Pétalos ˹Saiouma˼

15.

Pasó el tiempo, alrededor de unas dos semanas, en el cual tanto Shuichi como Kokichi intentaban ocultar los sentimientos que tenían el uno por el otro y lo que estos les estaban provocando, poco a poco. Los iba matando internamente, y terminaría por matarlos físicamente si no tomaban una decisión pronto.

La diferencia, era que Shuichi tenía a Kaede como apoyo en toda esta situación, mientras que Kokichi no tenía a nadie. Su propia desconfianza lo hacía aislarse y compartir lo menos posible, menos si se trataba de algo emocional. Y la única persona con la cual, quizás, se animaría a hablar, era la que estaba creando esta situación en primer lugar. Incluso intentaba huir de la misma con el propósito de dejar de amarla y sanarse por su cuenta, pero no estaba funcionando. Ni siquiera esos cuatro días en los cuales desapareció sin dar explicación alguna habían cambiado algo en él. El tratarlo mal tampoco funcionaba. La desesperanza lo iba a consumir en cualquier momento. Su enfermedad avanzaba lentamente, su tiempo era limitado.

Quizás, si iba a morir, podría abrirse un poco por una vez en su vida y declararse a Saihara antes de su cruel destino, ya que claramente este no le correspondería. No mentir por una vez. Quizás.