CAPÍTULO 36: MOMENTO INCOMODO.

3.8K 189 23
                                    

Suspiré al terminar de hablar, es mucha información por hoy además por sus caras creo que aún no lo procesan bien, además no es que pueda contarles todo, eso los pondría en más peligro, sin contar el dolor que estoy sintiendo al recordarlo, es horrible la sensación cómo si volvieran a poner sus manos sobre mi cuerpo y no quiero llorar frente a ellos, en especial frente a Jane.

-¿Te metí a cosas ilegales cuando eres una agente de la CIA? —me dijo Diablo casi gritando. —no me jodas, tan pequeña y podías arrestar...mi*rda. —comentó, sé que habló de eso y no de lo otro para no hacerme sentir mal.

-No, soy exagente, después de cinco años encontré a Tato...me alejé de todo eso, cambié mi nombre a Claudia, cómo tú me conociste y todo lo relacionado con Anahí desapareció, después me tuve que cambiar el nombre a Allison por lo que pasó con Antonio. —fruncí mi ceño mirándolos. — ellos me enseñaron todo lo que sé, cada uno de los que abusó de mí están en la cárcel...excepto los primeros tres...me costó mucho no dejarme llevar por la ira y terminé matándolos después de unas cuantas torturas. —me encogí de hombros.

-Wow...eso es algo extraño y casi irreal...—me dijo Jane mirándome confundida. — ¿y qué hiciste durante todo ese tiempo?

-Si te digo tendré que ponerte tras las rejas o matarte. —sonreí levantándome al ver a mi papá entrar junto con los demás. —papá mira, ella es Jane trabajará con nosotros por ahora...me metió en un lío y ahora tiene que sacarme de eso, Jane él es mi papá Richard. —sonreí y después de presentarle a los demás.

-¿Qué pasó ahora? —preguntó, me hice a un lado dejando que se sentara en mi lugar y suspiré mirándolo. —esa cara no me gusta...no quiero otra tontería relacionada con tu jefe.

Después de contarle lo del estúpido contrato y darle la copia no ha dejado de sonreír...me encanta el apoyo familiar, en serio es lo mejor del mundo...maldito anciano.

-Eso es perfecto, entras a su casa, a su empresa y que mejor que cómo su esposa...me encanta cuando las cosas salen perfectas. —me dijo muy entusiasmado mientras los otros se parten de la risa.

-¿Qué? Jod*r...a ti ya la edad te afecta, no me pienso casar, el contrato es demasiado estúp*do, esas malditas cláusulas son una burla, además no me puedo divorciar ¡será durante el tiempo que él quiera! —en serio lo es, de ningún modo llamaré así a la mamá de mi jefe.

-Son pequeños detalles, eso no importa, ¿qué te he dicho de controlar tu enojo y pensar con la cabeza fría? —me miró enojado. —tú realmente te llamas Anahí, trabajas para la CIA en estos momentos, estas cómo Allison por cuestiones de trabajo, por lo cual ese contrato se anula en cuanto nosotros terminemos con esto. —la verdad me siento estúp*da... ¿por qué no lo pensé antes?

-Si...pero en esa horrenda cosa dice que debemos tener un bebé en menos de un año y eso sí que no...los mocosos y yo no nos llevamos bien. —ni de chiste tendré un bebé de él y menos por el riesgo en el que vivo cada maldito día.

-Oye...no vamos a durar más de unos meses en esto, toma pastillas o lo que sea para no quedar embarazada o dile que no puedes tener hijos, se supone que aún no tienes conocimiento del contrato, así que sé inteligente y no te dejes llevar tus sentimientos de nuevo. —dice mi papá...como él no es quien tiene que aguantar al estúp*do de mi jefe.

-¿Estás insinuando que me voy a acostar con él? Eso sí que no. —comenté indignada y bufé. —hablando del idi*ta ese, ¿cuándo regresa? No me gusta eso que conozca a Antonio y a Troy esos dos venden droga. —me cruce de brazos recargándome en la pared.

-Lo sé...pero eso quiere decir que Matthew está involucrado, pero él nos servirá para ir por el pez gordo, esperemos que sea tan estúp*do cómo dices y caiga en tus encantos. —dijo Richard y yo rodé mis ojos con fastidio...jod*r algui49en ya mátenme.

Una hora... ¡UNA MALDITA HORA DISCUTIENDO LO MISMO! Jod*r...estos id*otas no dejan de discutir y apostar cuánto tiempo voy a aguantar casada con mi jefe, pero no solo eso si no que otros apuestan que me voy a enamorar de él... ¿HELLOU? No llevo ni una maldita semana cerca de él para que siquiera me caiga bien, mucho menos para enamorarme, además eso es una pérdida de tiempo y dan ganas de vomitar.

-Ya basta...no tengo tiempo para esto, bola de animales, dentro de un rato tengo una maldita pelea y mi cuerpo necesita relajarse porque me duele todo. —los miré frunciendo mientras me levantaba con el estúpido contrato para dárselo a Marcus.

-Toma...cuando tengas algo bueno que decirme sobre lo que haremos me llamas...puede que tal vez acepte casarme, pero lo de tener hijos no y no voy a discutir eso. —cómo dije no me gustan los bebés, lloran mucho, son frágiles, quieren todo y uno les tiene que dar amor, paciencia, esas cosas que no tengo...un bebé es como una mini Jane...no gracias, con una es más que suficiente.

-Tengo un nuevo plan. —dijo Marcus mirando el contrato y después a mí. —en primera no vas a pelear, estás lastimada, no nos sirves en el hospital...lo sabes, si es pelea femenina Carmen estará en tu lugar y no te estoy preguntando. —gruñí bajo cruzándome de brazos, mandón. —segundo...tú no sabes del contrato, en cuanto llegue Matt te tienes que comportar y por último tienes que ser más coqueta con él, si piensa que te tiene a sus pies puede que te cuente del contrato o no tenga la necesidad de usarlo que es mejor para ti, ¿no? —me dijo sonriendo y yo tuve que exhalar demasiado profundo para no matarlo.

-Entendido...yo no sé nada y cuando venga...wow... ¡me enamoré de él en menos de una semana porque es mi príncipe azul! ¿Quién diría que ese hermoso hombre lo sería? —le dije fingiendo estar emocionada mientras lo miré sonriendo — ¿así o más enamorada, Marcus? —bufé negando despacio sin dejar de mirarlo.

-Amí no me hablas así enana...estoy empezando a cansarme de esa maldita actitudque tienes, tu no eras así...si dices que ya no te importa lo que pasó y ahoraestás bien entonces deja de comportarte cómo una niña que se cree indomable,porque esa no eres tú. —me dijo Marcus mientras se acercaba mi rostro. —loolvidas y admites que no puedes con esto porque te vas a quebrar y sabes que enel fondo sigues siendo la misma niña indefensa y frágil. —levantó más mi rostroy aprieto mis puños mirándolo seria.

MI JEFEWo Geschichten leben. Entdecke jetzt