El diario de Raf [Transformers Prime]

No juzgues un bot por su portada (4/16)

Hoy aprendí algo nuevo sobre Decepticons esta semana. Algo increíble sucedió: ¡Un autobot se puso en contacto con nosotros! Wheeljack. Es un viejo amigo de Bulkhead ... es un gran soldado que vaga por el universo solo. O eso es lo que se suponía que hacia.

Pero me estoy adelantando.

Comenzó cuando recibimos una señal amigable desde el espacio profundo esta semana. Bulkhead estaba emocionado al ver que era Wheeljack, porque solían ser los mejores amigos, en esta unidad de élite llamada Wreckers. (Suena como un reality show, ¿verdad?) Cuando apareció, tuvimos una fiesta. Jugaron a este juego llamado "lanzar", que básicamente consiste en jugar a atrapar las cosas más grandes que pueden encontrar. Miko tocó su guitarra (creo que incluso esta mejorando), y le mostré a Bee cómo hacer el baile del robot. Fue asombroso.

Pero luego Bulkhead comenzó a sospechar, porque dijo que Wheeljack no estaba actuando como él mismo. ¡Resulta que no era Wheeljack en absoluto! Era solo un Decepticon pretendiendo ser el Wheeljack real, el cual estaba encarcelado en la Nemesis, ¡El barco de lo cons!.

¡Así es! De hecho, ¡tuvimos un decepticon dentro de la base todo este tiempo! Me da escalofríos de solo pensarlo. Pero apuesto a que Miko tuvo más que yo: cuando Bulkhead echó a perder el plan del Con, la tomó como rehén. Debo decir que ella estaba bastante tranquila a pesar de la situación.

De todos modos, gracias a una idea de último momento y una lucha increíble, recuperamos el verdadero Wheeljack. ¡De hecho, él mismo salió de la Némesis! Muy fresco, diría yo. Entonces tuvimos otra fiesta. Deveras. Todos pensamos que Wheeljack se quedaría, y tendríamos otro Bot aquí en la Tierra ... pero despegó tan pronto como Ratchet arregló su nave. Todo el mundo estaba disgustado de que se fuera.

Los bots no siempre son lo que parecen. Quizás eso también sea cierto para las personas. ¡Por eso me gustan las computadoras! Porque siempre puedes reprogramar. Simple. Elegante. Sin sorpresas.