|Capítulo 3|

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[Siete meses después]

Joel|

Salí de la universidad y me fui a mi casa rápido, quedaban tres semanas para terminar la universidad. Tenía que estar centrado sólo en la universidad.

Tenía tareas que hacer, también debía asear la casa ya que iba a llegar mi familia a cenar, hace mucho no los veía, venían de visita, ellos viven en Hesperia, California.

Llamé a Luna, necesitaba su ayuda. Ella se convirtió en mi mejor amiga, todo fue muy rápido, nos conocimos muy bien y pues bueno, estoy feliz.

Dejé mis cosas sobre la mesa y comencé a ordenar todo rápido. Luna dijo que en 30' estaba aquí.

Eran las 5pm, mi familia llegaría a las 7pm.

Tocaron la puerta y corrí a abrir, seguramente era Luna.
No era Luna, era Emilia.

-Hola -besó mi mejilla y entró.

-¿Qué haces aquí? -le pregunté.

Estábamos separados otra vez, en éstos meses hemos vuelto unas tres veces.

-Vine a disculparme, Joel, perdón por lo del otro día, sé que sólo salís con tus amigos para divertirte... y eso -dijo ella, la última vez que salimos todos juntos me hizo una escena de celos innecesaria.

-Bueno, está bien, Emilia.

Miré hacía la puerta y allí estaba Luna.

-Hola Luna -la saludé.

-Hola -entró y se quedó mirando a Emilia.

-Hola, ¿qué hacés acá? -le preguntó Emilia.

-La llamé yo -le respondí a Emilia antes que Luna le diga algo.

-Tenemos muchas cosas que hacer, Emi... así que si nos disculpas -dijo Luna.

-¿Cosas cómo qué? -preguntó ella- Nos vemos más tarde, Jo, te quiero.

Se acercó y dejó un beso en la comisura de mis labios.

-Cosas -dijo Luna- Mhm...

-Adios Emilia.

Emilia salió por la puerta y la cerré.

-¿Volvieron o qué? -preguntó Luna.

-No, vino a pedirme disculpas -le dije.

-Ajá, pero te besó -dijo ella.

-¿Y qué? ¿Estás celosa? -le pregunté, ella me ignoró por completo.

-Yo limpio la cocina y tú la sala, Joel -dijo ella.

-Como usted mande.

Limpiamos toda la casa, terminando de escuchó que tocaron la puerta. Luna abrió y era mi familia.

Los saludamos y entraron. Llegó mamá, papá, Israel, Gabriel y Emanuel.

-¿Cómo estás hijo? -me preguntó mamá, se quitó la chaqueta y se sentó en el sofá.

-Bien, muy bien por suerte, ¿y tú? -le pregunté, fui a la cocina por jugo y vasos, Luna me acompañó.

-Bien, ¿y qué hacían? -preguntó.

-Pues estábamos limpiando un poco -dijo Luna.

Ella ya conocía a mi familia y se llevaban bien.

-Voy a darme una ducha rápido, ¿si? -dije, ellos asintieron y me fui a duchar.

Luna|

Nos quedamos conversando un rato con la mamá y el papá de Joel.

-Luna -me llamó Gabo- Te está hablando Joel.

-Disculpen -le dije a los padres de Joel y fui a la habitación de Joel.

Él estaba en el baño, me asomé y estaba mirándose al espejo y tapándose sus cositas con una playera.
Él me miró y se rió.

-Oye no mires mucho -dijo- ¿Me pasas una toalla? Me he olvidado.

-No te estoy mirando tontito -dije- Ahí va.

Tomé una toalla de su closet y se la pasé.
Volví a la sala.

-Bueno, yo ya me voy -dije.

-No Luna, quédate a cenar con nosotros, linda -dijo la señora Patricia.

-Es que es una cena familiar y no quiero molestarlos mucho -dije- Ahorita Joel sale y me lleva a mi casa.

-No nos molestas, todo lo contrario. Quédate -insistió ella.

-Bueno... está bien, me quedo a cenar con ustedes.

-Perfecto -sonrió ella.

Joel salió de la habitación con su cabello mojado y sin camisa, era realmente sexy.
Me encantaba Joel aunque él sólo me veía como su amiga.

[...]

Llegó el fin de semana, no me habían invitado a ningún lado así que me quedaría en casa.

Eran las 11am, escuché la puerta, fui a abrir y me encontré a Joel. Tenía carita triste.

Él sólo me abrazó.
Correspondí a su abrazo.

-¿Qué te pasó? -le pregunté.

-Nada.

-¿Emilia...? -lo miré y él asintió- Ay Joel...

-No quiero hablar de ella, no quiero que me regañes, no quiero que me hables sobre ésto, por favor.

-Bueno, ya, pero ¿qué hizo?

-Me está diciendo de cosas sólo porque le dije que hoy no podía salir con ella y ya, no quiero salir con ella éste fin de semana, sólo quiero salir con mis amigos.

-¿Iban a salir? -le pregunté.

-Con los chicos y Sam, sí, ¿no ibas a ir tú? -fue para la cocina.

Bueno... ahora me dejan de lado.

-No me dijeron nada a mí, no han hablado en el grupo -dije.

-Uhm.

-Y bueno, iba a pasar en cualquier momento ésto -dije.

En verdad me importaba, quería sonar indiferente pero no podía.

-Lo siento, Lu, no lo sabía -dijo él, se acercó y me abrazó por la cintura- Te quiero mucho, ¿lo sabías?

Era la primera vez que me decía que me quería mucho.

-También te quiero mucho, Joey -le dije, él besó mi frente, pasé uno de mis brazos por su cuello y puse mi mano derecha en su pecho. Estaba un poco nerviosa y tenía ganas de llorar.

Él bajó su mirada y me miró.

-No llores boba, yo hablaré con ellos, ¿sí? -tomó mi rostro con su mano izquierdo y acarició suavemente mi mejilla con su pulgar, su mano era grande.

-No estoy llorando -le dije mirándolo.

-Tienes carita de que vas a llorar -dijo él- Hablaré con ellos, ¿por eso no has ido la semana pasada?

-Tampoco me han dicho nada sobre la semana pasada -dije.

-Que imbéciles que son -dijo él- Vamos a hacer el almuerzo.

Me tomó del brazo y me arrastró a la cocina.
Cocinamos algo súper rico y almorzamos los dos.

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Fool |Joel Pimentel. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora