Siempre Tuya

CAPITULO 28 Parte 1 de 4

BÁRBARA

Al parecer Daniel no recuerda nada de lo que sucedió ayer, por una parte me alegro, eso significa que puedo hablar con el de lo que sucedió con Jackson.

-Ayer estabas bastante ebrio Daniel- digo sentándome al pie de la cama

-Ahora entiendo este maldito dolor de cabeza- dice cerrando un momento sus ojos, como intentando recordar que paso ayer

-Alexa me llamo para decirme que estabas aquí, así que...- digo encogiéndome de hombros

Veo como Daniel abre poco a poco sus ojos y noto como su mirada cambia de un momento a otro, ¡rayos creo que recordó lo que pasó!

-Dani yo...- digo tanteando el terreno, no sé cómo reaccionara Dani

-No digas nada Bárbara- dice eso y se levanta de la cama

-Daniel, déjame explicarte las cosas- me levanto al igual que él, intentando detenerlo

-No hay nada que explicar, las fotos dicen màs que mil palabras Bárbara- contesta molesto

-¿fotos? ¿De que estas hablando Daniel?- pregunto confundida

-No mientas Bárbara

-Si me dijeras de que fotos estamos hablando, podríamos aclarar todo esto

Daniel esta por contestarme pero un toque en la puerta lo detiene

-¿puedo pasar chicos?- es la voz de Alexa

-Por supuesto- contesto de inmediato

-Buen día- dice con una sonrisa- ¿Cómo amanecieron?

-Muy bien gracias- contesto

-Bien- dice Daniel

-Venía a decirles que el desayuno está listo

-No te molestes Alexa, yo ya me voy- dice Daniel llegando a la puerta con la intención de irse- lamento mucho lo de anoche

-No te preocupes Daniel, para eso estamos los amigos

Veo como Daniel sale de la habitación, molesto, tengo que hacer que me escuche.

-Lo siento Alexa, pero debo hablar con él, gracias por todo

-Está bien Barbi, no te preocupes

Me despido de ella y salgo de su departamento. Al salir veo a Daniel esperando el ascensor, camino màs rápido para irme con él, ¡tiene que escucharme si o si!

El ascensor abre sus puerta y entramos los dos, al cerrarse las puertas un incómodo silencio inunda el lugar.

-Daniel debes escucharme

-No quiero hacerlo Bárbara- dice alejándose de mi

-Por lo menos dame el beneficio de la duda, solo te pido eso

Me mira y puedo ver en sus ojos como se está debatiendo entre escucharme o mandarme directo al carajo.

-Está bien

El ascensor llega a la planta baja, salimos y llegamos la entrada del edificio.

-Vamos, mi auto esta por allá

Subimos al auto y Daniel aún sigue callado, tengo que buscar un lugar tranquilo para hablar con él. Veinte minutos después detengo el auto frente a un parque. Bajamos y caminamos un rato hasta que ubicamos una banca y nos sentamos.

-Muéstrame las fotos, en las que según tú te estoy engañando

Me mira enarcando una ceja, saca de su pantalón su celular, lo enciende y busca las fotos.