10.- 💫

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💫Alexei Park 💫

Siempre me he considerado alguien a quien le puedes contar todo, ya que, generalmente, se me da bien escuchar a las personas.

Aunque a veces, estoy tan sumida en mi propio mundo que...

OLVIDO QUE XAVIER NO IBA A PODER LLEVARME HOY.

Había pasado toda la noche entre tareas, los exámenes comienzan hoy, necesitaba estudiar y a eso me dediqué por lo menos ocho horas seguidas... Mis neuronas sofocadas olvidaron que Xavs tendría una exposición de química en otra preparatoria (todo un orgullo) y no podría llevarme, tampoco despertarme a tiempo.

Una mañana (solo un poco) ajetreada.

Muy ajetreada:

Despertarme a la fuerza por desvelarme la noche anterior, cambiarme con el feo uniforme (feo por estar puesto en mi) quedarme sentada en el piso del baño preguntándome si las gallinas podían volar antes de su evolución; ver el reloj y notar que voy tarde, intentar prepararme el desayuno (que de nuevo terminó en un desastre seguramente tóxico e incomestible) subí al último autobús para darme cuenta que olvidé mi mochila en mi habitación y a medio camino pedí que se detuviera para bajar. Corrí hasta mi casa, mi padre me vió y suspiró entregándome la mochila, y un cepillo para el cabello. También olvidé eso.

Ahora estaba corriendo hacia la preparatoria, tenía un pan integral en la boca que me golpeaba la frente por el movimiento de mis pisadas, mi mochila traía piedras y no sentía los pies.

Todo eso, en vano.

Al final me estrellé contra las enormes rejas cerradas de Desaikai.

Así que como toda adolescente responsable que asume sus consecuencias, me salté la barda.
Entrando a la primaria Desaikai (la cual siempre tenía sus puertas abiertas) y subiendo por el montón de sillas viejas que formaban una escalera directo a mi preparatoria, ésto para el contrabando de los benditos juguitos en cajita.

Los rectores llegaban una hora después del inicio de clases, por lo que el campo y los pasillos estaban vacíos.
Los maestros llegaban exactamente a su hora asignada, así que ya estaban dentro de los salones.

Ah, pero el subdirector, el muy desquiciado llegaba dos horas antes, para pasearse por los pasillos y atrapar a despeinadas con retardo (como yo, por ejemplo) y llevarlas a dirección.

Zeo solo me recibió con una burla sobre mi cabello y me mandó a los vestidores a dejar de parecer, en sus palabras, un mapache atropellado.

Un encanto de director. Cuarenta años y alma de quinceañera.

Volví a dirección para que me hiciera el jodido retardo y solo dijo:

ㅡ¿Y manchar el récord de alumna que tengo? El primer lugar de Desaikai compensa tu desastre.ㅡ Sonrió orgulloso mientras veía una pantalla donde se mostraba una enorme gráfica, con nuestra preparatoria por sobre muchas otrasㅡ Además, sé que Xavier es tu transporte, lo que lo justifica más, ¡Ese chico es un genio! ¡Adivina donde está justo ahora!

ㅡConcurso estatal de expositores "Futuros Químicos", en la preparatoria Seikaㅡ Me senté en la silla frente su escritorio.ㅡ¿Un genio que va a darle otro primer lugar?ㅡMe crucé de brazos sonriendo. La energía competitiva de nuestro director se nos había contagiado a todos desde el primer día, tal vez por eso la preparatoria tiene más reconocimiento que primaria y secundaria.

ㅡ¡Exacto! Estoy de muy buen humor Alexei, no he dejado de ver esa gráfica desde hace dos horas.ㅡNo lo ponía en duda. Dió una vuelta en su silla rotatoria y luego pasó a su modo Director Responsable en cuanto vió a un profesor entrar a dejarle unos papeles, que luego de hojear me entregó a mi.ㅡYa que estás aquí, y tarde, lleva esto a los jefes de tercero, son tres asuntos que tienen que revisar, y una reportadora.

A vs B? A + BWhere stories live. Discover now