I Misión interrumpida

455 42 2
                                    

Aquel era el día acordado por el que había esperado tanto tiempo. Ataviado con su disfraz, Shuichi Akai esperaba fumando un cigarrillo a que ella llegara.

El procedimiento era simple. Reconocer el auto y saltar frente a él en el momento preciso para no darle tiempo de esquivarlo. Y en lo posible no salir tan lastimado. Lo difícil vendría después. No tenía mucha experiencia con las mujeres y enamorar a una desconocida sería todo un desafío.

Le gustaban los desafíos. Más si eran para atrapar a los "lobos".

Cuando quedaban cinco minutos apagó el cigarrillo y se mantuvo atento a la calle, por donde el auto debía aparecer muy pronto. Un sonido de tacones lo distrajo. Apenas y pudo sostener a la mujer que se lanzó a sus brazos y menos evitar que lo besara. Ella le aferró la cabeza, profundizando el contacto. En el breve tiempo en que sus bocas compartieron aquella repentina intimidad, se percató de varias cosas. Ella era joven y sus labios suaves, tenía prisa y sabía a fresa, el corazón le latía frenético bajo los turgentes senos que le estampó en el pecho y lo besaba con torpeza; estaba asustada y él ni cuenta se había dado de cuándo había empezado a besarla también.

Un auto pasó junto a ellos y se apartaron. Ambos lo miraron hasta perderlo de vista.

—Lo siento, lo confundí con mi novio. Espero y pueda perdonar mi exabrupto.

Su voz era suave, poco firme.

Mentía. No era buena haciéndolo.

—Ha sido un placer —dijo él, con fingida sonrisa y una ceja arqueada—. ¿Seguro está bien?

Ella asintió, mirando hacia atrás por el rabillo del ojo. Él también miró. Nada llamó su atención.

—Debo irme, tengo prisa. Que tenga un buen día —inclinó levemente la cabeza y siguió su camino, a paso rápido.

Se volvió a mirar un par de veces, pero no a él. Akai la siguió con la vista hasta que dobló en un callejón. Miró él también a su alrededor, sin duda contagiado de la inquietud de la mujer. Se palpó los labios, todavía húmedos. Al menos le había servido de práctica para lo que venía.

Miró su reloj. Aún le quedaban algunos minutos, todo seguía su curso normalmente y volvió a posicionarse en su rol. No duró mucho. Su atención estaba más en el callejón que en la calle, en el temeroso latir del corazón de la mujer contra su pecho que en el rugido del motor del auto que se acercaba. Al confirmar que no era el que esperaba, dirigió sus pasos hacia el lugar donde la había visto por última vez, sin saber muy bien por qué lo hacía.

Su instinto de policía, se dijo, apurando la marcha. Si se daba prisa aún podía continuar su misión.

A mitad del callejón vio a la besadora anónima en el suelo. Nadie había a su alrededor.

—Señorita ¿está bien?

Ella negó, apartándose la mano del cuello. Tenía una herida por la que sangraba copiosamente. Con rapidez usó el pañuelo que le adornaba el cuello para contener el sangrado, aplicando presión. Ya no podría apartarse de ella hasta que llegara una ambulancia.

—Mierda —masculló cuando vio por la calle a su costado pasar el auto que conducía Akemi Miyano.

Su misión tendría que esperar un día más.

**********************************************************

¡Bienvenid@s a mi nueva historia!

"Disparo al corazón" será una historia de tres partes, la primera protagonizada por el ingenio de Akai, la segunda por la perversidad de Gin y la tercera una mezcla explosiva de ambos.

En ellas encontrarán suspenso, acción, intrigas, romance y si han leído otras de mis historias, sabrán que también me gusta mucho el drama.

En "Nuevo objetivo" compañaremos a Shuichi Akai intentando seguir el rastro de los miembros de la organización y sortear los obstáculos que se le interpongan ¿Será el amor uno de ellos?

Espero que se diviertan.

¡Gracias por leer!

DAC 1: Nuevo objetivo [Akai Shuichi]Where stories live. Discover now