Capítulo 28

58 13 0
                                    

Han pasado los días.

Hawks y yo hemos hecho un buen equipo, lo reconocemos.

En nuestras rondas, hay uno o dos periodistas que se nos acercan para hacernos preguntas, quizás mala suerte por que son preguntas demasiadas personales.

Es jueves.

Casi dos semanas con Hawks.

Él me ha enseñado algunas cosas verdaderamente muy buenas.

En las calles, he sabido diferenciar entre civiles normales, nerviosos, enojados y algunos sospechosos.

En su agencia, he sabido como trabajar con papeleos y todos acerca de ello.

He hecho algunos compañeros de pasantía, las personas de seguridad de su agencia de Hawks.

Respecto a mis amigos... Todos están bien, o eso parece.

Sero ha tenido algunos problemas en la agencia y Katsuki problemas en cuanto su vigilancia.

Momo, Ochaco y Tsuyu están perfectas.

Lo mismo digo de Kirishima y Denki.

Jiro me ha dicho que es muy divertido trabajar con Present Mic pero se tiene que cubrir demasiado por sus gritos.

Deku ha estado mejor que nunca... Aunque All Might es algo, quizás, raro con Izuku.

Y Shoto... Él me ha dicho que está bien, no han habido problemas con su padre y en la agencia todo va de maravilla.

Era de tarde y justo ahora dábamos unas vueltas en la ciudad, Hawks siempre sonriendo y saludando. Yo tenía tapada cierta parte de mi cara por mi uniforme.

Nos detuvimos en un parque, ambos quedamos ahí.


(...)


Ya estaba en mi habitación. Hawks y yo cenamos en su casa.

Nos despedimos para poder descansar. Me puse mi pijama y caminé hasta el pequeño escritorio que Hawks me había dado. Tomé mi laptop y la encendí, debería de ver mis correos por si pasa algo en la agencia de mi madre o por si Aizawa tenía algo que decir.

Decidí hacer una video llamada con Shoto...

Eran las 10:08pm... Era raro que no respondiera.

Quizás esté con su padre.

—¡Oye extranjera! -escuché a Hawks, caminé hasta la puerta y abrí- Quería decirte que... Como sabes mañana es viernes, debo de ir con Endeavor-San, en su agencia...-.

—No hay problema, ¿A qué hora nos iremos?.

—No iremos -dijo y lo miré- Iré solo.

—¿Cómo que irás solo Keigo? Puedo esperarte y despu-.

—¡No! Es algo que no decido yo. Yo iré temprano, tú irás a la agencia y trabajarás ahí el día de mañana.

—¿Yo sola? -dije y él asintió- ¿Y que se supone que debo de hacer?.

—¿En serio me preguntas eso? -dijo riendo-.

—No podré hacer nada sola.

—¡Wow! Acabada a los 17 -dijo y empezó a reír-.

—¡Keigo! Te lo digo en serio, ¿Deberé hacer tus citas como si fuera tu secretaria personal? ¿Solo me quedaré ahí sin salir a cuidar por lo menos la calle? ¿O debo de estar alerta en cada piso?.

Si algún día estamos juntos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora