Vivos Y Muertos

Capítulo 11

Capítulo 11|El nuevo miembro

Miguel.- Cuidado!!! - advirtió mientras se aventaba sobre Hiro, evitando que este fuera atacado por la criatura que tenían enfrente.

Criatura que no tardo en hacerse humo y redirigirse a ellos, por lo que Miguel se puso de pie y extendió su brazo hacia el ser, causando que un fuerte viento lo asotara contra la pared, seguido de varios pétalos de cempasúchilt que lo empezaron a rodear hasta que poco a poco desapareció.

Miguel.- Uno ya no puede ni ir por tortillas en paz.

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Cass.- em... ¿Cómo dicen que terminaron así...? - preguntó entre confundida y preocupada al verlos con la ropa sucia y el cabello despeinado, aunque esto último no era raro en su sobrino.

Hiro.- Hicimos una carreara de la tienda hasta aca y tropezamos - mintió tranquilo, aún no le agradaba el tener que mentirle a su tía, aunque se había vuelto mejor en eso, al menos ya no se ponía tan nervioso.

Cass.- ¿Estan bien?

Miguel.- Solo fue una caída - dijo despreocupado.

Cass.- Ok, debo seguir atendiendo a los clientes, este se quietos que ya no son unos niños - dice para después seguir trabajando.

Miguel.- Uff, estuvo cerca, eh chinito? - comentó burlón a la vez que lo abrazaba por los hombros.

Hiro.- Que no me digas chino - se quejó molesto.

Miguel.- Entonces greñudo.

Hiro.- ¡Que no!

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Cliente.- Disculpe, le pedí un jugo de frutos rojos y tiene unas cosas flotando.

Cass.- Son los frutos

Cliente.- ....

Cass.- Le trairé uno sin frutos - dijo tomando el vaso del señor para servirle el jugo, sin embargo la batidora se encontraba entre los trastes sucios, por lo que se acerco a ellos intentando alzarlos, cuando alguien más llegó levantándolos por ella.

Miguel.- ¿Una mano?

Cass.- Gracias Miguel - lavó la batidora con la intención de hacer el jugo que le habian pedido, pero otro cliente se acerco a ella pidiéndole los 3 cafés que hace un rato había pedido - uy disculpeme, em... Deme un segundo si? - dijo llendo hacia la cafetera, frunciendo el ceño al ver que esta no reaccionaba.

Miguel.- Tal vez seria más fácil si primero la conecta - dice divertido mientras conectaba la cafetera al enchufe.

Cass.- suspira agotada y voltea hacia Miguel con la intención de agradecerle pero otro cliente llegó a pedir su orden.

Miguel.- ¿Quiere que le ayude? - se ofrece preocupado al verla tan estresada.

Cass.- No, esta bien Miguel, hago esto todos los días - dice tranquila.

Miguel.- Bueno, no hace daño un poco de ayuda.

Cass.- ¿Pero no tienes tarea de la Universidad?

Miguel.- Hiro ya me ayudo en lo que tenía - Miguel esperó poder escaparse de las matemáticas en una escuela de arte, se equivocó - y no quiero que haga esto sola, además no creo que el señor disfrute de un café con sal - dijó divertido señalando la mano de Cass, ya que estaba a punto de hecharle sal al café.