COMPLICADO | JAEDO

Capítulo 10

JAEHYUN

Llegamos a uno de los mejores hoteles de la ciudad, nos besamos en el vestíbulo y nuestras manos parecían no querer alejarse del cuerpo del otro.

- Este no es un lugar apropiado – le digo separándonos, veo sus labios hinchados, sus cabello desordenado – Eres irresistible – lo conduje al ascensor

Cuando llegamos a la habitación que nos habían designado, lo tome de la mano y no me di el tiempo de siquiera ver la decoración del lugar, pongo a Doyoung, sobre la cama y le voy quitando la ropa lo más rápido que puedo. Puedo sentir sus brazos tratando de separarme.

- Espera… Jaehyun ¡Espera! – el conejito se hacia el difícil y me había empujado con fuerza. Debo admitir que la imagen del chico con la ropa desordena y los labios hinchados hacia que mi cuerpo se excite de sobremanera

Era un conejito muy sexy.

- Por favor… - lo tomo del rostro, inclino mi rostro y lo pongo sobre sus hombros. Voy besando suavemente su cuello, trato de que su cuerpo se relaje – Ya no puedo aguantar más tiempo. ¿Por qué te empeñas en negar la atracción que hay entre nosotros? Sé que también me deseas. No te molestes en negarlo – sentí su cuerpo relajarse y comencé a darle suaves mordidas

Antes de que se vuelva a negar, quite hasta la última prenda de su cuerpo, tenía todo su cuerpo descubierto para mí solo y ver todo eso era un regalo para la vista

- Tienes un cuerpo maravilloso conejito – tome sus pezones entre mis dedos y los acaricie con movimientos expertos.

El cuerpo del conejito no tardó en reaccionar a mis caricias, su cuerpo pedía por más y yo estaba dispuesto a dárselo, así que baje mi rostro hasta esa dulce protuberancia y me la lleve a los labios, comenzando a succionar este mientras escuchaba los suspiros del conejito

El calor en mi entrepierna estaba aumentando y me costaba no perder el control. Pase mis dedos alrededor de su entrada mientras jugueteaba con sus pezones, el cuerpo del conejito reacciono y el soltó un gemido suave.

- Tranquilo, estas muy tenso, necesito que relajes tu cuerpo – comencé por quitarme toda mi ropa, las cosas debían estar equitativas, podía ver el brillo de deseo en sus ojos y también podía ver… ¿miedo?

- ¿Cómo llegamos a esto? Las cosas están yendo muy rápido Jaehyun – sus labios soltaban suspiros

Acaricie su rostro, verlo así con el cabello desordenado debajo de mí, la realidad era mucho mejor de lo que me había imaginado, nunca nadie me había excitado tanto como él. Baje mi rostro y uní nuestros labios en un beso delicado.

- Quiero que seas mío. Te quiero hacer mío ahora mismo – me volví impaciente y olvide la razón por la que estábamos aquí

Con solo mirarlo, el deseo invadía mi cuerpo de una manera desconocida para mí.

- Todo esto es nuevo para mi, nunca antes me había sentido así -  las palabras del conejito me sonaron tan falsas

No dije nada, solo me dedique a besarlo suavemente mientras masajeaba su entrepierna, Doyoung, solo se dedicó a soltar gemidos, aproveche el momento para insertar uno a uno mis dedos haciendo movimientos circulares y de tijeras. Debía admitir que el conducto de entrada del conejito era estrecho y eso me encantaba.

- Jaehyun, hay algo que tienes que saber – con sus manos detiene mis movimientos – Es la primera vez – su voz casi desapareció al decir lo último y de alguna forma su rostro se puso más rojo de lo que ha estaba.

¿Así que esa es tu manera de actuar y mentir?

- Es todo un honor que me des esta oportunidad – trato de que las palabras no suenen tan sarcásticas

No tarde en ponerme en una mejor posición, deseaba tanto este momento, introduje mi glande en su cuerpo y me maravillo la estrechez que encontré. Desesperado por sentir más, subí sus piernas a mis hombros para poder llegar más fondo.

Solo no esperaba que el conejito soltara un fuerte grito de dolor, me quede quieto por la sorpresa. No esperaba que su mentira llegara tan lejos.

- Por favor, se más cuidadoso – su rostro estaba rojo y lo cubría con una mano – Me dolió… pero nada que no pueda aguantar – era bueno para las mentiras

- No te preocupes, seré más cuidadoso – esta vez fui más cuidadoso siguiendo sus palabras

Mis movimientos fueron suaves y cuidadosos. Cuando sentí su cuerpo más relajado comencé a hacer el movimiento más rápido, cada caricia que me daba el conejito me provocaba sensaciones desconocidas en el cuerpo. Acelere el ritmo, mientras Doyoung, pasó sus brazos por mi cuello para poder unir nuestros labios en besos llenos de lujuria.

Nuestras lenguas jugaban entre ellas, nuestros cuerpos disfrutaban cada roce que se daba entre ellos, disfrutaba de la estrechez de su entrada, disfrutaba de morder esos dulces labios. La habitación se llenó del sonido que provocaba el choque de nuestros cuerpos.

- Jaehyun, yo… no aguanto – podía sentir que el conejito se vendría pronto, su cavidad se había hecho más estrecha y los movimientos más certeros

- Hagámoslo juntos – basto unos movimientos más para sentir el clímax inundar nuestros cuerpos

Mientras nuestros cuerpos llegaban al clímax, nuestras miradas se encontraron, ambos cansados, salí de su interior y me tumbe a un lado de su cálido cuerpo, no pude resistir a la necesidad de abrazarlo y acércalo más a mí.

- Es la primera vez que disfrute tanto del acto del amor – me dedique a besar su hombro

- Debería volver a mi departamento – dijo ignorando mi comentario

- Esta noche no, esta noche eres mío – lo abrazo con más fuerza y poco tiempo después ambos caemos en un sueño reparador

Desperté sintiendo la molesta luz del sol entrar por las ventanas, pero era el único despierto, el chico delante de mi seguía durmiendo.

Se veía tan hermoso durmiendo tal y como ver a un ángel.

Me senté, me estire por un vaso de agua, me di la vuelta para ver que no lo haya destapado y al hacerlo pude percatarme de la mancha en las sabanas.

¿Acaso eso que estaba en las sabanas era sangre?

- Buenos días – la voz de Doyoung me distrajo de mis pensamientos

- Buenos días… ¿Dormiste bien? – desvió mi mirada de aquel punto

- Sí, pero necesito una ducha – lo veo levantarse de la cama con dificultad y una mueca en el rostro

- ¿Duele? – veo sus piernas temblar

- Un poco, pero fue mi primera vez… supongo que es normal – se envuelve una de las sabanas a la cintura y se mete en el baño, apenas escucho el sonido de la puerta cerrarse levanto las sabanas y aquella mancha entre las sabanas se veía demasiado real.

Esa mancha de ahí era real, puse mis manos sobre mi cabeza sin poder creer lo que pasaba.

¡¿Enserio era virgen?! Y lo tome sin cuidado alguno.

¿Entonces aquel grito?… No fingía

¡VIRGEN!

Aquel conejito era virgen...