho apretó sus labios un momento, buscando las palabras correctas para decir lo que quería, tratando de no acobardarse, porque pedir disculpas era demasiado difícil para él—, pero... había mejores maneras de decirlo. No sacártelo en cara, no tratarte tan mal. Así que lo siento, Channie.

Otro silencio entre ellos, sólo que ahora ya no era tan incómodo.

Christopher tomó la mano de Minho y le dio un apretón suave.

—Lamento también lo... lo que hice el otro día —sus mejillas se pusieron coloradas, avergonzado totalmente—. Siento haber querido forzarte de esa forma, es sólo que... que me sentía demasiado solo y te necesitaba.

Te necesito, quiso decir, pero las palabras no salieron de su boca.

—Tranquilo —Minho le sonrió con debilidad, recordando lo ocurrido esa noche—. Ambos... ambos deberíamos comenzar de nuevo.

Christopher levantó la vista con sus ojos brillando, sintiendo su corazón latiendo desbocadamente en su pecho.

—¿De nuevo? —preguntó con esperanza.

—Sí —Minho asintió, sin dejar de sonreír de lado—. Ya sabes, ser amigos.

Y tan rápido como su esperanza apareció, murió de pronto ante sus palabras.

Claro. ¿Quién querría estar con él luego de todo lo que hizo?

No debía conformarse con nada más que con ser un buen amigo para Minho, para apoyarlo cuando no lo hizo. Sería un premio –y su condena también.

Se forzó a sonreír, asintiendo.

—Tienes razón —trató de que su voz no temblara—. Entonces, ¿amigos?

Minho sintió que no era suficiente para él, pero sí para los dos. Porque en un mes se iría de allí, se iría de Corea a otro continente, y no podía tener una relación con Christopher a distancia. Era imposible para él, porque sabía que Christopher era una persona de contacto, y estar separados... le iba a romper el corazón por completo.

Prefería seguir manteniendo una amistad con el chico a perderlo de esa forma.

Tragó saliva, pensando en sí contarle o no sobre su traslado.

—¿Vas a volver a la universidad? —preguntó casualmente.

Christopher rascó su nuca.

—No por ahora... —murmuró, antes de morder su labio inferior—. Mamá regresó, ¿sabes?

Minho lo miró con sorpresa.

—¿Qué?

Christopher se encogió de hombros, pero Minho lo conocía lo suficiente para saber que estaba triste y dolido.

Así que echó abajo el orgullo que tenía y lo abrazó, sintiendo los temblores en el cuerpo de Christopher.

—Mamá. Mamá regresó y... y quiere arreglar las cosas conmigo —levantó la vista con los ojos llorosos—. ¿Soy una mala persona si quiero que se vaya?

El corazón de Minho se rompió al escuchar sus palabras.

—No, cariño —no pudo evitar el mote, sin embargo, Christopher pareció no darse cuenta—. No lo eres. Jamás podrías ser una mala persona.

—Ella... Mamá quiere que me vaya con ella a Japón —Christopher enterró su rostro en el cuello de Minho, suspirando—. Si no soy una mala persona, ¿entonces soy un tonto por estar considerándolo? —el chico apretó el agarre sobre los brazos de Minho—. Es sólo que... es la única familia que me queda...

Yo quiero ser tu nueva familia, pensó fugazmente Minho.

Pero no podía decirlo. Decir eso era darle esperanzas a Christopher, era decirle de forma indirecta que todavía lo quería como un novio.

No podía decirlo, porque en un mes estaría lejos de él.

—Si te hace bien, Channie —dijo Minho, revolviéndole el cabello—, entonces no eres un tonto. Algunas personas... a veces merecen una nueva oportunidad para redimirse.

—Redimirse —murmuró Christopher, asintiendo.

—Sea cual sea la decisión que tomes —le dijo Minho—, yo voy a apoyarte en todo.

Luego, le besó la frente, y las cosas se sintieron bien por un breve momento.

Holi cómo están? Espero se encuentren bien
Que les pareció este capítulo?
Cuídense mucho lxs quiero, lavense las manos.
-channiecute