Titulo: You Are Mine
Pareja: EunHae
Advertencia: Lemon, Mpreg, Fantasia, Muerte de un personaje.
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Un lobo de pelaje gris corría por el bosque a toda la velocidad que su cuerpo le permitía, aun podía escuchar las pisadas de los dos lobos que iban tras él. Su corazón latía con desenfreno debido a la adrenalina y el miedo que recorría por todo su ser.
Se detuvo cuando llego a la orilla del río, que era el límite entre el territorio de su manada y la otra manada. Unos gruñidos le hicieron voltear a ver encontrándose con los dos lobos que eran el doble de su tamaño.
— No podrás escapar de nosotros pequeño –Le dijo uno de ellos al estar de nuevo en su forma humana — Ahora que tu padre ha muerto...nadie podrá protegerte –
DongHae le gruño con enojo, eran unos malditos que habían atacado a su viejo padre asesinándolo.
— ¡Esto va a ser divertido! –Exclamo el otro lobo también en su forma humana mirándolo con deseo – ¿No lo crees TOP? –
— Totalmente de acuerdo contigo TaeYang –
DongHae los miro, siendo sinceros el no podría con ambos, era un lobo de menos tamaño, y por primera vez odio ser un frágil omega. Dio un paso hacia atrás mojando su pata, una alocada idea paso por su mente; dio vuelta y salto cayendo al río y nado hasta llegar a la otra orilla.
TOP y TaeYang lo miraban con furia, e impotencia; sabía que no serian capaces de pasar al territorio enemigo, ambos lobos se dieron la vuelta, volviendo a su forma animal corrieron adentrándose al bosque.
DongHae suspiro con alivio, y volvió a su forma humana. Su cabello negro un poco largo se movió por la brisa; cayó de rodillas y tomo entre sus manos un poco de tierra y piedras, sus lágrimas cayeron de sus ojos, estaba solo de nuevo por culpa de esos dos malditos.
— ¡Papá! –Grito con dolor.
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Sus orejas se levantaron al escuchar una voz gritar cerca de donde se encontraba, un gruñido bajo salió de su hocico, se dio vuelta y corrió hacia el principio del bosque, llego al río encontrando al causante de su interrupción. Con sigiló se acerco un poco más, pero sin querer piso una rama haciendo que se rompiera.
DongHae miro asustado al gran lobo que se encontraba frente a él, sus ojos se conectaron y el omega sintió una sensación que jamás había sentido antes crecer en su interior. El gruñido del lobo le hizo volver a la realidad, donde seguramente lo mataría, aunque ciertamente no le importaba morir.
Sus mejillas ardieron al recordar que se encontraba como Dios lo trajo al mundo, se tapo con vergüenza su entrepierna, miro sorprendido cuando el lobo negro cambio a su forma humana; si estaba sorprendido al verlo de lobo, como humano era como un adonis, sus ojos negros que lo miraban de una manera extraña, su nariz, sus carnosos labios y su mandíbula marcada; sus ojos bajaron por su pecho y su abdomen que se encontraba bien marcado, se obligo a detenerse antes de llegar más abajo.
— ¿Quién eres y que haces en mi territorio? –Hablo y su voz ronca lo hipnotizo por un momento. Negó con la cabeza.
— Y-yo...y-yo...—DongHae lamió sus labios con nerviosismo – L-lo siento...e-es solo que y-yo –
El hombre rubio se acerco más a él, poniéndolo aun más nervioso. Sus ojos negros lo escaneaban. Por otro lado el mayor sentía la necesidad de tomarlo, marcarlo como suyo, impregnar su olor en todo su cuerpo para que nadie más lo tocara y nunca dejarlo ir, quito esos pensamientos de su cabeza.
